El Diario de El Paso
La mayor parte de la
metanfetamina que se ha logrado decomisar en El Paso y áreas circunvecinas
recientemente, proviene del Cártel de Sinaloa que lidera ‘El Chapo’ Guzmán,
confirmó ayer la Agencia Antinarcóticos estadounidense (DEA, por sus siglas en
inglés).
“Nuestra inteligencia lo revela”, expresó la portavoz de la
División de la DEA en El Paso, Diana Apodaca.
De acuerdo con informes
oficiales, una libra de la droga sintética, –también denominada metas– llega a
ser comercializada hasta por 15 mil dólares en esta frontera.
Apodaca
mencionó que ese precio se ha mantenido igual ya que “no hemos visto una
creciente tendencia en nuestra área de responsabilidad”.
La jurisdicción
de la División de la DEA en El Paso cubre todo el estado de Nuevo Mexico y 17
condados del Oeste de Texas, incluyendo El Paso.
Los agentes de esta
dependencia federal participaron en el desmantelamiento esta semana de una
célula del cártel de Sinaloa, que suministraba metanfetaminas a ciudades en el
Sureste de Nuevo México y Texas, con la acusación formal de una veintena de sus
miembros y el arresto de la mayoría de ellos.
La droga era importada de
México, a través de Ciudad Juárez, y almacenada en El Paso para su distribución
a territorio neomexiquense y texano.
El líder de la banda, identificado
como Pablo Carrasco, se encuentra fugitivo y se cree que está escondido en
Ciudad Juárez, dijeron las autoridades.
El miércoles el fiscal federal
del Distrito de Nuevo México, Kenneth González, junto con el agente especial de
la División de la DEA en El Paso Joseph Arabit y el agente especial del Buró
Federal de Investigaciones (FBI) de El Paso Carol K.O. Lee, anunció que un gran
jurado acusó el día anterior a 17 miembros de la banda, incluido Carrasco, de
los delitos de conspiración para violar las leyes federales de narcóticos y de
lavado de dinero.
Otros tres individuos fueron acusados de traficar
metanfetaminas en Quejas Formales presentadas, también, el 29 de
noviembre.
Las autoridades federales informaron que el miércoles fueron
arrestados 13 del total de 20 acusados durante un operativo multi-agencia
liderados por el FBI y la DEA. Todos los detenidos son residentes de Nuevo
México, incluidos Carlsbad.
El resto ya estaban en detenidos, cuatro de
ellos el 31 de octubre, y tres más, apenas el 10 de noviembre. Dos eran de
Canutillo, Texas.
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