martes, 8 de septiembre de 2015

LA EXPLICABLE RUINA DE EMPALME


En Empalme empieza a desgranarse la mazorca y el futuro gobierno de Carlos Enrique Gómez Cota, está tomando su perfil.

Que la CTM de Javier Villarreal Gámez, será el gran poder en ese municipio nadie duda ya.

De confirmarse los nombramientos de Manuel Orduño como tesorero y José Luis Dumas en la Contraloría, como los brazos financiero y de detección de infractores, este último perredista de hueso colorado de la cuadra del ex alcalde Juan Manuel Sauceda, compañero de la masonería del Kiriki, el cuadro va tomando forma.

La llegada de Dumars a dicho cargo son malas señales para el gobierno saliente de Héctor Laguna, quien lo despidió del puesto. La persecución o al menos dolores de cabeza para el galeno están casi garantizados.

TIPOS DE CUIDADO

Que suene el actual tesorero Mariano Michel para jefe de Personal en el próximo ayuntamiento envía señales de por dónde viene la cosa.

Como es sabido “El Pichel” es cocheado en su cargo por el contador Jesús García, “El Chuy Pesado”, quien le da línea.

El Chuy fue pillado durante el gobierno de César Lizárraga Hernández en Guaymas filtrando información (nóminas, estados financieros, etc.) a Gustavo Claussen cuando este fungía como presidente de la CANACO en Hermosillo. Desde entonces la relación entre ambos se quebró.

En movida parecida de sacar documentos de palacio fueron detectadas a altas horas de la noche Lupita Campos y la Tere Arreola.

La Campos fue “jubilada” y a la Tere, no se le corrió, pero se le arrinconó donde no hiciera daño, gracias a la intervención de su hermano el secretario Alonso Arriola.

Tanto el Pesado como Mariano, llegaron a la administración rielera con Victoria Villa y con la aprobación de edles como el regidor del PT Carlos Arbayo, el médico Edgar Vásquez Tello y el síndico Roberto Romero Guerrero, quien dice tiene asegurada chamba con Claudia Pavlovich, su ex compañera de escuela.

MANUAL PARA QUEBRAR A CUALQUIERA

En los tres meses que duró ausente Laguna de la presidencia, hicieron y deshicieron, dejando al municipio mega endeudado.

Un crédito aprobado con una empresa financiera (Fintegra) se contrató con 7% de interés cuando debía ser de 2%.

Ahí se fueron riquis los involucrados. Una empresa de Jesús García vendió en un dineral (respecto a su valor de mercado) un programa de contabilidad gubernamental y ya se pagaron un millón ochocientos mil pesos.

También los angelitos solicitaron un adelanto de participaciones.

En la asignación de obra pública con recursos federales salieron beneficiados Jesús “Negro” Saldaña y “El Beto” Vázquez, ambos señalados de meterle dinero a las campañas de Lorenzo de Cima (cuya gente cercana se comprometió a impedir el regreso de Laguna a la alcaldía) y José Luis Marcos León Perea.

De ello sabe mucho el director de Obras Públicas Cipriano Antelo, quien trabajó en la administración de Antonio Astiazarán. Y eso es de lo que se sabe. La ruina de la comuna rielera es bastante explicable.

De la quema no se salva ni el actual Contralor Darío Alcántar, a quien ubican como parte de ese grupo faccioso, que saboteó a los candidatos del PAN en la pasada elección.

El complot para doblar a Laguna es evidente y de paso llenarse las bolsas. Y es que de ver dan ganas.

Siempre sostuvieron que Laguna y compañía cometieron una y mil traperías, dicen tener las pruebas, pos el otro bando ya prepara también las suyas y a ver de que cuero salen más ratas.

Hoy se pelearon las comadres otra vez, se rebelaron los "rebeldes" y decidieron no asistir a sesión de cabildo donde el presidente municipal, pediría a regidores utilizar el dinero de Fintegra, unos 13 millones, para pagar nómina, finiquitos y deudas de proveedores.

El síndico Roberto Romero aseguró que no avalarían ninguna ilegalidad ya que ese dinero está etiquetado para obra pública, pero de la otra parte señalan que al Síndico no le convenía aprobar el punto porque los constructores, en su momento, le dieron el respectivo moche por las obras.

De ese tamaño los cañonazos en Empalme.

UN RESULTADO ELECTORAL ESPERADO

Roberto “El Güero” Romero y sus achichincles jugaron las contras a Acción Nacional y pactaron con el PRI. Por eso se dice que al Güero todas las jugadas le han salido desde su retorno de Puerto Peñasco en 2009 para sumarse a la campaña de César Lizárraga, de quien fue secretario particular ya en la alcaldía.

Nombrado posteriormente al frente de la Dirección de Desarrollo Social, dejó el puesto en medio del escándalo de venta de cemento en donde aparecieron involucrados tanto Gregorio Cota Almódovar como la perredista Eva Languré.

Ahora, ese grupo que se vende como experto en finanzas municipales encabezado por Jesús García, se apresta a dar el salto cuántico e incrustarse en la venidera administración kirikiqueña.

Ya se verá…


(EL PORTAL DE LA NOTICIA/ COLUMNA “LA VIÑA DEL SEÑOR”/ 04 SEPTIEMBRE 2015, 15:46)

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