Monclova, Coah.- Tras ser ignorados por soldados asignados a la entrega las cartillas del servicio militar en la Presidencia Municipal, padres de familia y jóvenes que tenían dos días formados para concluir con el trámite entraron por la fuerza a las instalaciones para exigir el documento, al lugar arribaron elementos del URIM de la Policía Preventiva y rociaron gas lacrimógeno alegando que habían ocasionado destrozos.
Los hechos ocurrieron al filo de las 13:00 horas de ayer, cuando los
mensajeros del 105 Batallón de Infantería que entregarían las cartillas
militares dejaron formados sin atender a cientos de jóvenes que
esperaban en el exterior desde las 04:00 horas de la madrugada,
indicándoles que su horario de trabajo marcaba hasta la una de la tarde y
ya habían concluido con sus labores.
La prepotencia de los militares ocasionó que varios padres de familia que acompañaban en la fila a sus hijos, comenzaran a reclamar su inconformidad entrando por la fuerza al edificio de la Presidencia sin importarles la presencia de los oficiales de Seguridad Pública que cuidaban las puertas del recinto.
El descontrol entre los jóvenes que apoyaron a los padres de familia, originó que elementos de la Unidad de Respuesta Inmediata de la Policía Municipal se trasladara al lugar, donde con gas pimienta rociaron a varios de los inconformes para que éstos salieran por su propia cuenta de las instalaciones.
El coronel Victorino Reséndiz, director de Seguridad Pública, dialogó con los padres de familia que denunciaron la prepotencia de los militares.
“Lo que acaban de hacer es una grosería, una falta de respeto para la ciudadanía, le pido de favor que me mande a los muchachos para que terminen”, le pidió el Coronel a cargo de la Policía Municipal al encargado del 105 Batallón Militar por medio de una llamada telefónica.
Minutos después, un militar fue enviado dialogar con los jóvenes y padres de familia, comentando que sus compañeros tenían la orden de no retirarse hasta que atendieran a la última persona y los organizaron para volverlos a formar y entregarles su cartilla.
La prepotencia de los militares ocasionó que varios padres de familia que acompañaban en la fila a sus hijos, comenzaran a reclamar su inconformidad entrando por la fuerza al edificio de la Presidencia sin importarles la presencia de los oficiales de Seguridad Pública que cuidaban las puertas del recinto.
El descontrol entre los jóvenes que apoyaron a los padres de familia, originó que elementos de la Unidad de Respuesta Inmediata de la Policía Municipal se trasladara al lugar, donde con gas pimienta rociaron a varios de los inconformes para que éstos salieran por su propia cuenta de las instalaciones.
El coronel Victorino Reséndiz, director de Seguridad Pública, dialogó con los padres de familia que denunciaron la prepotencia de los militares.
“Lo que acaban de hacer es una grosería, una falta de respeto para la ciudadanía, le pido de favor que me mande a los muchachos para que terminen”, le pidió el Coronel a cargo de la Policía Municipal al encargado del 105 Batallón Militar por medio de una llamada telefónica.
Minutos después, un militar fue enviado dialogar con los jóvenes y padres de familia, comentando que sus compañeros tenían la orden de no retirarse hasta que atendieran a la última persona y los organizaron para volverlos a formar y entregarles su cartilla.
(ZOCALO / Edgar Pérez /16/12/2013 - 04:05 AM)
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