domingo, 11 de junio de 2017

HOMBRE MATA A SUS SECUESTRADORES; APROVECHA DESCUIDO Y HUYE

Los hechos tuvieron lugar en un domicilio ubicado en las calles San Antonio de la Cal y Artículo 72, en Escobedo, Nuevo León






Foto: ABC/Especial

CIUDAD DE MÉXICO.- Los tres hombres que fueron encontrados sin vida en el interior de un domicilio en el municipio de Escobedo, de Nuevo León, resultaron ser secuestradores; fueron asesinados por su víctima, informaron fuentes oficiales.

De acuerdo a las autoridades, el hombre se encontraba privado de su libertad desde el lunes y aprovechó un descuido de sus captores para matarlos con un arma larga que se encontraba en el lugar.

Posteriormente, huyó en uno de los autos de los plagiarios, el cual, abandonó sobre la carretera a Laredo esta mañana.

Los cuerpos de los tres secuestradores, los cuales presentaban disparos en la cabeza, fueron localizados alrededor de las 16:40 horas, gracias a los datos que proporcionó la víctima.

El hallazgo se realizó en el domicilio ubicado en las calles San Antonio de la Cal y Artículo 72, en el Barrio Oaxaca.

*Este contenido es publicado con autorización de ABC.


(EXCELSIOR/ ABC/REDACCIÓN/ 09/06/2017 21:43)  

ELEVADOR PRENSA Y PARTE EN DOS A DOCTOR CHINO


Cámaras de seguridad captan el momento en el que el ascensor le arranca las piernas; la víctima trabajaba en un hospital de Taipéi, en Taiwán



El doctor Zou Wenhao, de China, quedó prensado por un elevador que lo partió en dos. Imagen: Captura de video

CIUDAD DE MÉXICO.- Luego de salir de un consultorio en el centro médico de la Universidad de Tilan para recibir un tratamiento, el doctor Zou Wenhao apenas había dado un paso para entrar al elevador cuando éste se cerró, lo prensó a la mitad y comenzó a subir, por lo que el profesional quedó partido a la mitad.

Aun cuando la mitad de su cuerpo quedó dentro del ascensor, Wenhao alcanzó a tomar su celular, tal vez para pedir ayuda.

Aunque los bomberos trataron de ayudar al doctor del hospital Taipéi Rongzong Mountain, tardaron cerca de una hora en llegar a él y cuando lo hicieron éste ya había muerto por la gran cantidad de sangre que perdió al ser partido a la mitad.


(EXCELSIOR/ REDACCIÓN/11/06/2017 09:18)

IMSS DISCRIMINA Y RECORTA INCAPACIDAD POR MATERNIDAD A SIETE EMBARAZADAS, SEGÚN LA CNDH


CIUDAD DE MÉXICO (proceso.com.mx).- La Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH) emitió una recomendación al IMSS por su negativa a otorgar a siete derechohabientes el periodo completo de incapacidad por maternidad de 12 semanas a que tienen derecho.

En un comunicado, el organismo informó que emitió la Recomendación 23/2017 dirigida al director general de esa institución, Mikel Andoni Arriola Peñalosa, para salvaguardar, entre otros, los derechos a la igualdad y no discriminación de siete mujeres y de sus hijas e hijos, ante la disminución indebida del periodo de incapacidad por maternidad tratándose de partos anticipados.

Lo anterior, precisó la CNDH, basado en el artículo 123 constitucional, el artículo 170 de la Ley Federal del Trabajo y diversos instrumentos internacionales en materia de derechos humanos.

“Se trata de restricciones ilegítimas al derecho a la seguridad social, en la modalidad de protección a la maternidad, mediante las cuales se violaron los derechos humanos a la seguridad jurídica y legalidad; a la igualdad y no discriminación, y a una vida libre de violencia de las agraviadas, que también trasgredieron el principio del interés superior de la niñez, contra sus ocho menores hijas e hijos”, precisó el organismo.

Agregó que se integraron siete expedientes con motivo de igual número de quejas interpuestas por las víctimas.

Precisó que en cuatro casos el nacimiento ocurrió antes de que las mujeres trabajadoras aseguradas por el IMSS contaran con el periodo de descanso prenatal, que se otorga a las 34 semanas de gestación; por lo que una vez presentado el parto, el IMSS sólo les otorgó 42 días de incapacidad postparto, lo que redujo a la mitad el periodo de 12 semanas de descanso y recuperación a que tienen derecho.

En los otros tres casos, el IMSS determinó reducir dicho periodo debido a que la fecha del parto no coincidió con la calculada por los médicos del Instituto o por haber proporcionado información insuficiente a las mujeres trabajadoras, lo que ocasionó que no acudieran a tiempo a solicitar la incapacidad por maternidad; de modo que, en lugar de haber contado con un lapso de recuperación correspondiente a 84 días (12 semanas), en un caso fue de 59, en otro de 63 y en el tercero de sólo 42 días.

De la información recabada por la CNDH, se acreditó que la reducción en el periodo de incapacidad por maternidad se aplica de manera general a todas las madres trabajadoras aseguradas del IMSS que presentan partos prematuros; e incluso, en un reciente criterio emitido por el Instituto con la finalidad de permitir la transferencia de semanas de maternidad del periodo prenatal al postnatal, expresamente excluye a las mujeres cuyo producto de la gestación nazca antes de las 34 semanas, a quienes sólo se les otorgan 42 días de descanso y no los 84 con que cuentan todas las mujeres aseguradas y derechohabientes que concluyen su embarazo en la forma prevista por el Instituto.

Como consecuencia de las violaciones a derechos humanos de las víctimas, causadas por los servidores públicos del IMSS señalados en la recomendación, la CNDH consideró procedente la reparación integral de los daños que les fueron ocasionados, a través de medidas de restitución, satisfacción y de no repetición, en términos de la Ley General de Víctimas. Dicha reparación deberá contemplar el pago del subsidio económico y el otorgamiento del descanso, con el que se garantice su derecho a 84 días de incapacidad por maternidad.

Además, la Comisión recomendó al IMSS iniciar las acciones para que su normatividad sea modificada a efecto de ajustarla a los estándares de derechos humanos, tanto de fuente nacional como internacional, con el objeto de garantizar a todas las mujeres afiliadas a ese Instituto su derecho a la seguridad social, en la modalidad de protección a la maternidad, mediante el otorgamiento de las 12 semanas de descanso, independientemente del número de semanas de gestación que hubieren transcurrido al momento del nacimiento; e incluso, valorar la ampliación de dicho periodo hasta 14 semanas, en caso de que el producto de la gestación requiera atención médica hospitalaria o nazca con alguna discapacidad, como lo reconoce la Ley Federal del Trabajo en su artículo 170.
También se recomienda al IMSS impartir a su personal cursos en temas de educación, formación y capacitación en materia de derechos humanos, principio del interés superior de la niñez, interpretación conforme y pro persona, así como realizar campañas de difusión, con objeto de garantizar que en cada una de las Unidades de Medicina Familiar y Hospitales de Alta Especialidad con atención gineco-obstétrica, se proporcione información oportuna, clara y precisa a las madres trabajadoras, respecto del derecho a contar con el periodo de descanso por maternidad de 12 semanas; e incluso, con la posibilidad de transferir semanas y ampliarlo en los casos previstos por el artículo 170 de la Ley Federal del Trabajo.


 (PROCESO/ REDACCIÓN/ 11 JUNIO, 2017)

GOLPEAN A FOTOPERIODISTA EN VERACRUZ


Andrés Crespo, fotoperiodista de El Mundo de Córdoba, fue herido de un golpe en la cabeza durante un presunto intento de plagio.

La agresión tuvo lugar la noche de este sábado en la colonia El Paraíso, municipio de Paso del Macho, en la zona centro de la entidad.

La Jornada informó que el fotoperiodista se desplazaba a bordo de su motocicleta, cuando al llegar a un tope, sujetos armados le dieron alcance y lo encañonaron para intentar llevárselo.

En el forcejeo, el reportero sufrió un golpe en la cabeza, pero logró escapar de sus agresores.

Este año ya fue asesinado un periodista en la entidad y otro más baleado en Poza Rica.


(RIODOCE/ REDACCION/ 11 junio, 2017)

"HUACHIESTACIÓN", TENÍA MIL LITROS DE DIÉSEL PARA VENTA

La madrugada de este sábado, Policía Federal logró ubicar y desmantelar un punto clandestino de venta de combustible ilícito



Imagen ilustrativa, Foto: Eco Informativo

Puebla.- Cerca de las 05:00 horas del pasado sábado, los agentes federales ingresaron al establecimiento, que está sobre el kilómetro 74, en sentido de México a Puebla, en las inmediaciones de Texmelucan y Tlahuapan en donde encontraron casi medio centenar de galones con un total de mil litros de hidrocarburo.



Desmantelan punto de venta ilícito, Foto: El Sol de Puebla

NO HUBO NINGUNA PERSONA DETENIDA

Los elementos policiales ubicaron 41 galones de 20 litros, un tambo de 110 litros, otro más de 50 litros y un bidón más de 60 litros; dando un total de mil litros de hidrocarburo de procedencia ilícita (diésel).

El punto de venta así como los contenedores con su respectivo combustible fueron asegurados y puestos a disposición de las autoridades ministeriales de la Federación en la delegación de la Procuraduría General de la República (PGR) en Puebla.

Con información de El Sol de Puebla


(EL DEBATE/REDACCION/ 11 DE JUNIO 2017)

#CABOSANLUCAS: DOS CABEZAS EN UNA HIELERA ENCONTRARON HOY EN LA MADRUGADA


La madrugada de este domingo, aproximadamente a las tres de la mañana, oficiales de la Policía Municipal en sus recorridos de sobrevigilancia de la zona centro del puerto, encontraron en las calles de Zaragoza y 16 de Septiembre una hielera de color blanco y un par de cartulinas con mensajes.

Al observar el contenido de la hielera, se percataron que en el interior estaban las cabezas de dos personas por lo que de inmediato se dio parte al mando mixto para que se hicieran cargo del asunto.

Aunque al momento no se ha informado nada adicional al respecto, al amanecer la zona se encontraba acordonada por elementos de la Armada, en tanto los servicios periciales realizaban el procesamiento del lugar del hallazgo.

Se espera la confirmación de estos hechos hoy mismo por parte de la Procuraduría de Justicia. Aunque ya de manera extraoficial se conoce que las cabezas corresponden a los dos cuerpos desmembrados que fueron encontrados ayer sábado debajo del puente EL TULE.


(COLECTIVO PERICU/ REDACCION/ JUNIO 11, 2017)

EL VIDEO DEL ASESINATO DE UN HOMBRE EN EDOMEX EN 2015 SALE A LA LUZ; EL HOMICIDA AÚN ESTÁ LIBRE

Leticia García y Diego Barrera estaban casados. Ella tenía un amante y habría planeado con este el asesinato de su esposo, quien terminó acribillado en Nezahualcóyotl, Estado de México.


Ciudad de México, 10 de junio (SinEmbargo).- Diego Barrera Raymundo fue ejecutado en Nezahualcóyotl, Estado de México, en 2015, y el video del momento quedó guardado en un cajón. Ahora, dos años después, familiares de la víctima difunden las imágenes, pues la autora intelectual del crimen fue liberada.

En un video difundido por Denuncia Ecatepec se muestra el momento exacto en que Raymundo García Díaz, el agresor, se aproximó a Barrera y le disparó en la colonia Campestre Guadalupana.


Diego caminó junto a su esposa, Leticia García -señalada como autora intelectual del ataque-, y al llegar a una esquina fue acribillado por García Díaz.
Foto: Captura.

Diego caminó junto a su esposa, Leticia García -señalada como autora intelectual del ataque-, y al llegar a una esquina fue acribillado por García Díaz.

El atacante sería el amante de Leticia García, quien fue liberada por autoridades del Edomex por falta de pruebas, según información de Denuncia Ecatepec.

Dos años después, el pistolero no ha sido aprehendido.


(SIN EMBARGO.MX/ REDACCIÓN / SIN EMBARGO/ JUNIO 10, 2017, 10:01 PM)

LAS CLAVES DE LA COMPARECENCIA DE COMEY


En un hecho histórico, el exdirector del FBI, James Comey, compareció por cerca de tres horas ante el Comité de Inteligencia del Senado que investiga los motivos de su despido y la interferencia rusa en las pasadas elecciones.

En la audiencia pública, el ex funcionario reveló detalles de sus conversaciones con el presidente Donald Trump, las presiones que recibió por parte del mandatario y las que considera que fueron las verdaderas razones de su despido.

Además, reconoció por primera vez de manera pública que no tiene ninguna duda de que el Kremlin interfirió en las elecciones, y agregó que es probable que la investigación en algún momento alcance a Trump.

Éstas son las claves de su comparecencia.

¿INTENTÓ RUSIA INFLUIR EN LAS PASADAS ELECCIONES?

“No tengo dudas”, respondió. Comey asegura que tuvo conocimiento por primera vez de la intromisión rusa en 2015. Reconoce que sí hubo intromisión por parte de Rusia en los recientes comicios presidenciales.

¿ESTÁ TRUMP SIENDO INVESTIGADO POR LA TRAMA RUSA?

“No”. Hasta el momento el mandatario no ha sido alcanzado por la investigación de la trama rusa, y una de las diferencias entre Trump y Comey habría sido precisamente su negativa a la petición del presidente a hacer público que no era sujeto de investigación, pero asegura que esto no alteró los resultados.

¿PODRÍA ALCANZAR LA INVESTIGACIÓN A TRUMP?

“Si se continuaba la investigación, claramente se iba a llegar al presidente, pues es el jefe de su campaña”. Así de enfático se mostró Comey ante este cuestionamiento, lo cuál añade presión al nuevo fiscal especial Robert Mueller, encargado de continuar la investigación sobre la trama rusa.

¿POR QUÉ FUE CESADO?

Aunque en un primer momento contestó que no lo sabía, posteriormente dijo que por la investigación sobre la relación del equipo de Trump con la inteligencia rusa.

“Me cesó porque había algo en la investigación rusa que le irritaba”.

¿QUÉ PIENSA SOBRE LA VERSIÓN OFICIAL DE SU DESPIDO?

“El gobierno decidió difamarme a mí y, lo que es más importante, al FBI”.

Hay que recordar que Trump afirmó que la organización era un desorden y estaba mal dirigida. “Eso es mentira, pura y simplemente”, remató Comey.

¿QUÉ FUE EXACTAMENTE LO QUE LE PEDÍA TRUMP?

Comey confirmó lo que ya se había revelado en su declaración por escrito. En una conversación Trump le habría pedido lealtad y en otra sugirió que abandonara la investigación sobre Michael Flynn, exasesor de seguridad nacional.

“Creo que Trump buscaba obtener algo a cambio de conceder mi pedido de continuar con mi puesto en el FBI”.

¿POR QUÉ TOMÓ NOTAS DE LOS ENCUENTROS CON DONALD TRUMP?

Este fue uno de los momentos cruciales de la comparecencia porque por primera vez reconoció que no confiaba en el mandatario.

“Estaba sinceramente preocupado por el hecho de que él pudiera mentir sobre la naturaleza de nuestro encuentro. Sabía que podía llegar el día en que podría necesitar un registro de lo que pasó, no sólo para defenderme, sino para proteger al FBI”.

¿CÓMO SE FILTRARON ESAS NOTAS A LA PRENSA?

Comey confesó que él fue el autor de las filtraciones. Pidió a uno de sus amigos de la Universidad de Columbia que entregara una copia de sus notas al diario The New York Times.

Además ha dicho que lo hizo para provocar el nombramiento de un fiscal especial independiente.

¿HAY CINTAS DE ESAS REUNIONES?

Aseguró que no tiene conocimiento de la existencia de cintas que corroboren el contenido de sus conversaciones con Donald Trump, pero deseó que las hubiera.

“Dios, espero que haya cintas”, dijo. La probable existencia de cintas que documenten las reuniones podrían darle un nuevo giro para determinar si Trump incurrió en obstrucción de la justicia.

¿HUBO UN INTENTO POR PARTE DE TRUMP PARA OBSTRUIR LA JUSTICIA?

“No me corresponde a mí decirlo, será el fiscal especial, Robert Mueller, quien debe determinar si Trump cometió un delito de obstrucción a la justicia”.

Cuando fue cuestionado directamente si Trump efectivamente le “ordenó” que abandonara la investigación, Comey respondió que no, pero a la luz de la opinión pública queda la sensación de que fue sometido a presiones por el mandatario para no proseguir la indagatoria.

¿CUÁL HA SIDO LA RESPUESTA DE TRUMP?

La portavoz de la Casa Blanca, Sarah Sanders, rechazó las declaraciones de Comey y aseguró en primer lugar que el presidente Trump no es ningún mentiroso.

El abodado personal de Trump, Marc Kasowitz, afirmó que el presidente jamás presionó al exdirector del FBI e incluso insinuó que éste podría ser investigado por filtrar información clasificada a los medios de comunicación.


(REPORTE INDIGO/CARLOS SALAZAR/Jueves 8 de junio de 2017)

CASO ARAMBURUZABALA: LÓPEZ DÓRIGA, A TRIBUNALES


La inmobiliaria Abilia, propiedad de la empresaria María Asunción Aramburuzabala, se anotó un triunfo en el litigio que lleva en los tribunales en contra del personal de Protección Civil del gobierno capitalino que en 2015 clausuró la obra de la calle Rubén Darío 225, en la colonia Polanco: logró que comparezca el ex conductor de El Noticiero de Televisa Joaquín López Dóriga. En otro de los juicios emprendidos por los abogados de la afectada –en el que lo acusaban de extorsión–, López Dóriga la libró, pero esta vez tendrá que comparecer. Es un precedente sin parangón, dicen los defensores de Aramburuzabala.

CIUDAD DE MÉXICO (Proceso).- El martes 20 de junio el conductor Joaquín López Dóriga deberá presentarse en calidad de “testigo” ante la Fiscalía para la Investigación de los Delitos Cometidos por Servidores Públicos de la Procuraduría General de Justicia de la Ciudad de México para rendir su declaración en la demanda que interpuso la inmobiliaria Abilia, propiedad de la empresaria María Asunción Aramburuzabala, en contra del personal de la Secretaría de Protección capitalina por haber clausurado la obra de la calle Rubén Darío 225, en 2015.

Será la primera vez que el ex conductor de El Noticiero –el antiguo espacio informativo estelar de Televisa– acuda a las oficinas de la procuraduría capitalina para declarar, junto con otros vecinos del inmueble de la calle Rubén Darío 223 –aledaño a la obra–, en la larga batalla en tribunales que la empresaria Aramburuzabala emprendió en contra de él, de su esposa Teresa Adriana Pérez Romo, así como de otros representantes vecinales y del abogado Mario Alberto Pocoroba por presunto intento de extorsión.

El juicio de la empresa Abilia en contra del personal de Protección Civil capitalina es uno de los tres que están pendientes en los tribunales de la Ciudad de México desde 2015: uno por la tentativa de extorsión, otro por abuso de autoridad del INVEA al clausurar la obra inmobiliaria y este tercero en contra de Protección Civil.

En este caso, según explicó a Proceso el abogado de Aramburuzabala, Javier Coello Zuarth, se trata de una victoria jurídica para su cliente, ya que la misma procuraduría capitalina había considerado como “ociosos e irrelevantes” los testimonios de los vecinos y determinó en agosto de 2016 el “no ejercicio de la acción penal”, en el caso de la demanda por intento de extorsión.

A pesar de que el pasado 31 de enero, Aramburuzabala ganó el amparo ante el Juzgado Segundo de Distrito de Amparo en materia penal en la Ciudad de México, la esposa de López Dóriga y otros coacusados (Gabriela Torres, Paloma Baños, Mario Alberto Pocoroba y Érika Mendoza) interpusieron un recurso de revisión para frenar la posibilidad de que declaren los vecinos.

Sin embargo, los abogados de Aramburuzabala lograron que la misma procuraduría los cite a declarar en calidad de “testigos” en el otro expediente en contra de los funcionarios de Protección Civil.

Fragmento del reportaje publicado en Proceso 2119, ya en circulación


(PROCESO/ REPORTAJE ESPECIAL/ JENARO VILLAMIL/ 10 JUNIO, 2017)

DE MIGRANTES A REFUGIADOS: SERGIO Y SU FAMILIA ENCUENTRAN UN HOGAR EN SALTILLO

Sergio vio morir a su padre a machetazos. Luego a un niño y un taxista en una balacera. Fue amenazado de muerte y huyó de Honduras. Con el tiempo trajo a su esposa Lourdes y a sus hijos a México. Ahora viven y trabajan en Saltillo, la primera ciudad de México que ofrece un refugio a los centroamericanos.
SALTILLO



Segunda oportunidad. Sergio y su familia son unos refugiados que viven en Saltillo luego de haber escapado de la violencia en Honduras.

HUIR Y MIGRAR NO SON LO MISMO

MUERTE EN HONDURAS

Con 112.09 homicidios por cada 100 mil habitantes, San Pedro Sula, en Honduras, era hasta 2016 la tercera ciudad más violenta del mundo.

LOS DESPLAZADOS

Sergio se convirtió en uno de los 140 mil  centroamericanos que cada año son escupidos de sus países por la ola de violencia de las maras.

LA TRAVESÍA

En Guatemala la policía asalta igual que la delincuencia organizada y los ladrones comunes en la frontera sur de México.

Por: Jesús Peña
Fotos de Luis Castrejón
Edición: Nazul Aramayo
Diseño: Edgar de la Garza

Sergio, por haber visto una masacre, tuvo que salir huyendo con su familia de Honduras, su pueblo.

Él iba por una calle de San Pedro Sula en busca de sus dos hijos pequeños que se hallaban: uno en su clase de piano, el otro en casa de una tía, cuando se oyó la tirazón.

Entonces Sergio miró en el suelo a un niño baleado, muerto, y a un hombre taxista con el cuerpo cosido a plomazos.

Así se las gasta la violencia en Honduras y Sergio lo sabía.

Con 112.09 homicidios por cada 100 mil habitantes, San Pedro Sula, en Honduras, era hasta 2016 la tercera ciudad más violenta del mundo.

Sólo que Sergio tuvo la mala suerte de toparse de frente con uno de los pandilleros que habían hecho aquella carnicería.

Era un marero de la 18, conocido en el barrio de Sergio y conocido de Sergio, por ser su cliente del negocio de corte de cabello que tenía allá en San Pedro.

Hacía tiempo que Sergio no lo miraba, desde que el pandillero había huido de la colonia, que era territorio de la MS, al barrio de la 18.

El marero lo vio, Sergio lo vio, se miraron, se reconocieron.

El pandillero tenía el rostro como endiablado, así le dicen los catrachos, endiablado.

Se suponía que estaba encerrado en una prisión de Honduras y Sergio lo sabía, pero sabía también que, como en México, los delincuentes pueden entrar y salir de las cárceles de Honduras a hacer masacres.

La tarde que fue a recoger a sus hijos, Sergio cometió la imprudencia de irse por uno de los sectores más oscuros de San Pedro, no por la falta de luz, sino por lo peligroso, y le tocó la balacera.

SU NACIONALIDAD

 La mayoría de las familias provienen 50 por ciento de Honduras y el resto de El Salvador.



Futuro. Lourdes se negaba a que sus cinco hijos crecieran en un ambiente de tanta maldad, por lo que decidió salir de Honduras.

Fue cuando vio al niño y al taxista, botados en el pavimento, ensangrentados y al marero aquel, acechando desde la calle.

En Honduras la gente ya está acostumbrada a ver muertos tirados en las calles.

Unos pasan, miran, lloran, se asustan, se asombran; otros cotorrean con los cadáveres, sin compasión.

Días después a Sergio le cayeron unas llamadas muy extrañas en su teléfono: eran de supuestos clientes o compañeros de trabajo que pedían verlo, que lo citaban en alguna esquina de San Pedro y le exigían ir.

Sergio tuvo miedo y decidió escapar de Honduras y enrumbar su destino, su vida hacia el norte, hacia México.

Involuntariamente Sergio se había convertido en uno de los 140 mil  centroamericanos que cada año son vomitados y escupidos de sus países por la ola de violencia de las maras, aunada a la falta de políticas de desarrollo de los gobiernos.

No le quedaba otra, la única era irse de Honduras.

Si había alguien en el barrio que sabía lo sanguinario de las maras era él.

Lo había vivido en carne propia.



Víctimas. Lourdes recuerda que siempre que ocurría algo malo, la gente de Tenosique, Tabasco, se lo achacaba a los catrachos: “fueron los hondureños".

Sergio, originario de Villanueva Cortés, Honduras, tenía apenas 12 años cuando vio cómo un pandillero del Barrio 18 descuartizaba a su padre, un hombre trabajador, a machetazo limpio, una noche en el corral de su casa, todo por una bicicleta.

El marero aquel le había robado esa bicicleta a plena luz del día y el papá de Sergio lo denunció, sin pensar que al firmar aquella denuncia estaba firmando también su sentencia de muerte.

Eran como las 12:00 de la noche. El pandillero llegó a la casa y le gritó al papá de Sergio que venía a asesinarlo, lo llamó desde afuera, “vengo a matarte”, y lo insultó, le dijo de groserías y “sal afuera”.

El papá de Sergio salió por la parte trasera. Cuando vio el machete y que iba encima de él, corrió a refugiarse, pero no pudo porque el marero lo alcanzó y le pegó un machetazo en la espalda y parte de la cabeza que lo hizo caer al suelo y ahí el marero lo asesinó.

Sergio y su madre vieron todo y alcanzaron a escuchar los últimos quejidos de su padre.

La imagen de la sangre, saliendo a borbotones del cuerpo hecho pedazos de su papá, se le quedó a Sergio grabada en la retina, en la mente, en el corazón, de manera indeleble.

El vándalo aquel era nada menos que un tío de Sergio, hermano de su madre, cuñado de su papá.

En Honduras la muerte llega muchas veces desde la propia familia.

Sergio lo cuenta y llora.

LOS REFUGIADOS


Recuerdo. A los 12 años, Sergio vio cómo un pandillero del Barrio 18 descuartizaba a su padre, un hombre trabajador, a machetazo limpio, una noche en el corral de su casa, todo por una bicicleta.

La plática con Sergio y Lourdes, su mujer (que no se llaman así, pero que ellos mismos han escogido estos nombres para evitar ser identificados por sus perseguidores), es en su departamento de alquiler de un edifico en Saltillo, cuya ubicación omitiré porque así fue el trato.

Hace unas semanas que Sergio y los suyos llegaron aquí, después que fueron aprobados para participar en el proyecto de Integración Local de Personas Refugiadas, impulsado por la Agencia de la Organización de las Naciones Unidas para los Refugiados (Acnur).

La de Sergio es una de las 10 familias seleccionadas, luego de un estudio, en este programa que pretende incorporar social y económicamente a personas del triángulo norte de Centroamérica (El Salvador, Honduras, Guatemala) que están huyendo de la violencia.

Siendo Saltillo la única ciudad de todo el país en la que se está llevando este proyecto, dada su oferta laboral, su calidad de vida y su seguridad, de acuerdo con el estudio “Las ciudades más habitables de México 2016”, realizado por el Gabinete de Comunicación Estratégica y el Instituto Mexicano para la Competitividad.

“Es un proyecto que surgió como un pilotaje a partir de agosto del año pasado, como una intención del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Refugiados de ofrecer soluciones duraderas a personas que ya han sido reconocidas como refugiadas. Una solución duradera es ofrecer a estas personas una opción para poner fin a su desplazamiento y darles alternativas para ser autosuficientes y poder integrarse a un entorno seguro y a una comunidad”, me explica una mañana en su oficina Ana Lorena Galindo Cepeda, enlace de la Acnur en Saltillo.

Esto es que Acnur los trae aquí, les ayuda a buscar vivienda, empleo para los padres, escuela para los niños y otorga a la familia apoyo económico por única ocasión para el pago de renta y alimentos, higiene y transporte.

Luego la agencia hace un seguimiento o acompañamiento de las familias durante un año, con llamadas telefónicas y visitas domiciliarias, una vez al mes, para supervisar cómo va el proceso de integración de los refugiados a su nuevo entorno y dotarles de nuevas alternativas en el camino.

Desde entonces Sergio y su familia son unos refugiados hondureños que viven en Saltillo.

El día que, por miedo a las represalias de aquel marero, Sergio decidió, más que migrar, huir de Honduras, lo hizo solo y con la promesa de que volvería pronto por los suyos.

Sus hermanos lo despidieron con queque, así le llaman al pastel en Honduras, y al final lo abrazaron.

45 Refugiados hay actualmente participando en este proyecto.

22 
Son niños.

23 
Son adultos.

10 
Familias son en total.


Son personas que vienen a trabajar, no vienen a vivir del asistencialismo ni de pedir ni estar a la espera de que alguien les solucione la vida. Los refugiados tienen mucho que aportar”.

ANA LORENA GALINDO CEPEDA, ENLACE DE LA ACNUR EN SALTILLO.

Durante su travesía de tres días  rumbo a México en varios autobuses, Sergio se encontró con lo que todos los migrantes ya saben: que en Guatemala la policía asalta igual que la delincuencia organizada y los ladrones comunes en la frontera sur de México, sólo que con placa y uniforme.

Haciéndose pasar por agentes migratorios, los policías de Guatemala detuvieron el ómnibus donde venía Sergio, junto con otros migrantes, al menos en tres delegaciones, exigiendo el pago de cuotas a los viajantes que no presentaran sus documentos del país.
En eso los gendarmes chapines siempre van a la segura, porque saben que la mayoría de a quienes revisarán son personas que vienen huyendo de otras naciones centroamericanas y carecen de documentos guatemaltecos.

Ésta es la corrupción que reina en el triángulo norte de Centroamérica y el contorno sur de México.  

Cuando Sergio llegó a Tenosique, Tabasco, frontera con Guatemala, respiró.

Atrás había dejado el recuerdo de su encuentro con aquel marero, su rostro endiablado y sus ojos acechantes, después de la masacre.

Sin conocer a nadie, consiguió establecerse en este municipio donde, según el libro “Los Migrantes que no importan”, del periodista salvadoreño Óscar Martínez, abundan los burdeles con niñas y mujeres centroamericanas que son  forzadas a la prostitución; los secuestros y asesinatos de los Zetas sobre los migrantes; y ese calor húmedo y pegajoso a 43 grados, muy parecido al de San Pedro Sula.

Rentó un cuarto donde vivir y trabajó en una estética y en una florería a la vez.

Puntualmente mandaba dinero a su esposa y a sus hijos en Honduras y todo marchaba perfecto.



Apoyo. La de Sergio es una de las 10 familias beneficiadas por el programa que busca incorporar social y económicamente a personas de Centroamérica que huyen de la violencia.

Sergio pensaba que, por fin, había burlado al fantasma del asesinato callejero del que había sido testigo y que tantos días lo había perseguido.

Pero el fantasma de la violencia volvió a aparecer en su vida un día que Sergio estaba saludando por Facebook a uno de sus hijos, el mayor, de secundaria, y éste le soltó una mala noticia:

Un grupo de pandilleros había entrado hasta un salón de clase de la escuela, con armas de alto calibre, y se había llevado a un chaval a la fuerza.

Entonces el hijo de Sergio, lo mismo que otros güirros, dejó de ir a la secundaria y eso lo tenía mal, con miedo.

Es parte de los códigos de las maras hondureñas que dictan que los güirros no deben asistir a las escuelas del barrio donde manda la pandilla rival, porque automáticamente serán tomados por banderines, lo que en México conocemos como halcones, orejas, vigías.

En Honduras es cotidiano que sucedan estas cosas.

Hacía tiempo que la familia de Sergio vivía en el sector MS, mientras que la secundaria donde estudiaba su hijo quedaba en territorio de la pandilla 18.

Sólo que aquella vez los padres se quedaron petrificados cuando empezaron a mirar que los vándalos dejaban en las puertas de las escuelas de sus respectivos barrios rótulos con mensajes que decían: “si usted no quiere ver muerto a su hijo, sáquelo”.

Tenía apenas ocho días de haber llegado a Tenosique y Sergio estaba preocupado.


SUS HISTORIAS

Se trata de personas que vienen huyendo de una violencia (amenazas de muerte, abuso sexual, extorsión) generalizada en el triángulo norte de Centroamérica por las pandillas y grupos delictivos que tienen el control de las comunidades y el reclutamiento forzado de niños, niñas y adolescentes para la comisión de delitos.


Integración La agencia hace un seguimiento o acompañamiento de las familias durante un año, con llamadas telefónicas y visitas domiciliarias, una vez al mes, para supervisar cómo va el proceso de integración de los refugiados a su nuevo entorno.

 La verdad es que la ciudad les ha significado una oportunidad para pensar ya en un plan de vida y poder integrarse a Saltillo. Exhortamos a la comunidad a desestigmatizar este tema”.

ANA LORENA GALINDO CEPEDA, ENLACE DE LA ACNUR EN SALTILLO

No pudo evitar acodarse de su padre hecho pedazos sobre una mesa y de los forenses costurándolo antes de meterlo en el ataúd.

Sergio había enfermado de odio, andaba enojado con el mundo, quería ir a la prisión donde estaba encerrado su tío, el asesino de su padre, y cobrarse.

Se fue de casa, pasó 14 años vagando en las calles, vendiendo helados en carretera, lentes de sol, relojes y ropa interior para mantenerse.

Cuando no vendía se ponía a mendigar bocados en las ventas de comida.

Unos le daban, otros lo corrían.

“Deje de molestar que estamos comiendo tranquilos, vete”, “ándate, sigue trabajado”.

Hasta que una vez escuchó desde adentro una voz que le dijo “ya no sufras más, quítate la vida”, y quiso matarse: una vez colgándose de una sábana; la otra, dándose de puyones con una navaja.

Algo, quizá una fuerza sobrenatural, celestial, divina, lo contuvo y el tiempo, que todo lo cura, se encargó de sanarlo.

Años después de andar vendiendo en las calles, Sergio consiguió graduarse de maestro de primaria, con especialidad en Pedagogía y Psicología General.


Justo cuando trabajaba en un instituto hondureño dedicado al  rescate de jóvenes en riesgo social, vino lo de la masacre que lo obligó a huir de su país.

Narra Sergio una de esas tardes que ha llegado de su trabajo, como operador general en una fábrica de electrodomésticos en Ramos Arizpe.

El empleo que le consiguió la Acnur.

Después de darle vueltas y vueltas en la cabeza por varios meses, decidió que tenía que volver a Honduras para rescatar a su mujer y a sus hijos de la violencia y traerlos con él a México.

Antes lo platicó vía Facebook con Lourdes.

Le costó convencerla.

Ella no quería abandonar a su padre viudo de 82 años, que vive en Santa Rosa de Copán, un pueblo cafetalero de Honduras.

Recuerdo que una de esas tardes que visité a Lourdes en su nuevo hogar de Saltillo la encontré enferma.

Dijo que le dolía la cabeza y la espalda y andaba como desesperada, con los nervios reventados de estar pensando en su papá.

Y VIENE MÁS...

La Acnur tiene programado que para agosto próximo lleguen a Saltillo otras 10 familias de refugiados.


“A veces pienso que no lo voy a volver a ver. Yo si pudiera traer a mi papá, sería feliz”, me dijo, el rostro desencajado.

Pero también pensaba en el futuro que les esperaba en Honduras a sus cinco hijos varones.

Y se negaba a aceptar que crecieran en ese ámbito de tanta maldad.

Hubo un tiempo en San Pedro Sula que chavalos hasta de 10 años eran reclutados a la fuerza por las maras para entrenarlos como banderines (halcones) y sicarios.

Y era común ver que muchos de aquellos cipotes aparecieran en las calles, masacrados.

Una de esas tardes que lo visité en su apartamento, Sergio me contó de un paisano suyo,

compañero de trabajo en la planta de electrodomésticos de Ramos Arizpe, que la noche anterior había recibido una llamada de un familiar en Honduras diciéndole que su sobrino, un estudiante de último grado de secundaria, había sido muerto por la mara 18, luego de que se negó a ingresar a la pandilla.

“Llegaron como a las 12:00 de la noche a tocarle a la mamá y le dijeron ‘vengo a decirle que no le vamos a entregar a su hijo, porque él se rehusó a entrar a la pandilla y  no haga mucho escándalo, porque los vamos a venir a matar a todos ustedes. Lo tenemos bien enterradito a él, con todos los honores lo enterramos’”.

En Honduras la violencia es algo muy cercano a la gente y no respeta color de piel, jerarquías sociales ni credo.

A la pastora de la iglesia evangélica “Asambleas de Dios”, donde asistían Lourdes, Sergio y sus hijos, los mareros la mataron por un asunto de extorsión, como hace unos años hacían los Zetas acá.

Venía de dejar a su niña de la escuela y cuando llegó a su casa ya estaban los pandilleros esperándola.

Le metieron 15 puñaladas.

Lourdes y Sergio estuvieron en el funeral, temerosos, porque en San Pedro, como en México, los criminales acostumbran reventar velorios, rafaguear, llevarse los muertos.


HOSPITALIDAD EN SALTILLO



Finalmente, y luego de muchas conversaciones, Lourdes consintió salir de Honduras con una condición: que Sergio no la fuera a montar con los niños en el gusano metálico conocido como “La Bestia”.

En Honduras, y el resto del triángulo norte de Centroamérica, la gente sabe que las maras no son peores que viajar en los lomos de ese monstruo.

Desde niña, Lourdes había visto las calles de Honduras llenas de mutilados que fueron, como dice el periodista Óscar Martínez, rumbo a la entelequia del sueño americano y regresaron sin piernas o sin brazos.

Daba lástima verlos de vuelta.

“Si usted nos va a sacar de Honduras, a mí nunca me vaya a llevar en el tren. Prefiero mil veces separarme de usted, que se vaya usted solo, a yo ir a arriesgar a mis hijos en ese tren, no. Mejor me quedo comiendo aquí lo que sea, pero no me voy a ir con usted a arriesgar mi vida y después venir sin pies y no poder trabajar”, le dijo Lourdes.

Sergio fue por ellos a escondidas hasta Honduras. Casi no salió de su casa para evitar ser visto por el barrio y de la noche a la mañana huyó de San Pedro Sula con su mujer y sus cinco hijos, sin despedirse de nadie.

Viajaron en autobús rumbo a Tenosique, llevando 15 maletas con sus cosas.

En medio de las carreras, a Lourdes se le olvidó echar las fotografías familiares, pero no pudo evitar cargar con los recuerdos de cuando tenía cinco años que quedó huérfana de madre, y trabajaba, desde las 6:00 de la mañana, limpiando un arrozal grande.

Le pagaban una miseria.


A los 14 años huyó, que no es lo mismo que decir migró, de Santa Rosa de Copán a San Pedro Sula, cansada de tanta pobreza.

En aquellos tiempos era difícil que los chavalos de Santa Rosa de Copán hicieran la escuela, porque la gente sembraba granos y de granos vivía.

Los padres metían a los hijos a trabajar la tierra, a sembrar hortaliza, frijol, maíz, café desde bien güirros.

Con esfuerzo, Lourdes terminó el segundo grado de primaria y el tercero lo hizo en una escuela nocturna de San Pedro.

Allá trabajó de lavandera en varias casas y pasó por muchos avatares que todavía platica con los ojos llenos de miedo: un intento de violación en la calle, un concubino golpeador que le dejó cicatrices, un maleficio que llevó a su hijita de nueve años a la muerte.

Hasta que tiempo después Sergio y ella se conocieron, se enamoraron, se casaron.

Cuando Lourdes lo conoció, Sergio todavía lloraba la muerte de su padre.

Relata el matrimonio otra tarde desde su apartamento en Saltillo, frente a un platón de sandía con manzana que Lourdes ha servido en la mesa a la hora de la merienda.

Durante esas tardes, mientas charlábamos, los hijos pequeños de Lourdes y Sergio se entretenían escuchando la plática y jugando a los carritos con una patrulla fronteriza, una troca militar y una máquina de tren, muy parecida a la de “La Bestia”.

Aunque uno de los chicos ya ha dicho que quiere ser doctor, el otro musiquero y Sergio tiene la esperanza, ahora que ya han obtenido la Tarjeta de Residente Permanente en México, de que el mayorcito sea ingeniero petrolero.

Pero eso sí, ninguno quiere ser migrante.


Según la Acnur, en 2016 hubo en el país nueve mil solicitudes de la condición de refugiado. Y se estima que para este año la cifra llegue a las 18 mil o 20 mil.

Nueve meses estuvieron en Tenosique, Sergio trabajando en una panadería y en una frutería a la vez; Lourdes cuidando de los chicos y la casa.

Ellos tampoco se salvaron de la criminalización de la que son víctimas los centroamericanos que llegan a México.

Lourdes recuerda que siempre que ocurría algo malo en el pueblo, la gente de Tenosique se lo achacaba a los catrachos: “esos son hondureños, fueron los hondureños, esos fueron hondureños que vinieron”.

La familia solicitó la condición de refugiada ante la oficina de la Comisión Mexicana de Ayuda a Refugiados (Comar) y logró acceder a ella.

Más tarde fue aprobada para participar en el proyecto de Integración Local de Personas Refugiadas, impulsado por la Agencia de la Organización de las Naciones Unidas para los Refugiados (Acnur).

El pasado jueves 20 de abril, Sergio, Lourdes y sus cinco hijos  llegaron no en “La Bestia”, sino en autobús desde Tenosique hasta  la terminal de Saltillo.

Dicen que la ciudad les ha parecido bonita, al menos hasta ahora no han escuchado de balaceras ni de masacres.

“La verdad es que la ciudad les ha significado una oportunidad para pensar ya en un plan de vida y poder integrarse a Saltillo. Exhortamos a la comunidad a desestigmatizar este tema. El que un país le abra las puertas a un refugiado le salva la vida, son personas que de no tener esta opción las estaríamos orillando a la muerte. Son personas que vienen a trabajar, no vienen a vivir del asistencialismo ni de pedir ni estar a la espera de que alguien les solucione la vida. Los refugiados tienen mucho que aportar”, dice Ana Lorena Galindo Cepeda, enlace de la Acnur en Saltillo.

Aun así Sergio y Lourdes sienten que aman su pueblo, que extrañan su pueblo. “Sea lo que sea Honduras es nuestra tierra…”, dice Sergio.

UNA ALTERNATIVA PARA VIVIR

Saltillo es la primera ciudad de México que gracias a un programa de la Acnur (Agencia de la Organización de las Naciones Unidas para los Refugiados) ofrece ayuda a los centroamericanos que huyen de sus países por causa de la violencia: los apoya en buscar vivienda, encontrar empleo para los padres, escuela para los niños y otorga a la familia apoyo económico por única ocasión para el pago de renta y alimentos, higiene y transporte.


(VANGUARDIA / JESUS PEÑA/  SÁBADO, JUNIO 10, 2017 - 22:15)