Las heridas fueron postmorte.
MEXICALI.-El cadáver localizado
al interior de una vivienda en la colonia Baja California no fue
ejecutado, sino que pereció por una supuesta sobredosis y posteriormente
fue deborado por dos canes pítbull que tenía para cuidar su hogar.
Sobre esto habló el director del Servicio Médico Forense, Francisco
Acuña Campa, quien indicó que la causa de la muerte hasta el momento se
encuentra indeterminada, pero todo parece indicar que falleció debido a
un excesivo consumo de enervantes, aparentemente de “cristal”.
Según el informe de la necropsia se supo que el hoy occiso llamado Luis Jorge Oregel Marrón de 52 años de edad, quien vivía en el municipio de Tijuana, pero en el 2006 decidió cambiar de su residencia a la capital del Estado debido a que fue victima de dos secuestros, la mutilación que sufrió no fue realizada con un objeto punzocortante fino, sino que las extremidades fueron trituradas y posteriormente jaladas hasta su desprendimiento.
Dichas heridas fueron realizadas después de morir y no contaba con alguna otra lesión que pudiera haber causado la muerte.
Según el informe de la necropsia se supo que el hoy occiso llamado Luis Jorge Oregel Marrón de 52 años de edad, quien vivía en el municipio de Tijuana, pero en el 2006 decidió cambiar de su residencia a la capital del Estado debido a que fue victima de dos secuestros, la mutilación que sufrió no fue realizada con un objeto punzocortante fino, sino que las extremidades fueron trituradas y posteriormente jaladas hasta su desprendimiento.
Dichas heridas fueron realizadas después de morir y no contaba con alguna otra lesión que pudiera haber causado la muerte.
(EL MEXICANO/
Eduardo VILLA /
jueves, 2 de enero de 2014 04:45 p. m.)
No hay comentarios:
Publicar un comentario