EJIDATARIOS. En busca de agua, con la
nueva alcaldesa.
Atrapados en los intereses de
pudientes agricultores y de sus asociaciones que controlan el “Corazón Agrícola
de México”, al menos 500 familias de la zona de Tres Garantías tienen años
mendigando el cumplimiento del decreto nacional que les asigna agua para regar
sus predios, desacato que los obliga a una miseria ficticia.
Pese a ser rebotados de
cuanta gestión inician, ellos no se vencen y prolongan su lucha.
El cambio de gobierno local
anidó esperanzas de lograr su anhelo: regar 5 mil 500 hectáreas con agua rodada, de gravedad, y no de bombeo
y rebombeo, y van sobre camino andado.
Se trata de 500 familias de
los ejidos Producto de la Revolución, Joaquín Amaro, ampliación Las Vacas,
Francisco I. Madero, José María Morelos y Pavón y Agua de las Arenas, enclavados
en la zona de Tres Garantías, en la confluencia de los municipios Ahome, El
Fuerte, Guasave y Sinaloa.
Estos han encabezado marchas
sobre la carretera Internacional, plantones en la sede del distrito de Riego
075, bloqueos en la sede estatal de Conagua, pero en ningún caso han logrado
ablandar las decisiones férreas del Organismo de Cuenca Pacífico Norte que
regula la extracción de agua para uso agrícola del río Fuerte.
Su lucha no ha sido sólo
institucional, sino también de sobrevivencia, pues en años recientes, los
miembros de la Unidad de Riego fueron atacados, algunos en su propia casa.
El ataque es para disuadirlos
de continuar en su puja por agua.
Pero con todo y los saldos de
sangre, el grupo no se resquebraja. Al contrario, ha madurado y se ha unido
más.
De las denuncias de hechos
que han presentado, ninguna ha prosperado para llegar ante un juez penal.
No obstante, la búsqueda de
agua no cesa.
Ahora, buscaron a la
alcaldesa Nubia Ramos Carbajal. Ella, contrario a su par anterior, hizo el
compromiso de apoyar la gestión ante la Secretaría del Medio Ambiente y
Recursos Naturales (Semarnat) y la Comisión Nacional del Agua (Conagua) para
que las demandas ejidales sean resueltas.
No solo eso, también ofreció
llevar ante el Gobernador del estado, Quirino Ordaz Coppel la petición de los
productores temporaleros, así como pedirle al senador Aarón Irizar, presidente
de la Comisión de Asuntos Hidráulicos de la Cámara de Senadores, que los
acompañe ante las dependencias federales para que culmine con éxito esta
gestión que han realizado sin ninguna satisfacción, durante muchos años.
Ramos Carbajal dijo que es un
acto de justicia social porque está de por medio la sobrevivencia de 500
familias en estado de vulnerabilidad de estos ejidos, y agrego que ya tienen
convenios firmados con una empresa que sembrará esas tierras, una inversión de
150 millones de pesos y la infraestructura para hacer producir la tierra.
“No sabemos a ciencia cierta
qué tan profundo sean los intereses que hay, pero sí que vean que el interés
más importante debe ser el interés de la gente por salir adelante, si hay
familias que tienen un nivel de marginación muy alto, la irrigación es la llave
para abrir una posibilidad de que ustedes tengan una mejor calidad de vida”.
Rosa Carmina Bojórquez, con
sollozos, pidió a la alcaldesa que ayude a las 500 madres de familia que están
en pobreza extrema “y como mujer nos vamos a entender, usted nos va a
comprender a nosotras las madres de familia, por ‘onde’ no hemos pasado y
estamos pasando”.
Carlos Alberto Soler,
representante de la Unidad de Riego de los cinco ejidos del valle de Tres
Garantías, pidió a la Presidenta Municipal que los acompañe a mediados de este
mes a la Ciudad de México para que junto con ellos y con el apoyo del senador
Aarón Irizar y el Gobernador del Estado, agilicen este último trámite ante
Conagua y Semarnat, porque ya fue publicado en el Diario Oficial de la
Federación el expediente que les garantiza el agua a los 500 productores.
En tanto ellos claman la
ayuda oficial que les permita destrabar la cerrazón institucional de negarles
el derecho al agua de uso agrícola, la infraestructura de conducción enterrada
desde hace años sufre el deterioro
natural.
Los canales a medio construir
poco a poco se erosionan sin el uso adecuado.
Y es que en la zona, las
pocas siembras son de temporal. Estas producen de acuerdo con las
precipitaciones y no a través de sistemas de riego.
En la región de Tres
garantías, los decretos presidenciales de asignación de agua de uso agrícola
han sido, hasta ahora, letra muerta.
(RIODOCE/ Luis Fernando Nájera/ El
Fuerte en 9 enero, 2017)
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