Fernando Villa Escárciga
De sucio y mentiroso calificó el
diputado Otto Claussen Iberri al
contralor estatal Carlos Tapia
Astiazarán, en torno al proceso que se le sigue al guaymense por presuntas
irregularidades como ex director del Issste.
Para empezar, “no he recibido
notificación alguna y si el Contralor dice lo contrario es un mentiroso y un
tramposo”, reviró el presidente del Congreso del
Estado.
Esto se trata de una evidente
guerra sucia instrumentada desde la Contraloría, dijo.
Sin duda, apuntó, estos embates
forman parte de una estrategia del Gobierno del Estado con miras a las
elecciones del primero de julio y que busca ensuciar la trayectoria de varios
diputados emanados del PRI.
Tras afirmar que su desempeño
como funcionario es honesto y transparente, Claussen igual arguyó que las
andanadas de la Contraloría son parte de la tirantez entre los poderes Ejecutivo
y el Legislativo.
Lo anterior también está inmerso, sostuvo, en la crisis
política por la falta de aprobación del Presupuesto 2012 para el gobierno de Guillermo Padrés Elías.
Sobre la acusación que pesa en su
contra, Otto Claussen apuntó no estar en posición de defenderse sobre un asunto
que desconoce y del que no ha sido notificado.
“Antes que el
proceso en mi contra, me preocupan la crisis del Presupuesto, la alerta de
Estados Unidos sobre la inseguridad en Sonora y la violencia que se vive en los
penales de la entidad”, apuntó.
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