Un
amigo que lo dio por muerto, le avisó a la madre
MEXICALI.-Eduardo
Nicolás Herrera Jiménez, de 15 años de edad, sostiene la batalla más difícil de
su vida en un hospital de la zona Oriente de la ciudad, tras sufrir en la
cabeza una herida provocada por un disparo de arma de fuego que lo mantiene
grave y con un pronóstico reservado.
Poco
se sabe de los responsables del intento de asesinato, pero se supo que el
adolescente ha sido detenido en algunas ocasiones por diversos ilícitos, entre
ellos el robo, según informaron fuentes de la Procuraduría General de Justicia
del Estado (PGJE).
A
través de un llamado al 066, registrado alrededor de las 23:30 horas, se hizo
de conocimiento de las autoridades, donde se indicó que un muchacho de 15 años
de edad, llegó a la clínica Arce Quiñones, ubicada en la calle Cuarta, en
González Ortega, con una herida de proyectil en la cabeza.
Agentes
municipales y ministeriales se abocaron al sitio para atender el incidente que
se originó, según la declaró la madre, en el fraccionamiento Arcos de Puebla,
donde encontró a su hijo tendido afuera de un domicilio con una herida crítica
en la cabeza.
Fuentes
de la PGJE precisaron que la madre del menor fue alertada por un amigo quien
comentó que la víctima se encontraba muerto afuera de su casa, por lo que se
abocó al sitio y con apoyo de vecinos se trasladó en un vehículo particular a
la mencionada clínica.
El
joven tenía una herida provocada por arma de fuego en la cabeza de alrededor de
medio centímetro del lado derecho, la cual fue ocasionada por una pistola de
calibre pequeño, aunque no se localizaron los casquillos en la escena.
Por
su parte, fuentes de la Policía Municipal indican que el presunto responsable
es un tipo conocido como “El Brian”, el cual escapó a bordo de una camioneta
color obscura, pero se desconoce el móvil de la agresión.
De
manera preliminar se informó que podría tratarse de un asunto relacionado al
robo, debido a la continua actividad delictiva que sostenía el infante, pero se
encuentran evaluándose otras posibilidades en su entorno.
Mientras
se realizan las indagatorias en torno al caso, el paciente se encuentra grave y
se desconoce si logrará sobrevivir.
Apenas
hace unas semanas, dos menores de la misma edad terminaron en el Hospital
General tras ser baleados por desconocidos. Ambos incidentes ocurrieron durante
la noche y a poca distancia uno del otro.
(EL
MEXICANO / Eduardo VILLA/01 OCTUBRE 2014)
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