El PRI busca que el
candidato surja de la unidad, que lleguen los acuerdos y nadie salga lastimado,
dice
Fernando Villa Escárciga
José Luis Marcos León Perea no titubea al exponer sus posibilidades de ser candidato: “Sigo en
la pelea, todavía no hay nada para nadie”.
Para el diputado con licencia la
suerte está echada y de un momento se definirá la postulación del abanderado del
PRI a la Alcaldía.
Todavía es está a la espera de que
el partido decida, porque la idea es que surja un candidato de unidad con el
respaldo de todos, dice.
“No quiero adelantar vísperas, pero
hay gente interesada que sea uno o el otro”, refiere en torno a las
posibilidades de los más firmes sonantes.
Además de León Perea, también existe
la posibilidad de que el candidato priísta sea el también diputado con licencia
Otto Claussen Iberri.
Versiones al seno del Revolucionario
Institucional indican que las definiciones podrían darse el domingo once de
marzo que se asoma.
Lo importante, dice el oftalmólogo
de profesión, es que los grupos y la militancia se pongan de acuerdo, bajo el
entendido de que la unidad fortalece al PRI.
“Es lo que queremos todos, que el
candidato surja de la unidad, que lleguen los acuerdos y nadie salga lastimado”,
manifiesta.
León Perea quiere descartar que un
solo grupo del PRI se lleve todas las canicas: Sería lastimoso para el partido,
para la militancia, para todos.
Por ahora no piensa, dice, en otra
cosa que no sea la candidatura a la Presidencia Municipal pero descarta
postularse por otro partido político.
“Sí, aceptaría ser candidato de
otros partidos pero en alianza que encabece el PRI porque soy y siempre seré
colorado”, apunta
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