La joven estudiante permitió a una pareja pasar la
noche en su departamento, quienes la asesinaron la mañana siguiente. Foto:
Cortesía
Ensenada.- La presunta
coparticipe del homicidio de una estudiante de la Escuela de Gastronomía de la
UABC, quien fuera asesinada en diciembre de 2015, fue detenida en el estado de
Michoacán.
Amairani Judith Castro
Sánchez tenía 20 años de edad y provenía de la ciudad de Tijuana.
No tenía más de un año
viviendo en el puerto de Ensenada, a dos horas de la frontera, donde había
llegado para estudiar su carrera universitaria.
Vivía en un departamento de
alquiler en la Calle Novena de la Zona Centro, donde fue encontrada muerta el
11 de diciembre de 2015. Estaba maniatada y presentaba una herida de arma
blanca en el abdomen.
Esa madrugada llegó a su
domicilio un hombre que había sido su compañero de trabajo en una pizzería,
Gilberto Román, acompañado de una mujer de nombre Cinthia Aravel.
La pareja pidio alojamiento a
Amairani porque no traían dinero para un hotel ni para comer.
La estudiante les ofreció
alimento y les permitió pasar la noche en la sala. En la mañana, cuando les
pidió que se retiraran, la asesinaron. Además le robaron una computadora, una
televisión y tarjeta de crédito.
Según detalló el
subprocurador de Justicia, Marco Antonio Chavarría, elementos de la Policía
Ministerial lograron ubicar a Cinthia
Aravel en Pátzcuaro, Michoacán, quien tras participar en el homicidio había
huido a Jalisco y posteriormente a ese estado.
Este domingo la implicada fue
internada en el Centro de Reinserción Social (Cereso) de Ensenada, bajo los
cargos de homicidio calificado y robo con violencia, delitos por los cuales
podría alcanzar una sentencia de hasta 50 años, informó el subprocurador
Chavarría.
Mientras tanto, el
copartícipe del crimen, Gilberto Román, permanece recluido por los mismo cargos
en Sinaloa, donde fue detenido en julio
de este año. El subprocurador Marco Chavarría y los padres de la joven víctima,
en conferencia de prensa.
Ante el inusual caso de un
crimen esclarecido en su totalidad, los padres de la estudiante Amairani, Olga
Sánchez Meling y Víctor Castro Bravo, reconocieron el trabajo de las
autoridades, especialmente de los ministeriales Alberto Parrazales Cruz, José
Roger, Vicente Ramírez Estrada y Gerardo Díaz Sierra, así como del
subprocurador de Justicia.
“Siempre tuvieron
comunicación muy cercana, muy estrecha, nunca se perdió el hilo de la
investigación, sabemos de antemano que es un proceso largo que se tiene que
seguir, nosotros fuimos pacientes y confiamos en la capacidad de ellos y aquí
está el resultado”, expresaron.
(SEMANARIO ZETA/ Juan Carlos Domínguez/
Sábado, 1 octubre, 2016 06:50 PM)
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