La muerte de Abenamar Escalante Hernández se la abjudicó el grupo armado “PUCD”, según un narcomensaje.
Los secuestradores de su hijo, lo ejecutaron para que ya no los anduvieran siguiendo, pues el menor no aparece.
Redacción
Trágico amanecer durante el fin de año tuvo una familia originaria de
Cárdenas al ser ejecutado en la colonia “La Wilson” de esta comunidad;
Abenamar Escalante Hernández, padre de un menor que lleva secuestrado 6
días, en la ranchería Río Seco de este municipio.
Con esta muerte cerró el 2013, con 76 personas silenciadas por el
crimen organizado. El ahora extinto presentaba varios impactos de balas
en el cuerpo de armas de grueso calibre y por la forma como ocurrieron
los hechos, podría tratarse de un ajuste de cuentas, debido a que los
criminales le dejaron un narcomensaje.
La ejecución ocurrió a las 7:00 horas del pasado 31 de diciembre frente
a la casa ejidal del Ejido Cárdenas, ahí fue encontrado el cuerpo sin
vida de Abenamar Escalante Hernández, originario de la ranchería Río
Seco segunda sección.
En el lugar de los hechos, en donde hizo presencia el Ejército Mexicano
y diversas corporaciones policíacas, se encontraron varios cartuchos
percutidos al parecer 9 mm, así como un auto compacto tipo Jetta color
rojo con placas de circulación WPN-1958.
El infortunado sujeto que vestía camisa de color naranja y pantalón de
mezclilla azul, a un costado del cuerpo se localizó un narcomensaje que
decía textualmente.
"Esto me pasó por chivatón por secuestrar y matar gente inocente atte. Los PUCD".
El ahora occiso, era padre de un menor que fue plagiado el pasado 28 de
diciembre en Cárdenas por un grupo armado que iba a bordo de un auto
tipo Jetta color gris que fue dejado abandonado tras haber chocado
contra otra unidad. De esta forma cerraron el año el 2013 las bandas
criminales, en la zona de La Chontalpa.
(TABASCO HOY / Redacción/ 02 de Enero 2014)
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