H. Carrasco / R. Gallegos
Una letal
combinación de costos y burocracia virtualmente ha ‘tronado’ el programa de
regularización de ‘chuecos’ impulsado por el Gobierno del Estado, a menos de 10
días de haber arrancado.
Sólo una de cada 10
personas que solicitan cotizaciones a los agentes aduanales para importar sus
vehículos toma la decisión de regularizarlo, mientras que las restantes nueve
deciden esperar, generalmente por falta de dinero o porque la diferencia con
los precios anteriores les parece poca y deciden buscar otras opciones.
Así, sólo 272
personas han podido concretar la legalización de sus unidades en esta ciudad.
“Es poco el avance
reportado”, dijo ayer Rodolfo Martínez García, presidente de los agentes
aduanales, al rendir un reporte a 10 días de implementado el programa.
Hasta ahora, señaló,
la mayoría de los que acuden a los módulos únicamente solicitan información
sobre los precios de los trámites, porque externan que no tienen dinero.
Información obtenida
en Recaudación de Rentas indica que 3 de cada 20 dueños de vehículos que ya
cuentan con engomado ecológico, han emprendido los procesos de regularización.
Un agente aduanal
asignado a dar cotizaciones a los automovilistas en el módulo “El Paseo” de
Recaudación de Rentas, informó que muchos guiadores se retiran decepcionados al
considerar que “no hubo nada de rebaja”, pues esperaban que los precios fueran
más bajos.
“Algunos dicen que
el proceso es muy caro y otros que no”, agregó. “Pero aunque lo consideren
accesible, no cuentan con dinero para emprender la regularización”.
“Hace rato llegó un
señor y recibió una cotización de 22 mil pesos y dijo que no le convenía, que
no completaba esa cantidad y decidió ir a buscar otra opción”, informó.
Además hay unidades
que no pasan por los títulos ‘Salvage’ ya que son vehículos siniestrados,
inundados o robados y por ese motivo no pasan, pues al revisarlos el sistema
los rechaza, expresó.
De cada 10 personas
que acuden a pedir cotizaciones, es decir, a preguntar cuánto cuesta la
regularización de sus carros, solamente una acepta el precio y tiene dinero
para emprenderla, dijo.
Agregó que en los 10
módulos instalados por igual cantidad de agencias aduanales en dicha oficina
estatal, entregan un promedio de 400 a 500 cotizaciones diariamente, agregó.
Cada empresa
consigue cuatro, cinco, seis y máximo ocho trámites por día, informó.
Enrique Machuca
acudió ayer a pedir la cotización para regularizar su vehículo Toyota Cambridge
1994, pero luego de conocer el precio decidió pensarla un poco, luego decidió
aceptar pero ahora debe reunir el dinero.
“Me habían dicho
anteriormente que eran 9 mil pesos y ahora me lo están poniendo en 7 mil 963”,
es poca diferencia, pero el primer valor era por fronterizarlo y el segundo por
nacionalizarlo, agrega.
Juan de Dios Muñoz
dijo que legalizar su Gran Caravan 2000 “sale casi lo mismo” que antes de que
pusieran en marcha este programa, pues le cobran 7 mil 800 pesos con todo y
placas, es decir, unos 410 pesos menos.
Así las cosas, ya
para arreglar este problema, hoy acudirá a comenzar el trámite de legalización,
expresó.
Jorge Garay se
desmotivó cuando le informaron que le cuesta poco más de 8 mil pesos
nacionalizar su troca Ford F-150, pues antes de este programa le habían dado un
precio de 10 mil pesos. Ante ello, prefirió esperar.
Otro guiador expresó
desesperado que su auto de origen coreano fue rechazado. “No entra, a pesar de ser
un carro sencillito, de cuatro puertas, como un Sentra”.
“No puede importarse
por “tonterías; no quedará más opción que llevarlo a un yonke”, informó.
Esta semana,
incluso, la afluencia de interesados disminuyó drásticamente, lo cual se pudo
apreciar ayer en un recorrido.
“No es que uno no
quiera andar legal, es que no tenemos dinero”, expresó José al salir del módulo
El Paseo. Ahí, cerca del mediodía sólo tres de 12 agentes instalados en el
lugar tenían actividad.
Personal de los
agentes que operan en ese lugar informó que la mayoría de la gente pide datos y
paga la verificación ecológica; les dicen que van a regresar después “cuando
tengan dinero” para seguir con los
tramites del programa que estará vigente hasta el 18 de julio.
“Es muy poquito lo
que nos bajan”, dijo Dora Mendoza, al salir de la oficina de Recaudación de la
calle Mitla, donde le informaron que regularizar su Nissan Versa 200,8 con el
esquema impulsado por el Gobierno del Estado, le cuesta 13 mil 724 pesos.
La mujer que dijo
esperaba importar su unidad con tarifas más baratas porque siempre anunciaban
que iba a costar hasta 50 por ciento menos y, en su caso, son 2 mil 200 pesos
menos a los 16 mil que le cobran en una agencia.
El presidente de la
a Unión Independiente de Vendedores de Autos y Camiones Usados (UIVAC), Alfonso
Delgado, dijo que el programa no ofrece diferencias significativas de precios.
“Realmente es mínima, comparando con otros esquemas”, agregó.
Además del programa
especial que impulsa el Estado, los ciudadanos tienen otras tres opciones de
importación: el amparo que ofrecen comercializadoras para evadir el pago de
impuestos federales; el programa vigente por el decreto para fronterización o
la nacionalización, así como el denominado valor factura.
Los costos en cada
uno de esos esquemas son distintos, de acuerdo con datos proporcionados por
agencias aduanales.
Así, la importación
definitiva de un automóvil Focus 2003 bajo el programa especial impulsado por
el estado en la entidad le sale a los ciudadanos en 5 mil 575.43 pesos,
cantidad que se eleva por el costo de placas y pagos de contribuciones
estatales.
Si quiere hacer esa
gestión a través de una comercializadora en el esquema conocido como valor
factura le cuesta a los ciudadanos 478 dólares - 6 mil 166 pesos con el tipo de
cambio a 12.90 pesos por dólar como estuvo vigente ayer-.
Las otras dos
opciones tienen tarifas más elevadas. Por ejemplo, fronterizar ese Focus 2003
cuesta un 9 mil pesos y nacionalizarlo, eleva el precio a 26 mil pesos.
En todos los casos
también deben sumarse el costo de placas, mil 200 pesos, y de derechos cobrados
por el estado.
Pero además de la
diferencia de precios, las gestiones bajo esos programas son menores que las
establecidas por el estado.
En esos casos, los
ciudadanos dejan en manos de los empleados de las agencias todos los trámites,
sólo entregan los documentos de las unidades a importar de manera definitiva,
en tanto que en el programa del estado son ellos que deben ir y venir de un
lugar a otro para cumplir con lo establecido.
Debido a esto, los
ciudadanos entrevistados critican que las autoridades hayan implementado el
programa bajo un esquema en el que deben trasladarse a distintos puntos para
dar seguimiento a sus trámites.
La logística del
proceso establecido por el estado indica que los automovilistas deberán acudir
primeramente a una oficina de Recaudación Rentas a pagar la revisión ecológica,
para lo cual se destinaron tres instalaciones:
“El Paseo”, en
avenida Adolfo López Mateos y Óscar Flores; “Mitla”, en Palacio de Mitla 1151
del fraccionamiento Torres del Sur; y “Zaragoza”.
Una vez que hayan
pagado ese documento, los guiadores deberán trasladarse a cualquiera de dos
módulos donde se hará la revisión de emisiones a sus automotores.
Estos se encuentran
ubicados en el estacionamiento del estadio de béisbol “Juárez Vive”, en calle
Eduardo Sanders y eje vial Juan Gabriel; y en el exterior de la oficina de
Recaudación El Rodeo, en avenida Abraham Lincoln, casi Malecón.
Si el vehículo
aprueba la verificación, el guiador deberá regresar al módulo de Recaudación a
entrevistarse con el representante de un agente aduanal para iniciar el
trámite.
El dirigente de los
aduanales, Rodolfo Martínez García dijo que desde hace días los agentes están
en pláticas con autoridades estatales para modificar ese esquema para
facilitarlo.
Indicó que se ha
propuesto trasladar los módulos de los agentes hacia los puntos donde se
realiza la verificación ecológica de las unidades, específicamente al ubicado
en el nuevo estadio de beisbol, pero aún no reciben respuesta de las
autoridades.
(El Diario H. Carrasco / R. Gallegos/ 2013-01-29 |
23:37)
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