Pobladores
de Tamazula gritan justicia frente a los marinos
Alrededor
de un centenar de pobladores del municipio de Tamazula, Durango, se reunió en
la plazuela para enviar un mensaje al presidente Enrique Peña Nieto y a la
Secretaría Armada de México: “tienes Marina o tienes gatilleros”, cuestionaron
los ciudadanos en una de las cartulinas, junto con otros mensajes que mujeres,
hombres y niños cargaron durante una marcha pacífica que realizaron hacia las
instalaciones provisionales que mantienen los elementos federales en esa
comunidad.
Los
pobladores exigieron que los marinos les entregaran las instalaciones donde
tienen su campamento, un parque público que se mantiene cerrado por la
presencia de las fuerzas armadas; pero la principal exigencia era la de
justicia por los hechos del pasado 14 de julio, cuando elementos de la
Secretaría de la Marina (Semar) dispararon desde un helicóptero contra un grupo
de jóvenes que estaban en tierra y regresaban del corte de caña.
Hace
dos meses, cuando ocurrieron los hechos, los habitantes de Tamazula denunciaron
ante los medios de comunicación, dependencias gubernamentales y de derechos
humanos, que tres helicópteros de la
Marina Armada de México arribaron a las comunidades de Topiba, Acachuen y Los
Medios, donde desde un helicóptero dispararon, ocasionando la muerte de dos
personas: José Ángel Ramírez y Jesús Omar Vidaña Fuentes; un menor herido José
Roberto; y cuatro más detenidos,
identificados como Emanuel, Juan Carlos, José Luis y Yasir, acusados de disparar
a los elementos. Sin embargo, a los días de su detención fueron liberados.
El
domingo 23 de agosto, entre los manifestantes de Tamazula estaba un jovencito
en silla de ruedas, vestido con pantalón negro tipo deportivo debajo de la
rodilla, una playera blanca con una inscripción que decía: “Exigimos respeto,
no más abusos de la marina”, huaraches y gorra; era José Roberto, quien recordó
que aquel día que le dispararon los marinos desde un helicóptero, pensó que se
iba a morir.
“Me
levanté porque me invitaron a cortar caña y le dije a mi mamá que si me dejaba
ir, dijo que sí pero que regresara antes de las 11 o 12. Yo me fui, de regreso, se me estaba haciendo
tarde, me vine yo solo en mi carro y miré los helicópteros, pero seguí. Cuando me empezaron a tirar me asusté; le di
al carro más y me siguieron hasta donde quedé”, narró el joven de apenas trece
años.
Aseguró
que no hizo nada para que le comenzaran a disparar; sin embargo recibió
impactos de bala en la pierna que es lo que lo mantiene aún en silla de ruedas;
en la mano izquierda, donde tuvieron que amputarle algunos de sus dedos; y en
el abdomen.
A
José Roberto se le veía nervioso y asustado. Acompañado de su mamá, se dirigió
junto con los demás manifestantes a las instalaciones del parque Ismael Hernández
Deras, donde tienen el campamento los elementos de marina.
Rebeca
empujaba la silla de ruedas de su hijo, José Roberto, y unos metros antes de
llegar a la puerta se detuvieron. Frente a su hijo, pero del otro lado de la
reja estaban al menos siete elementos, algunos con cámaras de video instaladas
en los cascos. Atrás de José estaba un centenar de manifestantes que gritaban
“¡Justicia!, ¡Justicia!”.
Mientras,
José Roberto trataba de controlar los nervios y le pedía a su madre que se
fueran de ahí, agachaba la mirada para no ver a ningún agente de la SEMAR.
En
ese momento, el profesor Eduardo Mejía Andrade, secretario del Ayuntamiento de
Tamazula, se puso al frente de los manifestantes y dio un discurso ante los
elementos de la marina que se mantenían inmóviles dentro del parque.
Durante
su mensaje recordó lo sucedido aquel 14 de junio. Dijo que “por esa razón el
día de hoy (23 de agosto) de manera respetuosa se pone de manifiesto el enojo
colectivo por alterar la paz social de los habitantes de esta zona del
municipio de Tamazula, Durango”.
Basta,
agregó, con “ver la cara de miedo y de pánico de las amas de casa, de los jefes
de familia, pero sobre todo de los niños y adolescentes que vivieron esa
barbarie, cuando escuchan el nombre de los marinos o el papaloteo de los
helicópteros. Esto ha creado una psicosis de miedo generalizada por no saber
cómo actuarán cada que vengan grupos de la Semar. La gente aun con esta marca
que llevará toda la vida quiere recuperar su tranquilidad y su espacio”.
Luego
del discurso del funcionario, otras personas tomaron la palabra, gritaron su
enojo, pero entre ellos mismos se calmaban: “no caigamos en provocaciones,
tranquilos, lo que les venimos a decir está escrito en las cartulinas”, estuvieron alrededor de 15 minutos en el
parque y se retiraron.
DETENCIONES ILEGALES DE CUATRO MENORES
En
la manifestación de Tamazula también estaban Emanuel, Juan Carlos, José Luis y
Yasir, los cuatro menores de edad que fueron detenidos por elementos de la
Armada de México, en el operativo de junio.
En
entrevista recordaron cómo fueron detenidos y trasladados a Culiacán. Dicen
sentir coraje con los marinos cada que los ven por lo que pasó aquel día, donde
dos de sus compañeros fallecieron.
Los
jóvenes contaron que iban a bordo de un automóvil rojo, regresaban de un
poblado cercano a Tamazula donde habían ido a cortar caña, cuando elementos de
la Marina, supuestamente sin ningún motivo, les dispararon.
A
los cuatro los detuvieron, inmediatamente les taparon los ojos con las camisas
que traían puestas y los acostaron en el suelo, “ahí nos tiraron en el barrial
que estaba caliente, nos tuvieron en el sol mucho rato, ya después si nos
pasaron al parecer donde había sombra porque ya no estaba la tierra tan
caliente”, cuenta José Luis.
Los
jóvenes coinciden en que al momento que fueron detenidos, los elementos de la
Marina les empezaron a decir que “andaban de sicarios”, y por eso los tenían
ahí: “nos dijeron que éramos sicarios, ni un arma traíamos, nomás los machetes
con los que cortamos la caña”, dice uno de ellos.
Recuerdan
cómo sonaban los teléfonos celulares de algunos de ellos, pero no los dejaron
responder, “nos quitaron los celulares y el poquito dinero que traíamos”.
Posteriormente
los cuatro jóvenes fueron trasladados a Culiacán, pasaron la noche arriba del
carro de la Marina, afuera de las instalaciones de la PGR, y fue hasta el día
15 de junio que fueron presentados por elementos de la SEMAR ante la Agencia
del Ministerio Publico Especializada en Justicia para Adolescentes.
“Ya
se estaba metiendo el sol cuando nos
llevaron a Culiacán, y ahí dormimos arriba de una tranvía, no sé qué será, lo
único que nos dieron de comida fue un pedacillo de hotdog para los cuatro”.
Dos
días posteriores a la detención de los jóvenes, la Secretaría de Marina emitió
el comunicado número 065/2015, donde detalla que el personal naval a bordo de
un helicóptero, fue agredido desde tierra por personas armadas que viajaban a
bordo de diversos vehículos por lo que repelieron la agresión, resultando de
ello dos personas muertas y cinco detenidos, entre ellos los cuatro menores,
además de armamento asegurado y equipo táctico”.
Cuando
pudieron ver a sus familiares, los menores señalaron haber sido maltratados por
los marinos, y obligados a sostener y accionar unas armas; que el armamento que
supuestamente les habían asegurado, fue “sembrado”, por los uniformados.
La
Procuraduría de Justicia del Estado de Sinaloa declaró su incompetencia en el
caso, por lo que fue turnado a la Fiscalía de Durango, y se procedido a que los
jóvenes fueran trasladados y puestos a disposición del Juez para Menores, en el
Centro Especializado de Readaptación y Tratamiento para Menores Infractores.
El
17 de junio se realizó la primera audiencia. Irma Luz Galindo Ochoa, magistrada
presidenta del Tribunal para Menores Infractores en Durango, informó que había
quedado en libertad uno de los cuatro menores por tener menos de 14 años y que
a esa edad no se podía estar internado, por lo que fue entregado a sus padres.
Al día siguiente los otros tres jóvenes también fueron puestos en libertad.
LA MISMA VERSIÓN
La
Secretaría de Marina Armada de México informó mediante un boletín, el resultado
de un operativo que durante seis días realizó en colaboración con la
Subprocuraduría Especializada en Investigación de Delincuencia Organizada
(SEIDO) de la Procuraduría General de la Republica, en la capital sinaloense.
Dentro
del operativo se realizaron algunos cateos en las colonias Colinas de San
Miguel y Lomas de Guadalupe, en esta última el viernes pasado, en donde resultó
una persona fallecida y tres heridos, de los cuales el informe de la marina
solamente reporta un muerto y un herido, a consecuencia de un supuesto ataque
previo por el automóvil donde viajaban ambos.
La
información proporcionada por la Marina varía de la información proporcionada
por familiares de las víctimas a este semanario, como se puede constatar en la
edición 656.
Familiares
señalaron que los marinos dispararon contra una camioneta Tahoe con cuatro
tripulantes, que venía a exceso de velocidad, mientras un automóvil Chevy
Monza, donde viajaban tres personas, estaba parado en el retén para su
revisión.
Nunca
señalaron que la camioneta Tahoe, donde viajaba Carlos Eduardo Gaytán Ramírez,
quien falleció, perpetrara un ataque en contra de los elementos de la Armada de
México.
En
el comunicado la Secretaria de Marina explica que:
“Personal
naval que proporcionaba seguridad, fue agredido por un vehículo color blanco,
que circulaba a alta velocidad e intentó embestir en dos ocasiones a los
elementos que brindaban seguridad. Es de destacar que las personas que
manejaban la unidad agresora hicieron caso omiso a los señalamientos
preventivos que les realizó el personal de la Armada de México.
“Ante
un peligro real e inminente, para proteger la vida propia y de terceros,
aplicando los procedimientos establecidos y en apego al Manual del Uso de la
Fuerza de Aplicación Común a las Tres Fuerzas Armadas, los elementos navales
lograron contener la amenaza.
“Una
vez detenido el vehículo, el personal de la Armada de México realizó una
inspección del mismo, observando una persona que perdió la vida, así como otro
ocupante que resultó lesionado, siendo atendido con primeros auxilios en el
área y posteriormente trasladado a la Cruz Roja Mexicana para su atención
médica”.
Ese
mismo día, el procurador Marco Antonio Higuera Gómez, señaló en rueda de prensa que el único vehículo asegurado por la PGJE
fue la Tahoe, y que no se encontró ningún arma de fuego. El Chevy fue utilizado
para llevar al lesionado al seguro social.
Las
personas que resultaron heridos y familiares desistieron de interponer una
denuncia ante la Comisión de Derechos Humanos, en contra de los elementos de la
armada.
SALDO A FAVOR: 33 VEHÍCULOS DECOMISADOS
Durante
los seis días de trabajo de la Marina en Culiacán, no hubo ninguna persona detenida;
en el comunicado, la SEMAR informa que en apoyo a la SEIDO, durante el
operativo del 20 al 26 de agosto se logró la localización y el aseguramiento de
armas y vehículos de lujo propiedad de integrantes de cárteles de la droga.
El
aseguramiento “de 33 unidades terrestres, dentro de los cuales destacan
vehículos y motocicletas de lujo; 13 armas de uso exclusivo de las fuerzas
armadas, 7 cortas y 6 largas”; fue resultado de tres domicilios cateados, todos
ubicados en la capital de sinaloense.
La
Secretaría de Marina destacó que “con
estas acciones la Armada de México y la SEIDO, reiteran a la población en
general, su inquebrantable voluntad y compromiso para disminuir la incidencia
delictiva con miras a incrementar los niveles de seguridad entre la ciudadanía,
siempre en un marco de respeto al Estado de Derecho y a los derechos humanos”.
EL CONTRAATAQUE
El
llamado al Presidente de la Republica en las pancartas expuestas en la
manifestación de Tamazula, Durango en
contra de la Marina Armada de México, no fueron las únicas durante la última semana
de agosto. En algunos municipios de Sinaloa aparecieron instaladas mantas con
un llamado a Enrique Peña Nieto para que cesen los supuestos abusos cometidos
por parte de la Armada en contra de los ciudadanos.
En
rueda de prensa, la Procuraduría General de Justicia del Estado de Sinaloa
informó que el jueves por la mañana personas no identificadas hasta el momento,
instalaron al menos 21 mantas en
diferentes puntos de los municipios de Culiacán, Mazatlán y Mocorito; en otros
municipios como Ahome se reportaron mantas, sin embargo la PGJE no lo confirmó.
“En
el puerto de Mazatlán fueron instaladas, las que logramos recabar fueron ocho
lonas plásticas en diferentes lugares con un mensaje relacionado con la
Secretaría de Marina, esto fue aproximadamente a las cinco de la mañana.
“Posteriormente
en Culiacán, en el área del avenida Álvaro obregón y algunos de los puentes de
esta ciudad, fueron instaladas no menos tres lonas plásticas; y en el municipio
de Mocorito fueron localizadas otras diez mantas”, fue el reporte que emitió
Martin Robles Armenta, Subprocurador de Justicia.
Derivado
de la instalación de estas lonas, firmadas de manera supuesta por “la sociedad
sinaloense”, fueron detenidos tres personas que viajaban en una camioneta
Cheyenne modelo 2014, con reporte de robo, propiedad de la empresa inmobiliaria
de Guasave, Grupo Comercial HPS S.A de CV.
Los
tres detenidos son personas jóvenes, pero no se precisó la edad; fueron
detenidos por “seguimiento a monitoreo de parte de C4, en una reacción
efectiva, donde participaron las bases operativas mixtas urbanas, donde
conjugan elementos de las diferentes corporaciones y elementos de la Secretaría
de la Defensa Nacional”, aseguró el subprocurador.
Robles
Armenta desistió de dar los nombres de los detenidos, y no supo precisar el
delito por el cual podían ser imputados. Aseguró que se estaban investigando, y
que el que fueran a bordo de un vehículo robado ya era un indicio.
—¿Dónde
fueron detenidas estas tres personas? —se le preguntó a Martín Robles.
—Podemos
compartir de manera preliminar, es que hubo la instalación de una lona plástica
por ahí cerca de catedral, por la avenida Álvaro Obregón (en Culiacán), se
logró identificar al vehículo y se alertó al BOMU. Es una camioneta Cheyenne
que tiene reporte de robo, y con eso más aun ¿no?
—Sobre
los detenidos ¿qué delitos se les tipificaría?
—Todo
va a formar parte de la investigación, por lo pronto el vehículo asegurado es
una camioneta Chevrolet Cheyenne 2014 propiedad de la empresa Modelo, que tiene
reporte de robo del día 17 de julio del 2015 en el municipio de Salvador
Alvarado y son tres personas las detenidas.
—¿Qué
cargo se les imputa?
—Por
el momento los podemos relacionar con el delito de robo de vehículo, pero
nosotros consideramos que estas personas están relacionadas con la instalación
de las mantas.
Hasta
el cierre de esta edición, los cuatro detenidos seguían en la misma situación.
La PGJE mencionó vía telefónica que continuaban detenidos y que estaban en
investigación.
Desde
hace meses, pobladores de la zona serrana de Badiraguato han denunciado
públicamente que personal de la Marina ha llegado y cateado sus casas sin
órdenes judiciales.
Los
primeros días de agosto, este semanario pudo constatar daños en algunas de las
casas de El Barrio de Guanajuato, Badiraguato. Los pobladores acusaron que eran
producto de los bajos vuelos de helicópteros en la zona.
(RIODOCE/
CRISTIAN DÍAZ/ 30 agosto, 2015)
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