Jesús Barraza Z. / Sanluisrc.com
"Los
chilaquiles de la paz" que recientemente le convidó Leonardo Guillén al
dirigente municipal del Partido Revolucionario Institucional (PRI), Lic. Juan
Antonio López Álvarez, le van a salir muy caros al revolucionario.
El gris y flaco
dirigente priísta se tragó el cuento de que Leonardo Guillén consolidará un
gobierno "incluyente", donde ciudadanos y actores de todas las
ideologías partidistas y credos serán tomados en cuenta.
Pero mientras el
Presidente Municipal le juega el dedo en la boca a Juan Antonio López Álvarez,
Paolo Navarro, el director de Desarrollo Social, y sobre todo su lugarteniente,
Gerardo Alain Rodríguez Torres, van tejiendo astutamente un ejército de
"Comités Ciudadanos" conformados por conocidísimos panistas.
A medida que Gerardo
Alain Rodríguez Torres cumple el encargo de empanizar los susodichos comités,
Leonardo Guillén se deshace tomándose fotos con actores políticos y
empresariales de todas las corrientes ideológicas para hacerles creer que verdaderamente
pretende un gobierno "incluyente".
Al Partido
Revolucionario Institucional le va a salir muy cara la ingenuidad y la
docilidad con la que su dirigente se presta a este juego perverso de Leonardo
Guillén, quien engaña a toda la gente de San Luis.
Los "Comités
Ciudadanos" es el ejército electorero que al amparo del poder y las
facultades que le confiere ser presidente municipal, prepara Leonardo Guillén
previo a los comicios del 2015, cuando Sonora tendrá que elegir gobernador otra
vez.
El ejército
electorero ciudadano de Guillén se extiende ya desde los más recónditos barrios
de la mancha urbana hasta los poblados mas alejados del Valle de San Luis.
Las cabezas visibles
de estos comités son apasionados panistas que le garantizarán a Guillén y al
PAN, un dominio casi absoluto en los cuatro puntos cardinales de esta
demarcación electoral.
Y con la alianza de
Guillén con Juan Antonio López Alvarez, es seguro garantizar el debilitamiento
de la estructura territorial del PRI, que un día fue poderosa y emblemática.
Ante este escenario
no se necesita ser brujo para pronosticar que los chilaquiles que junto con
Guillén se comió Juan Antonio López Álvarez, le van a salir muy caros al
Partido Revolucionario Institucional (PRI) y a la familia priista, un trofeo
que, hay que reconocerlo, el PAN le deberá al Presidente Municipal.
(DOSSIER
POLITICO/ Jesús Barraza Z. / Sanluisrc.com/ 2013-03-28)
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