LA REINA DECRETA…
La visión del mundo, el
sentir y las virtudes
de la
soberana coronada anoche
por
el alcalde César Lizárraga y su esposa Consuelo
Albáñez
Fernando Villa
Escárciga
Su apariencia grácil es engañosa: Ari Mayté Orduño Rodríguez se adentra
en la mar, se acerca al cielo, escarba en la tierra.
Tiene mucha fortaleza física, también espiritual, sólidos valores y
un gran amor por Guaymas, al que disfruta y promueve.
Es muy inteligente, ejerce su derecho a ser joven, se divierte en
el cine con sus hermanas y en los antros con sus amigas.
Estudiosa de La Tierra, su composición y estructura, Ari Mayté
cursa el cuarto semestre de Geología en la Universidad de Sonora.
Hoy su alegría se multiplica en sonrisas. Es feliz, disfruta el
momento. Es la Reina del Carnaval
Internacional de Guaymas.
“Debemos sentirnos orgullosos de Guaymas, es el primer mensaje que
quisiera transmitir”, dice la joven soberana.
A veces surge la sensación de que no aprovechamos lo que tenemos,
nuestros recursos, la belleza de nuestras playas, todo,
expresa.
Hija de Roberto Orduño
Frye y María de la Cruz Rodríguez
Montaño, es la segunda en el orden de cuatro
hermanas.
Fue ahí, en el seno de la familia, donde hace cuatro años concibió
la posibilidad de participar como candidata a la corona.
Estirpe
“Sigues tú, yo te voy a ayudar, todos en la familia lo haremos”, le
dijo su hermana Annel Maricruza
pocos minutos de tomar el cetro.
Porque Annel I mayor asumió en el 2008 la monarquía de la fiesta
más importante de Guaymas. Hay estirpe de realeza, pues.
Vecina de la colonia Delicias, Ari cursó doce años de escuela en
los colegios Pacheco e Ilustración, luego en la Preparatoria Kino.
Durante la secundaria y prepa jugaba básquetbol, hoy se desliza a
velocidad de vértigo en patines sobre el suelo.
Cuando adolescente pensaba estudiar Ingeniería Civil, pero ya en el
bachillerato se interesó más por la geología.
“La verdad me gusta el contacto con la naturaleza, vivirla,
estudiarla; creo que estar tras un escritorio no se me da”,
comenta.
Su pensar essu vivencia, gusta ir a la playa a snorkelear, como
coloquialmente se dice al buceo respirando por un tubo.
También escsla cerros, hermanarse con la naturaleza. Le encantan
“El Cerro del Alacrán” y “El Cañón del Macapule”.
Ari Mayté sabe que su condición de Reina del Carnaval le permitirá
transmitir su mensaje a miles de personas.
“Creo que una Reina debe contribuir a concientizar a las personas
que vivimos en un puerto hermoso, que debemos aprovecharlo”, dice.
Más todavía, expone que como tal promoverá el turismo, las
bellezas naturales del Municipio, su hospitalidad, sus servicios.
“No sólo se trata de llevar el cetro con elegancia y dignidad sino
hacer algo por Guaymas, como emprender campañas por la limpieza de las playas,
expone.
Integridad
Segura de lo que quiere, siente admiración y respeto por dos
mujeres, especialmente por su madre.
“Admiro mucho la crianza que nos dio a sus cuatro hijas, su
trabajo, su esfuerzo. Es una mujer íntegra, mi modelo a seguir”,
expresa.
También admira a su maestra, la Doctora en Geología Diana Meza, por su inteligencia, por su
compromiso, porque ha llegado muy alto. “Ella me instruye, me muestra el
camino”.
La soberana del Carnaval es una muchacha sencilla, claridosa, fácil
de palabra y dispuesta a la buena amistad.
“¡Huy, sí!, me emocioné mucho cuando me eligieron Reina! Fueron
inolvidables momentos de alegría, de júbilo total", comenta.
La noche de la elección había que festejar y lo hizo, sus amigas la
invitaron a antrear y todo fue regocijo.
Al día siguiente el festejo continuó con una carne asada en el
entorno familiar, con amigos y la gente que le apoyó.
Sencilla, sin falsas poses ni arrogancias, considera que cualquiera
de las candidatas podía ganar porque cada una tiene sus virtudes.
Sí, en Guaymas hay muchísimas chicas que pueden ser reinas; no
basta ser agraciada, el chiste es querer hacerlo, tener voluntad,
comenta.
Lustre, dignidad
A Ari Mayté ya le cambió la vida y el brillo de sus mirar se
dispersa por todo Sonora a través de los medios, las entrevistas no
cesan.
“La señora Irma
Campillo es muy amable, nos ha tratado muy bien y está atenta a todo lo que
necesitamos”, dice de la Directora del Instituto de Festividades de
Guaymas.
A de Ari como evocando el aire; M de Mayté como una tía; O de
Orduño de su padre y y R de Rodríguez de la mamá forman la palabra
“amor”.
Y sí, esta muchacha expresa su amor por Guaymas y su gente, por sus
estudios, por la naturaleza, por las ganas de ser mejor.
Es Ari, quien con su sonrisa, inteligencia y garbo da lustre a
un cetro y una corona dignos de una verdadera Reina del Carnaval.
No hay comentarios:
Publicar un comentario