Saltillo, Coah.- Animado por los efectos del vino, un sujeto llegó a su casa queriendo terminar la parranda “con broche de oro”, al someter a su esposa para tratar de sostener relaciones sexuales sin el consentimiento de ésta, aunque al no conseguirlo trató de incendiar la casa como represalia al rechazo sufrido minutos antes.
Fue alrededor de las 3:30 horas de ayer cuando Carlos Alberto de los
Santos Sena arribó a una vivienda de la calle Novena, en la colonia
Mirasierra, donde eufórico por el momento que vivía se dirigió a su
pareja Guadalupe para comenzar el fallido cortejo.
Convencido de que le darían una prueba de amor, el borracho de 37 años comenzó su labor de convencimiento pero falló en el intento, cambiando la dulzura por el odio tras amagar a la mujer para satisfacer sus bajezas a cualquier precio.
Mientras vapuleaba salvajemente a su pareja sentimental, el sujeto reclamaba airadamente los desprecios a la dama, recetándole una tanda de cachetadas para en un acto de locura romper los muebles que encontraba a su paso.
No conforme con eso, el pirómano sacó de entre sus ropas un encendedor que prendió con coraje para tratar de quemar el mobiliario del lugar, siendo entonces cuando la ofendida salió corriendo para solicitar la intervención de las autoridades.
Poco después, agentes municipales arribaron al sitio para someter y poner bajo arresto al enfurecido marido, que fue llevado a los separos policiales donde quedó detenido por los delitos que le resulten.
Convencido de que le darían una prueba de amor, el borracho de 37 años comenzó su labor de convencimiento pero falló en el intento, cambiando la dulzura por el odio tras amagar a la mujer para satisfacer sus bajezas a cualquier precio.
Mientras vapuleaba salvajemente a su pareja sentimental, el sujeto reclamaba airadamente los desprecios a la dama, recetándole una tanda de cachetadas para en un acto de locura romper los muebles que encontraba a su paso.
No conforme con eso, el pirómano sacó de entre sus ropas un encendedor que prendió con coraje para tratar de quemar el mobiliario del lugar, siendo entonces cuando la ofendida salió corriendo para solicitar la intervención de las autoridades.
Poco después, agentes municipales arribaron al sitio para someter y poner bajo arresto al enfurecido marido, que fue llevado a los separos policiales donde quedó detenido por los delitos que le resulten.
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