Saltillo, Coah.- Policías municipales amenazaron, torturaron y
violaron a una joven madre de familia al detenerla de manera arbitraria
en una fiesta familiar que se realizaba en la colonia Saltillo 2000, el
fin de semana pasado.
Otras 15 personas también fueron golpeadas de manera salvaje durante su detención en el mismo evento.
Según la afectada, los hechos ocurrieron en la casa marcada con el 185 de la calle Manzanos, en dicho sector, a donde asistió con su novio a una fiesta de cumpleaños sin imaginar la agresión que sufriría a manos de los oficiales.
La joven de 22 años relató que fue el pasado domingo cuando se encontraba al interior de la casa donde se ofrecía la cena, el sonar de los vidrios quebrados a blockazos le robó la calma, percatándose de que un grupo de uniformados ingresaba por la fuerza al lugar.
Como resultado del allanamiento, los oficiales golpearon y sometieron a aproximadamente 15 personas que terminaron tras las rejas de la corporación policiaca local, menos la madre de familia y otra joven, quienes, según la primera, fueron subidas a la cabina de una patrulla en la que las llevaron a un sitio desconocido.
Brutalidad y excesos de la Policía Municipal
El fin se semana pasado resultó ser el más aterrador para los asistentes de una fiesta de cumpleaños, ya que cuando se convivían en la misma, varios elementos policiacos irrumpieron violentamente en el domicilio donde se llevaba a cabo, golpeando salvajemente a los asistentes y violando a una de las mujeres.
El sábado 19 de julio, la señora Aracely Rebolloso Tobías y su esposo organizaron una fiesta de cumpleaños para uno de sus hijos, por lo que invitaron a algunos familiares y amigos del joven, quienes llegaron al 185 de la calle de Manzanos de la colonia Saltillo 2000.
Niños y mujeres se encontraban dentro de la vivienda, mientras que el padre del festejado realizaba una discada afuera de la casa junto con varios jóvenes, quienes se encontraban ingiriendo bebidas alcohólicas, hecho que aparentemente disgustó a uno de los vecinos, pues dio aviso a las autoridades.
Eran las 1:00 horas del domingo cuando los asistentes se asustaron al ver varias patrullas de la Policía Municipal Preventiva, quienes rechinando llanta arribaron afuera del domicilio haciendo que los jóvenes corrieran dentro del mismo para resguardarse de los uniformados.
“Cuando vi que mi hijo entró despavorido diciendo ‘mamá, ahí vienen los polis’ le dije que no corriera si no estaba haciendo nada malo”, comentó la dueña de la casa, quien agregó que los uniformados rompieron vidrios con blocks y entraron a la fuerza hasta los cuartos.
Con lujo de violencia los oficiales entraron a todos los cuartos y se llevaron a todos los asistentes, quienes trataron de poner resistencia, pero los uniformados pidieron refuerzos, incluso accionaron un arma de fuego, pues en el lugar fue encontrado un casquillo.
El ama de casa dijo que una mujer policía la golpeó, la tiró al suelo y la agarró a patadas, insultándola y amenazándola ante la mirada atónita de sus hijos, dos de ellos niños pequeños y una jovencita de 14 años, quien quiso intervenir defendiendo a su madre y la agente arremetió contra ella, pero cuando le dijo que era menor de edad la soltó y la muchachita salió de la casa junto con sus hermanitos.
“La policía me esposó, pero como pude logré quitármelas y huí del lugar resguardándome en la casa de una vecina; mis pequeños hijos se encontraban llorando porque creían que yo estaba muerta”, puntualizó Aracely, quien mostró los rastros de violencia en su cuerpo.
¡Una pesadilla!
La peor de las pesadillas la vivió una joven de 22 años, quien había asistido a la fiesta junto con su novio y que se quisieron resguardar en uno de los cuartos para que no los detuvieran, pero nunca se imaginó la vileza de la que sería objeto.
“Los policías entraron al cuarto y nos agarraron a golpes, a mi novio lo golpearon bien feo y a una amiga y a mí nos subieron en los asientos traseros de la patrulla y nos llevaron a un callejón, ahí nos bajaron y nos obligaron a quitarnos la ropa y nos dieron toques en nuestras partes íntimas con una chicharra”, relató la víctima, quien es madre de un niño de 5 años.
Narró que los policías, al percatarse que su amiga se encontraba reglando, la bajaron de la camioneta y se fueron sobre ella nada más, y uno de ellos la obligó a que se hincara dándole toques y le practicara sexo oral.
“El policía me dijo ‘tú estás pagando lo de tu amiga, si ella no puede lo harás tú’, y después de darme toques con la chicharra en mi cuerpo me volteó y me violó”, narró la mujer, quien añadió que el sujeto era de aspecto sureño por el físico y por el acento.
...Y QUEDARON DETENIDAS
Después de haber satisfecho sus bajos instintos, el policía municipal –como lo identifica su víctima– y sus compañeros llevaron a las dos mujeres a los separos de la Comandancia Municipal pasadas las cuatro de la mañana, en donde quedaron detenidas junto con otros 13 personas, dos de ellas menores de edad.
La vulnerada mujer fue llevada el domingo 20 a las instalaciones de la PGJE para que el médico legista le practicara un examen, en donde los resultados arrojaron que efectivamente sí había sido víctima de violación.
“Antes de salir de las celdas, el tipo fue hasta donde estaba yo y me amenazó diciendo que era una peine y que a la próxima vez que me agarrara, ya no me iba a traer para acá”, relató la joven mujer, quien dice temer por su integridad y la de su familia por posibles represalias de su agresor.
Fue hasta el día de ayer que la afectada interpuso una demanda penal en las instalaciones de la PGJE contra el elemento que abusó de ella sexualmente, al igual que la dueña de la casa, por daños, perjuicio y robo en su propiedad.
Otras 15 personas también fueron golpeadas de manera salvaje durante su detención en el mismo evento.
Según la afectada, los hechos ocurrieron en la casa marcada con el 185 de la calle Manzanos, en dicho sector, a donde asistió con su novio a una fiesta de cumpleaños sin imaginar la agresión que sufriría a manos de los oficiales.
La joven de 22 años relató que fue el pasado domingo cuando se encontraba al interior de la casa donde se ofrecía la cena, el sonar de los vidrios quebrados a blockazos le robó la calma, percatándose de que un grupo de uniformados ingresaba por la fuerza al lugar.
Como resultado del allanamiento, los oficiales golpearon y sometieron a aproximadamente 15 personas que terminaron tras las rejas de la corporación policiaca local, menos la madre de familia y otra joven, quienes, según la primera, fueron subidas a la cabina de una patrulla en la que las llevaron a un sitio desconocido.
Brutalidad y excesos de la Policía Municipal
El fin se semana pasado resultó ser el más aterrador para los asistentes de una fiesta de cumpleaños, ya que cuando se convivían en la misma, varios elementos policiacos irrumpieron violentamente en el domicilio donde se llevaba a cabo, golpeando salvajemente a los asistentes y violando a una de las mujeres.
El sábado 19 de julio, la señora Aracely Rebolloso Tobías y su esposo organizaron una fiesta de cumpleaños para uno de sus hijos, por lo que invitaron a algunos familiares y amigos del joven, quienes llegaron al 185 de la calle de Manzanos de la colonia Saltillo 2000.
Niños y mujeres se encontraban dentro de la vivienda, mientras que el padre del festejado realizaba una discada afuera de la casa junto con varios jóvenes, quienes se encontraban ingiriendo bebidas alcohólicas, hecho que aparentemente disgustó a uno de los vecinos, pues dio aviso a las autoridades.
Eran las 1:00 horas del domingo cuando los asistentes se asustaron al ver varias patrullas de la Policía Municipal Preventiva, quienes rechinando llanta arribaron afuera del domicilio haciendo que los jóvenes corrieran dentro del mismo para resguardarse de los uniformados.
“Cuando vi que mi hijo entró despavorido diciendo ‘mamá, ahí vienen los polis’ le dije que no corriera si no estaba haciendo nada malo”, comentó la dueña de la casa, quien agregó que los uniformados rompieron vidrios con blocks y entraron a la fuerza hasta los cuartos.
Con lujo de violencia los oficiales entraron a todos los cuartos y se llevaron a todos los asistentes, quienes trataron de poner resistencia, pero los uniformados pidieron refuerzos, incluso accionaron un arma de fuego, pues en el lugar fue encontrado un casquillo.
El ama de casa dijo que una mujer policía la golpeó, la tiró al suelo y la agarró a patadas, insultándola y amenazándola ante la mirada atónita de sus hijos, dos de ellos niños pequeños y una jovencita de 14 años, quien quiso intervenir defendiendo a su madre y la agente arremetió contra ella, pero cuando le dijo que era menor de edad la soltó y la muchachita salió de la casa junto con sus hermanitos.
“La policía me esposó, pero como pude logré quitármelas y huí del lugar resguardándome en la casa de una vecina; mis pequeños hijos se encontraban llorando porque creían que yo estaba muerta”, puntualizó Aracely, quien mostró los rastros de violencia en su cuerpo.
¡Una pesadilla!
La peor de las pesadillas la vivió una joven de 22 años, quien había asistido a la fiesta junto con su novio y que se quisieron resguardar en uno de los cuartos para que no los detuvieran, pero nunca se imaginó la vileza de la que sería objeto.
“Los policías entraron al cuarto y nos agarraron a golpes, a mi novio lo golpearon bien feo y a una amiga y a mí nos subieron en los asientos traseros de la patrulla y nos llevaron a un callejón, ahí nos bajaron y nos obligaron a quitarnos la ropa y nos dieron toques en nuestras partes íntimas con una chicharra”, relató la víctima, quien es madre de un niño de 5 años.
Narró que los policías, al percatarse que su amiga se encontraba reglando, la bajaron de la camioneta y se fueron sobre ella nada más, y uno de ellos la obligó a que se hincara dándole toques y le practicara sexo oral.
“El policía me dijo ‘tú estás pagando lo de tu amiga, si ella no puede lo harás tú’, y después de darme toques con la chicharra en mi cuerpo me volteó y me violó”, narró la mujer, quien añadió que el sujeto era de aspecto sureño por el físico y por el acento.
...Y QUEDARON DETENIDAS
Después de haber satisfecho sus bajos instintos, el policía municipal –como lo identifica su víctima– y sus compañeros llevaron a las dos mujeres a los separos de la Comandancia Municipal pasadas las cuatro de la mañana, en donde quedaron detenidas junto con otros 13 personas, dos de ellas menores de edad.
La vulnerada mujer fue llevada el domingo 20 a las instalaciones de la PGJE para que el médico legista le practicara un examen, en donde los resultados arrojaron que efectivamente sí había sido víctima de violación.
“Antes de salir de las celdas, el tipo fue hasta donde estaba yo y me amenazó diciendo que era una peine y que a la próxima vez que me agarrara, ya no me iba a traer para acá”, relató la joven mujer, quien dice temer por su integridad y la de su familia por posibles represalias de su agresor.
Fue hasta el día de ayer que la afectada interpuso una demanda penal en las instalaciones de la PGJE contra el elemento que abusó de ella sexualmente, al igual que la dueña de la casa, por daños, perjuicio y robo en su propiedad.
(ZOCALO/ Ana Alvarado /23/07/2014 - 04:00 AM)
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