El hallazgo sucedió alrededor de las 11:30 horas, cuando la señora Consuelo acudió al predio denominado el Guayabal, en el municipio de Tepic, para llevar flores al lugar donde días atrás habían sido encontrado algunos restos de su hijo José Emilio Alonso Isiordia.

La señora, de 50 años, se puso a excavar en otras partes del predio en busca de las partes faltantes del cuerpo de su hijo, y cuando realizaba las excavaciones correspondientes, se topó con otras osamentas.

Dio aviso de inmediato a personal de Servicios Periciales de la Procuraduría de Justicia y los peritos reportaron que a 12 metros de distancia de donde estaba la cruz del Alonso Isiordia se halló un cráneo humano semienterrado y, a cinco metros, un cadáver que vestía pantalón azul de mezclilla, una playera naranja, unos tenis marca Vans y unas trusas con la leyenda “NAN”.

El médico legista determinó a simple vista que se trataba de dos personas distintas, por lo que los restos humanos fueron trasladados al Servicio Médico Forense.

Fuente: El Diario