Abuchean periodistas a alcalde electo al ratificar en su puesto a jefe policiaco
“¿Señor, Carlos Felton, presidente municipal electo, usted se
atreverá a tener en su gabinete a estos funcionarios que integran las
filas de Seguridad Pública?”, habían preguntado policías municipales
mediante una carta publicada la semana antepasada en las redes sociales
de Internet y entregada por algunos agentes a Ríodoce, que la publicó casi en su totalidad.
“Hay una frase que queda muy gravada (sic), añadía, y fue la que dijo
el Secretario de Seguridad Pablo Andrés: ‘Vale más que me maten 10 en
la Zona Rural y no que me maten o tiren uno en la Zona Dorada porque ahí
está cabrón, vuelan nuestras cabezas’”.
El pasado 4 de diciembre, 27 días para que el presidente electo
Carlos Felton González reciba el poder del saliente alcalde Alejandro
Higuera Osuna, en conferencia de prensa celebrada en el hotel Aguamarina
fue abucheado por algunos periodistas al dar a conocer que el actual
secretario de Seguridad Pública y Tránsito Municipal repetirá en su
puesto.
“El secretario de Seguridad Pública repite por una razón de sentido
común: no podemos arriesgar que el tema más importante en Mazatlán, que
es la seguridad, se vea en riesgo por el cambio de un hombre que hasta
ahorita la hecho muy bien”, aseveró.
El próximo presidente municipal del “sentido común” agregó: “Él
(Hernández Lizárraga) en un momento dado me tendrá que hacer la
propuesta de cómo habremos de invertir el Subsemun”.
El próximo alcalde fue abucheado cuando dijo esto.
Los policías denunciantes, en noviembre, advertían: “Porque si es
así, entonces seguirían trabajando la misma línea con la delincuencia
organizada”.
“¿Es cierto que usted está recibiendo presiones para que funcionarios
como Pablo Andrés Hernández Lizárraga repitan en sus puestos?”,
preguntó un reportero radiofónico al presidente electo que respondió con
un rotundo “no”.
Carlos Felton también respondió que no tiene compromisos con algún
grupo empresarial o de otro tipo, por lo que su gabinete será integrado
por funcionarios con el perfil técnico-profesional que requiere el
Gobierno municipal para funcionar con eficacia y eficiencia.
Ese 4 de diciembre se pudo constatar que la verdad del abucheo de algunos periodistas duele, porque al preguntarle Ríodoce
al alcalde electo si ya había leído la denuncia de los policías,
primero dijo que no (“¿cuál denuncia?, no la he leído”), luego con las
cejas tensas como un arco contra el reportero, se contradijo, al
reprochar a este semanario que le haya dado entrada a una carta anónima.
Al preguntarle al alcalde electo emanado de las filas del PAN, qué
iba a hacer al respecto, aventó la “papa caliente” a la Procuraduría
General de la República, argumentando que es esta a la que toca atender
ese tipo de denuncias.
—Los policías esperan que se haga una investigación sobre el
contenido de la denuncia, ¿usted como presidente electo va ordenar que
se haga una investigación? —se le pregunta a Felton González.
—Es un anónimo, ¡que den la cara (los policías), que den la cara! —respondió enojado.
—Pero, ¿usted va a ordenar una investigación? —se le insistió.
-—¡No sé!
Nada nuevo
La política del “sentido común” con la que gobernará a partir del 1
de enero el presidente electo, no es nada nuevo bajo el sol ni bajo la
luna, porque al menos desde su segunda administración municipal, el
actual alcalde Alejandro Higuera Osuna hizo “escuela” y hasta formó
“seminario”.
El 5 de mayo de 2005, la Policía Municipal detuvo en la Avenida del
Mar, frente a la desaparecida discoteca El Toro Bravo, a ocho
delincuentes con un arsenal propio de las grandes ligas del crimen
organizado. La patrulla trasladó a los ocho sicarios hasta el Tribunal
de Barandilla y de ahí se esfumaron misteriosamente dos
delincuentes y reportaron solo seis. El “sentido común” de los
correligionarios de Carlos Felton aseguraba que eran seis los detenidos,
mientras que fotografías tomadas por un reportero gráfico policiaco
evidenciaban ocho. En ese entonces, el alcalde Alejandro Higuera tenía
como director de Policía a su compadre Luis Noriega Ondorica, a quien
policías habían acusado mediante un informe escrito (como el que le
enviaron a Felton González por redes sociales, en noviembre pasado) de
proteger las narcotienditas en Mazatlán. Y finalmente Higuera Osuna tuvo
que renunciar a su sagrado compadre.
Cayetano Osuna/ diciembre 8, 2013
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