ABUSOS EN SINALOA BAJO LA SOMBRA DEL PODE4R

Piden a Malova sacar las manos de un conflicto familiar

Luis Fernando Nájera

Amparado en el poder político de la familia, que mantiene estrechas relaciones con el gobernador de Sinaloa, Mario López Valdez, un empresario local torció las leyes y las instituciones para su provecho, y en consecuencia desintegrar el clan doméstico. David Sáenz Cárdenas va en “caballo de hacienda” ganando todos los procedimientos familiares, civiles y penales que su exesposa, Marisol Román Ferrer, ha intentado para recuperar a sus hijos, Marisol (8), David (6) y Elsa Patricia (3), a quienes el padre separó por medio del tráfico de influencias, fuerza bruta y de las armas de fuego, tras romperse abruptamente una relación de siete años, denuncia la familia de ella. “Ya han cumplido 40 días secuestrados e incomunicados de la madre”. Luis Sáenz Hunger, padre de David, fue un promotor y benefactor de campaña por la gubernatura de Sinaloa, mientras un abogado que resulta ser hijo del procurador genera de Justicia del Estado, Marco Antonio Higuera Gómez, apareció como el apoderado legal de la familia del rijoso. Elsa Ferrer de Román, Guillermo y Lupita Ferrer, y Mirna Román Grijalva, madre, tíos y prima de Marisol, respectivamente, pidieron al gobierno de López Valdez sacar las manos del conflicto familiar y que se repongan los procedimientos viciados de origen y la integración de las averiguaciones previas conforme a derecho, sin sesgos ni favoritismos como hasta ahora ha ocurrido desde diciembre del 2011, cuando comenzó el vía crucis legal. En el año 2011 —contaron— la juez Yolanda Zazueta Lara resolvió el juicio de divorcio 490/2011-I, pasando por alto su obligación de velar por la protección de los infantes e incapaces, y sentenció que los pequeños deberían estar bajo la custodia del padre, autorizando la convivencia con la progenitora durante tres horas al día, aprovechando que la madre de los pequeños había sido sorprendida por los abogados del ahora exesposo y le hicieron firmar un convenido, en el que posteriormente apareció la cesión de la tutela de los menores. Durante meses, la sentencia se incumplió porque los pequeños no quisieron abandonar a la madre y se mantuvieron unidos; sin embargo, el 15 de enero del 2012, en un arrebato de furia de la familia Sáenz, el padre de los chicos, David Sáenz Cárdenas, los abuelos paternos, Luis Sáenz Hunger y Pachita Calderón de Hunger, y los tíos, Isaac Sáenz Cárdenas y Luz del Carmen (Paloma) Magdalena Sáenz, allanaron a mano armada la casa de Marisol, en el fraccionamiento La Villa, y la agredieron no solo a puñetazos sino también a puntapiés, empellones e insultos menudearon. La agresión fue denunciada en la Agencia del Ministerio Público del Fuero Común Especializada en Violencia Intrafamiliar y se integró la averiguación previa 13/2012 en contra de David Sáenz Cárdenas y los que resulten responsables. “La averiguación no mantiene el procedimiento normal, sino que fue congelada, por órdenes de algún funcionario poderoso”, dijeron. La misma paralización se mantiene sobre la averiguación previa 958/2011 que por amenazas interpuso Marisol contra su marido, en tiempo en que la crisis matrimonial estaba por estallar. La familia de ella afirmó que hasta ahora se han topado con pared cuando reclaman justicia y que el agresor y su familia sean sometidos a los designios de la ley, porque hay una sobreprotección política a la familia del agresor. Los quejosos precisaron que la forma en que se tuerce la ley en Sinaloa por las relaciones de poder ya fue denunciada ante el presidente de la República, Felipe Calderón Hinojosa, en su reciente visita a Topolobampo.