FEMENICIDIOS EN MAZATLAN

Deja grupo Zetas-Beltranes narcomensaje a jefes policiacos estatales

Cayetano Osuna

Dos feminicidios y dos fosas clandestinas conteniendo restos de tres personas, fueron los hechos tétricos que marcaron la zona sur la semana pasada, sin contar el narcomensaje encontrado en el cuerpo de la finada Elizabeth Castillejo López de 23 años de edad, descubierto la madrugada del jueves 19 de octubre entre las calles Pescadores de Mazatlán y Crestón de Mazatlán, en el fraccionamiento Hogar del Pescador, ubicado en la zona norte de Mazatlán.

El crimen de Castillejo López, se sumaba al de Karen Hazzel Tiznado Dueñas de 22 años, quien fue encontrada aproximadamente como a las 9:30 horas del martes 18 de octubre, asesinada con un arma blanca en su departamento ubicado en avenida Internacional de la colonia Benito Juárez.

 Mientras, hasta la semana pasada, los móviles reales del homicidio de Tiznado Dueñas eran un enigma, el estigma de una cartulina blanca conteniendo un narcomensaje, que fue hallado a un costado del cadáver de Castillejo López, también era una advertencia para jefes policiacos del estado de Sinaloa.

 De acuerdo con la información oficial, Elizabeth Castillejo fue hallada degollada cerca de las 00:25 horas del jueves 19 de octubre, vestida con pantalón de mezclilla azul, blusa negra, cinturón negro y calcetas blancas sin zapatos.

Fosas clandestinas

Así como aquel martes 3 de agosto de 2010, cuando se descubrieron dos narcofosas con restos de tres personas en el rancho La Uva del poblado de Miravalles, ubicado a 8 kilómetros al noroeste del puerto de Mazatlán, las dos fosas clandestinas encontradas en las cercanías de la sindicatura de Villa Unión reavivaron las esperanzas de las familias que tienen a sus seres queridos desaparecidos, los buscan entre los restos descubiertos, para darles cristiana sepultura.

 “Son los cadáveres de los ocho plebes que ‘levantaron’ entre los meses de abril y mayo en la colonia Flores Magón”, se dijo aquel tétrico 3 de agosto con las narcofosas de Miravalles, pero después de la famosa prueba del ADN que les aplicó personal del Servicio Médico Forense, resultó que ninguno coincidió con las características de los secuestrados.

Incluso, Emilia Raygoza, esposa de Gerardo Pantoja Alcalá, “levantado” el 1 de mayo de 2010, junto con el agricultor Ramón Cedano Mitre (después encontrado asesinado cerca de La Campana, Escuinapa, Sinaloa), suegro del actor Sergio Goyri, en la plazuela de Tecuala, Nayarit, vino a Mazatlán a ver si entre los restos encontrados en Miravalles coincidían con las características de su esposo, cosa que no ocurrió y tiene un año con cinco meses desaparecido.

“¿De cuántos meses son los cuerpos encontrados en las dos fosas?”, preguntó Victoria Aguilar, madre de Héctor Manuel Jaramillo Aguilar, el Poni o el Serie, boxeador “levantado” por un grupo delictivo el 25 de abril de 2011 en la esquina de las calles Cosmos y Asteroide del fraccionamiento Rinconadas del Valle.

 “Pónganse en mi lugar, regrésenmelo vivo o muerto, como sea, pero necesito saber de él”, suplicaba a los plagiarios de su hijo mediante volantes que distribuyó por las calles del puerto días antes del festejo del Día de las Madres.

 Las dos fosas clandestinas fueron encontradas en las cercanías de la sindicatura de Villa Unión, donde hallaron restos de tres personas, además de tres vehículos desmantelados, un vehículo Sentra gris, modelo 2008, placas VMC 4405 de Sinaloa; una camioneta marca Dodge tipo Dakota tinta, modelo 2011, placas UA70318 de Sinaloa y cascarón de una camioneta Jeep gris 4x4, dos de estos vehículos con reporte de robo.

Allá por el mes de abril de 2011, mes en que supuestamente desapareció el juez Daniel Armenta Rentería, mientras aparentemente se transportaba en su vehículo hacia El Fuerte, Sinaloa, versiones extraoficiales afirmaban que durante su recorrido se habría detenido en Villa Unión a finiquitar un asunto personal.

Durante abril y mayo, los “levantones” en Villa Unión estaban a la orden del día y en los círculos policiacos se rumoraba tanto que un grupo delictivo estaba “limpiando” la plaza de presuntos robacarros y extorsionadores, como que los “secuestros” reflejaban la guerra entre los grupos criminales.

 “En gran medida lo que está pasando en Villa Unión es una ‘limpia’ en contra de los que se dedicaban a extorsionar a personas y robar vehículos por su cuenta, sin pedirle permiso al mandamás”, dijo entonces un jefe policiaco.

Con esos antecedentes, el jueves 19 de octubre fueron encontradas las dos fosas clandestinas en un camino vecinal de Villa Unión, donde extraoficialmente uno de los cuerpos fue identificado como Juan Pablo Osuna Osuna de 39 años, quedando por determinar la identidad de los restos de dos personas más.