Chihuahua— Mirna
Ayuzo y Francisco Tena son una pareja que se dedica a retirar los chicles
pegados en el piso de la calle Libertad con una novedosa herramienta que ellos
mismos crearon: un zapato que tiene en la punta una especie de navaja o
“laina”, que levanta la goma de mascar que luego limpian con escoba o
aspiradora.
Cada uno avanza unos
dos metros cuadrados por hora, recibiendo un pago de mil pesos a la semana. Se
calcula que sólo en “La Líber”, lugar representativo del Centro Histórico de
Chihuahua, hay alrededor de un millón de chicles pegados.
(EL DIARIO DE CHIHUAHUA | 2013-05-12 | 23:10)
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