Colima.- El pasado 20 de enero, el albergue "Reconstruyendo
la Vida" (Recolavi) recibió a una joven de 15 años en crisis,
visiblemente afectada por el consumo de drogas, llegó con la ropa
desgarrada y con heridas en sus antebrazos.
Laura Fuentes Martínez, Fundadora del Albergue Femenil, entrevistada por Excélsior señaló que la menor fue internada por sus padres y hasta ese momento suponían que había consumido krokodil.
"Llegó toda cortada, trae dos mordidas, una en cada rodilla no se alcanzó a arrancar el pedazo, pero en un brazo sí, poquito, tiene 15 años de edad, es de aquí de Colima de la colonia V. Bonfil y la verdad es impactante, a mí me impresionó demasiado ver llegar a esa niña, porque es consumidora de krokodil y honestamente me duele bastante", afirmó.
Sobre este caso la Secretaría de Salud en Colima a través de en un comunicado de prensa desmintió la presencia de la droga krokodil en el estado.
"Hasta el momento no se han presentado casos de consumo de esta nueva sustancia en la entidad, pero de presentarse, serán necesarios primeramente los servicios por parte de los hospitales que cuentan con el equipamiento necesario", indica.
En entrevista con Grupo Imagen Multimedia, la joven de 15 años, confesó haber sido víctima de abuso sexual desde los 7 años y en más de diez ocasiones ha intentado quitarse la vida.
"Yo quiero acabar con mi vida, por qué razón, por muchas razones, problemas que tal vez si te los digo a ti te parecerán estupideces, pero para mí son razones suficientes para quitarme la vida", sostuvo.
Un día antes de ingresar al albergue, la persona que la agredía sexualmente abusó de ella nuevamente, desesperada consumió una droga por la que pago 20 pesos.
"La pastilla me costó 20 pesos, la tomé empecé alucinar, no sentí nada, en esos momentos podía cortarme y no sentir nada, mis alucinaciones eran al máximo, fueron efectos que no cualquier droga te hace", afirmó.
Laura Fuentes Martínez, Fundadora del Albergue, mencionó que a su corta edad ya había probado otras drogas como la cocina y el ice "es hija de una familia disfuncional y pues por ende, de ahí todos los problemas, empezó primero con la mariguana, de ella brincó a la cocaína, de la cocaína le brincó al ice, del ice al krokodil".
Ante la supuesta aparición del primer caso por consumo de krokodil, médicos integrantes del Consejo Estatal contra las Adicciones en Colima, acudieron al albergue para realizar los análisis correspondientes.
El diagnóstico arrojó "Adolescente con Abuso de Sustancias", el informe fue elaborado por la terapeuta María Nares Reyes.
La joven continúa internada y se encuentra en proceso de desintoxicación, hasta el momento su evolución es satisfactoria, aseguró Laura Fuentes Martínez.
"La verdad estoy sorprendida, cómo ha evolucionado en tan poquitos días, porque cuando llegó la niña, te impactabas de verla, pero ahorita ya gracias a Dios está un poco mejor", señaló.
El nombre científico de la droga es desomorfina y se fabrica en casa adquiriendo codeína -que se vende para el dolor de cabeza sin necesidad de receta- y cocinándola con disolvente de pintura, gasolina, ácido clorhídrico, yodo y fósforo rojo del rascador de las cajas de cerillos.
El krokodil se utiliza como una droga alternativa a la heroína, ya que sus precursores son relativamente fáciles de conseguir y una dosis de ella cuesta entre tres y cinco veces menos que una de heroína.
Laura Fuentes Martínez, Fundadora del Albergue Femenil, entrevistada por Excélsior señaló que la menor fue internada por sus padres y hasta ese momento suponían que había consumido krokodil.
"Llegó toda cortada, trae dos mordidas, una en cada rodilla no se alcanzó a arrancar el pedazo, pero en un brazo sí, poquito, tiene 15 años de edad, es de aquí de Colima de la colonia V. Bonfil y la verdad es impactante, a mí me impresionó demasiado ver llegar a esa niña, porque es consumidora de krokodil y honestamente me duele bastante", afirmó.
Sobre este caso la Secretaría de Salud en Colima a través de en un comunicado de prensa desmintió la presencia de la droga krokodil en el estado.
"Hasta el momento no se han presentado casos de consumo de esta nueva sustancia en la entidad, pero de presentarse, serán necesarios primeramente los servicios por parte de los hospitales que cuentan con el equipamiento necesario", indica.
En entrevista con Grupo Imagen Multimedia, la joven de 15 años, confesó haber sido víctima de abuso sexual desde los 7 años y en más de diez ocasiones ha intentado quitarse la vida.
"Yo quiero acabar con mi vida, por qué razón, por muchas razones, problemas que tal vez si te los digo a ti te parecerán estupideces, pero para mí son razones suficientes para quitarme la vida", sostuvo.
Un día antes de ingresar al albergue, la persona que la agredía sexualmente abusó de ella nuevamente, desesperada consumió una droga por la que pago 20 pesos.
"La pastilla me costó 20 pesos, la tomé empecé alucinar, no sentí nada, en esos momentos podía cortarme y no sentir nada, mis alucinaciones eran al máximo, fueron efectos que no cualquier droga te hace", afirmó.
Laura Fuentes Martínez, Fundadora del Albergue, mencionó que a su corta edad ya había probado otras drogas como la cocina y el ice "es hija de una familia disfuncional y pues por ende, de ahí todos los problemas, empezó primero con la mariguana, de ella brincó a la cocaína, de la cocaína le brincó al ice, del ice al krokodil".
Ante la supuesta aparición del primer caso por consumo de krokodil, médicos integrantes del Consejo Estatal contra las Adicciones en Colima, acudieron al albergue para realizar los análisis correspondientes.
El diagnóstico arrojó "Adolescente con Abuso de Sustancias", el informe fue elaborado por la terapeuta María Nares Reyes.
La joven continúa internada y se encuentra en proceso de desintoxicación, hasta el momento su evolución es satisfactoria, aseguró Laura Fuentes Martínez.
"La verdad estoy sorprendida, cómo ha evolucionado en tan poquitos días, porque cuando llegó la niña, te impactabas de verla, pero ahorita ya gracias a Dios está un poco mejor", señaló.
El nombre científico de la droga es desomorfina y se fabrica en casa adquiriendo codeína -que se vende para el dolor de cabeza sin necesidad de receta- y cocinándola con disolvente de pintura, gasolina, ácido clorhídrico, yodo y fósforo rojo del rascador de las cajas de cerillos.
El krokodil se utiliza como una droga alternativa a la heroína, ya que sus precursores son relativamente fáciles de conseguir y una dosis de ella cuesta entre tres y cinco veces menos que una de heroína.
(ZOCALO/ Excélsior /22/05/2014 - 08:48 AM)
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