Redacción
Saltillo, Coah.- Uno de los seis cuerpos localizados el lunes
en un predio del ejido Guadalupe Victoria es el de un alto funcionario
del Instituto Electoral y de Participación Ciudadana de Coahuila,
revelaron fuentes de la Procuraduría estatal. Otros cuatro cadáveres
también ya fueron identificados.
Natanael Rivera Gutiérrez, secretario ejecutivo del organismo, habría muerto a causa de un disparo en la cabeza, así como por las múltiples lesiones provocadas por los homicidas; también habría sido arrollado por una camioneta.
El funcionario estaba casado con Blanca Azucena Hernández y tenían un hijo.
La PGJE dio a conocer que derivado del hallazgo de los cuerpos fueron detenidos como responsables confesos de los homicidios Luis Alfonso Monsiváis Calderón, “El Manguera”, y Tomás Mauricio Sifuentes, “El Mega”.
Además son investigadas 18 personas, entre las que se encuentran José Demetrio Moreno, “La Polla”, y Miguel Ángel Salinas Salas, “La Pulga”, que forman parte de los prófugos del Cereso de Piedras Negras.
A través de un comunicado de la Procuraduría trascendió de manera oficial la identificación del cadáver de Rivera Gutiérrez, así como de los restos de Juana María Rosales Gallegos, de 66 años; su hijo, Iván Esparza Rosales, de 25; Adriana Zermeño López, de 36 años, quien era empresaria, y de Olga Cabrera Hernández, de 47.
La PGJE aclaró que aún queda una persona del sexo masculino sin identidad y que Servicios Periciales estatales y federales trabajan en su identificación.
Tras practicarles la necropsia a las víctimas, comentaron fuentes ministeriales, se determinó que murieron por contusiones y traumatismos craneales severos, además de que presentaban impactos de bala y señales de tortura.
Además, salió a relucir que después de haber sido tirados en el predio baldío, los cuerpos fueron aplastados por un vehículo pesado, como lo señalaron las marcas que se encontraron en los mismos.
Natanael Rivera Gutiérrez, secretario ejecutivo del organismo, habría muerto a causa de un disparo en la cabeza, así como por las múltiples lesiones provocadas por los homicidas; también habría sido arrollado por una camioneta.
El funcionario estaba casado con Blanca Azucena Hernández y tenían un hijo.
La PGJE dio a conocer que derivado del hallazgo de los cuerpos fueron detenidos como responsables confesos de los homicidios Luis Alfonso Monsiváis Calderón, “El Manguera”, y Tomás Mauricio Sifuentes, “El Mega”.
Además son investigadas 18 personas, entre las que se encuentran José Demetrio Moreno, “La Polla”, y Miguel Ángel Salinas Salas, “La Pulga”, que forman parte de los prófugos del Cereso de Piedras Negras.
A través de un comunicado de la Procuraduría trascendió de manera oficial la identificación del cadáver de Rivera Gutiérrez, así como de los restos de Juana María Rosales Gallegos, de 66 años; su hijo, Iván Esparza Rosales, de 25; Adriana Zermeño López, de 36 años, quien era empresaria, y de Olga Cabrera Hernández, de 47.
La PGJE aclaró que aún queda una persona del sexo masculino sin identidad y que Servicios Periciales estatales y federales trabajan en su identificación.
Tras practicarles la necropsia a las víctimas, comentaron fuentes ministeriales, se determinó que murieron por contusiones y traumatismos craneales severos, además de que presentaban impactos de bala y señales de tortura.
Además, salió a relucir que después de haber sido tirados en el predio baldío, los cuerpos fueron aplastados por un vehículo pesado, como lo señalaron las marcas que se encontraron en los mismos.
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