Saltillo, Coah.- Mediante un video con duración de poco más
de cinco minutos que circula desde ayer en redes sociales, se exhibe al
candidato a diputado por el PAN, Miguel Ángel Wheelock, como comprador
de votos, pero sin pagarlos, por lo que es injuriado por un buen número
de lideresas.
El material audiovisual se desarrolla en lo que parece ser la sede del organismo político, donde tres colaboradores tratan de hablar “razonadamente” con un grupo conformado principalmente por mujeres, quienes reclaman el pago por su trabajo proselitista.
Los ánimos se caldean cuando los colaboradores les explican que no podrán realizar los pagos prometidos en ese momento. Ellos tratan de salir del lugar, pero las mujeres les impiden el paso gritándoles “¡Tiene que pagar!”.
Inmediatamente después, ya para los últimos 20 segundos del video, aparece el candidato en cuestión.
“A ver, apúntese cada coordinador y la gente que esté aquí, cuántas tarjetas te entregaron y las que tú entregaste, y me lo entregan a mí, yo no tengo el dato (…) nomás lo que les pido es que me apunten su nombre, teléfono…”, les dijo. “¡No, no, no, nos tiene que pagar!”, recibió como respuesta.
Aunque se buscó al candidato para que aportara la versión sobre estos hechos, se negó argumentando la veda electoral.
El material audiovisual se desarrolla en lo que parece ser la sede del organismo político, donde tres colaboradores tratan de hablar “razonadamente” con un grupo conformado principalmente por mujeres, quienes reclaman el pago por su trabajo proselitista.
Los ánimos se caldean cuando los colaboradores les explican que no podrán realizar los pagos prometidos en ese momento. Ellos tratan de salir del lugar, pero las mujeres les impiden el paso gritándoles “¡Tiene que pagar!”.
Inmediatamente después, ya para los últimos 20 segundos del video, aparece el candidato en cuestión.
“A ver, apúntese cada coordinador y la gente que esté aquí, cuántas tarjetas te entregaron y las que tú entregaste, y me lo entregan a mí, yo no tengo el dato (…) nomás lo que les pido es que me apunten su nombre, teléfono…”, les dijo. “¡No, no, no, nos tiene que pagar!”, recibió como respuesta.
Aunque se buscó al candidato para que aportara la versión sobre estos hechos, se negó argumentando la veda electoral.
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