El director de Protección Civil de Culiacán dice que solo recomendó tomar precauciones
El director de Protección Civil de Culiacán, Jorge Luis Urtusuástegui
Ibarra, negó que al mediodía del 19 de septiembre, antes de que el
huracán Manuel causara estragos, él hubiera pedido al Comité
Estatal de Protección Civil que fueran desalojadas algunas zonas de
susceptibles de inundarse en el Desarrollo Urbano Tres Ríos.
Afirmó que era impredecible determinar qué partes y en qué medida
afectaría “ese mundo de agua” que se vino sobre la ciudad por lo que
solo aconsejó a los culiacanenses tomar las precauciones debidas.
Ante las versiones de que las autoridades estatales y municipales
desestimaron la recomendación de desalojar que supuestamente él hizo,
Urtusuástegui Ibarra señaló que dejaba en manos de la población la
decisión de irse de sus casas o quedarse en ellas en lugares seguros.
“Yo no sé por qué me meten a mí en problemas, negativo. Solo dije que
el que quisiera hacerlo se saliera. Que el que quiera hacerlo lo puede
hacer por mera precaución mas no dije nunca que había que desalojar. Eso
no lo dije yo. Por eso no me gusta dar información, porque ponen lo que
quieren. Yo nunca lo dije”.
Y remarcó: “Lo niego rotundamente. Jamás lo dije. Ese día yo andaba
con el señor presidente (Aarón Rivas Loaiza), andábamos juntos y con el
señor gobernador (Mario López Valdez). Tuvimos una reunión en Gobierno,
yo nunca me despegué de él. Andábamos ayudando a la gente hasta las
cuatro de la tarde. Dicen que fue como a las doce del día cuando dije
eso y yo andaba con el presidente. No sé en qué momento lo dije”.
—¿Entonces qué fue lo que dijiste? ¿Una simple recomendación a la población?
—La recomendación que le hice yo a la población es que el que
quisiera salirse se fuera a los albergues que había en el Polideportivo
de la UAS y la Universidad de Occidente. Y le recomendaba: si tienes una
casa de dos pisos sube al segundo y estate tranquilo mientras nosotros
vamos y te apoyamos. Era por precaución, para que se sintieran
tranquilos, es lo que yo decía, nunca hablé de desalojar.
—¿En ese momento en que hacías esa recomendación no veías la
posibilidad de que se presentara una situación grave como la que
ocurrió?
—Dicen que yo lo dije como a las dos de la tarde o doce del día y no
se miraba todavía que era un mundo de agua. Y me seguían llamando a las
cuatro y cinco, que yo estaba ocupadísimo, que recibí entre 500 y 600
llamadas pidiéndome la gente qué podían hacer, pero yo nunca hablé de
desalojar. No sé de dónde salió todo eso.
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