La peor pesadilla de los habitantes de la sierra de Choix se cumplió
la noche del “Grito de Independencia” y del “Día de la Independencia”
pues dos poblados fueron arrasados por grupos armados.
Los poblados arrasados son Tacopaco, ubicado en pleno vaso de la
presa Luis Donaldo Colosio, y León de la Sierra, en los límites con
Batopilas, Chihuahua.
El ataque sería represalia por el acto incendiario de la comunidad El Corral Quemado, perpetrado a finales de agosto.
El ataque ya era esperado por los habitantes de la sierra, y así lo
dieron a conocer al Gobierno del Estado. El gobierno de Mario López
Valdez mando al carajo los avisos de auxilio de la población civil y se
concentró solo en los intereses de la minera Paradox, a cuyos intereses
de salvaguardar la extracción de mineral de hierro le envió dos grupos
de reacción, con la finalidad de contener la ira acumulada por los
habitantes del Potrero de Cancio, que acusan de fraude a la minera y a
su representante legal.
En tanto los ministeriales sirven a los amos del dinero, las familias
pobres de la sierra fueron atacadas la mañana del 15 de septiembre. La
ayuda policial y militar les llegó un día después, consumada la felonía.
Los poblados atacados son Tacopaco, ubicado en la cuenca del río
Fuerte y limita con el municipio de Batopilas, Chihuahua. Otra comunidad
es León de la Sierra, según un informe de la policía.
En ambos sitios fueron quemadas cuatro casas, camionetas y presuntamente privado de la libertad un civil, Saúl Salmerón.
(RIODOCE/ Luis Fernando Nájera
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