Foto:
Jorge Dueñes
Siendo
secretario de energía, el hoy candidato a la presidencia de la República por el
PRI José Antonio Meade Kuribreña aprobó la continuidad del proyecto Etileno
XXI, puesto en marcha a partir de un contrato que la paraestatal firmó con el
consorcio Braskem-Idesa en 2010 y consistente en el servicio de suministro de
etano por 20 años y la construcción de una planta de carácter privado destinada
a la producción de poliestireno.
En
marco del contrato celebrado, Braskem-Idesa solicitó a Pemex aumentar las tarifas
de importación de polietileno toda vez que se consideró como “fundamental para
la economía de las instalaciones”.
De
acuerdo con información difundida con el movimiento de transparencia Poder, con
base en datos de Méxicoleaks, en 2011, a poco menos de cuatro meses de haber
asumido la titularidad de la SE, Meade Kuribreña encabezó una reunión del
consejo de Administración de Petróleos Mexicanos, en la que se sometió a
revisión el contrato.
Supuestamente
tres consejeros le manifestaron al secretario de Estado tener dudas sobre el
documento en términos y los resultados que se obtendrían de continuarse con el
proyecto Etileno XXI, sin embargo Meade Kuribreña desatendió esas
observaciones.
Una
de las políticas establecidas para el desarrollo del proyecto fue que Pemex no
invirtiera en ampliar sus plantas para producir polietileno, a fin de darle
prioridad a la producción en la planta de carácter privado contemplada en el
contrato, de acuerdo con información citada de la Auditoría Superior de la
Federación.
Finalmente
tras 10 meses de operación, Pemex sufrió pérdidas por mil 900 millones de
Pesos. Según trascendió los funcionarios encabezados por Meade que estuvieron
de acuerdo con la operatividad del proyecto, arguye ron que la firma del
contrato se dio bajo los términos de la ley.
(SEMANARIO ZETA/ DESTACADOS/ EDUARDO
ANDRADE URIBE/ LUNES, 4 JUNIO, 2018 05:30 AM)
No hay comentarios:
Publicar un comentario