martes, 3 de abril de 2012

ENTRE CATEOS Y FLAGRANCIAS



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La vox pópuli dice que se les detuvo en cateos; la policía dice que en plena acción



Luis Fernando Nájera
La Policía Municipal asestó la captura más importante de narcomenudistas al servicio de Los Mazatlecos y decomisó también una cantidad importante de dosis callejeras de drogas, sin embargo, lo que parecía un éxito está por irse al caño luego de abiertas incongruencias entre la verdad histórica y la legal, entre lo ocurrido y lo redactado en los partes informativos.


El expediente del que ahora hay dos versiones sería consignado en esta ciudad, iniciándose con el auto de formal prisión de los inculpados y siguiendo con el desahogo de pruebas, que es en donde se encontrarían los problemas, pues no ha sido atraído por la Subprocuraduría de Investigación Especializada contra la Delincuencia Organizada (SIEDO), informó una fuente cercana a la dependencia.

La fuente afirmó que los últimos casos iniciados por reportes de la Policía han fracasado porque la versión oficial es insostenible en tribunales, ya sea porque el que rubrica el reporte no es la misma persona que consumó la aprehensión, o porque fueron alterados los hechos, tanto en tiempo como en lugar y el desarrollo mismo. Por ello los jueces han reclasificado los delitos, beneficiando siempre al aprehensor, tal y como dicta la máxima judicial que ante la sospecha o error, mejor abstenerse de condenar.

El caso que ahora toma relevancia ocurrió apenas el viernes 23 de marzo entre las 18:00 y las 21:35 horas en Los Mochis. Luego de las primeras diligencias la Procuraduría General de la República determinó arraigar en México a la célula de Los Mazatlecos, en tanto reúne mayores indicios sobre la responsabilidad de estos en el narcomenudeo o en delincuencia organizada.

Para la comunidad y reporteros que fueron amenazados por jenízaros encapuchados obligándolos a abortar la misión informativa que realizaban ante el riesgo de ser atacados a balazos por gendarmes que no querían testigos en los allanamientos, las aprehensiones que la Policía presumen se realizaron a las 18:00 horas en al menos cuatro casas habilitadas como centros de distribución de drogas y ubicadas en Mariano Abasolo y Aquiles Serdán, Benjamín Jhonston entre Río Fuerte y Río San Lorenzo, en La Cuchilla, El Parque y Las Delicias, pero para la Policía las mismas capturas fueron a las 21:30 horas en Aquiles Serdán y Abasolo. Entre una y otra versión hay cuatro horas de diferencia y cinco lugares distintos.

El asunto se refiere a la captura del supuesto cabecilla, Jesús Andrés Pineda Samaniego, conocido como el Gordo Cochambres, de 21 años de edad, con domicilio por la calle Zacarías Ochoa número 2623, fraccionamiento Valle Cañaveral, y quien resulta ser primo de Miguel Ángel o Jesús Miguel Pacheco Samaniego, alias el Pecas, el Manchas y/o el Júnior, lugarteniente de Los Mazatlecos, tras la captura de Geovany Lizárraga Ontiveros; Luis Alfonso Castro Paredes, el Güero, de 18 años de edad, con domicilio por la calle Alfonso G. Calderón y Rosendo G. Castro, en el ejido Mochis; Fernando Guerrero Guzmán, el Nino, de 35 años de edad, con domicilio por la calle Baja California Norte número 55, en el fraccionamiento Sabino, y de Carlos Gámez Perea, de 21 años de edad, con domicilio por la calle Bienestar número 450, y supuesto sobrino de un magistrado sinaloense.

En el caso también perdieron la libertad Eduardo Rivera Almodóvar, el Gualo, con domicilio en la calle Hermenegildo Galeana número 1151, en el fraccionamiento Santa Teresa; Jorge Leonardo León Contreras, el Nene, de 37 años de edad, con domicilio por la calle Guillermo Prieto número 1655, en la Insurgentes; Manuel Eduardo García Gámez, el Lalo, de 25 años, con domicilio por la calle Fortunato Vega número 3639 en el fraccionamiento Nuevo Horizonte; Iris Griselda Fierro Armenta, de 41 años, con casa en calle Artículo 123, fraccionamiento Las Huertas y Aglaem Yumislibia Valenzuela Morales, de 21 años, con domicilio en calle José Luis López Ramos número 1053 de la colonia Siglo XXI.

A todos les decomisaron más de un kilo de cocaína en mil 450 dosis y más de ocho kilos de mariguana. Los detenidos viajaban en dos autos y según el reporte policial uno era un taxi y el otro un compacto.

El alcalde Zenén Aarón Xóchihua Enciso reconoció por su parte que los cateos perpetrados por la Policía fueron aceptados por la comunidad. “Ahora se ve la operación de la Policía.

“Nosotros no cateamos nada”
El jefe de Policía en Los Mochis, Jesús Carrasco Ruiz, entrevistado circunstancialmente en la calle, porque se ha encerrado en sus oficinas sin recibir a reporteros, afirmó que ninguno de sus elementos había cateado una sola residencia en donde se aprehendieran a distribuidores de droga, y que la captura de Los Mazatlecos la conocía por informes internos, aunque no exactos, porque no revisó el reporte.

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