Con
el escape del penal, el capo sinaloense delinea una alianza de cooperación
entre los grupos criminales del país con alcance hemisférico, advierte el
especialista internacional
CULIACÁN.-
La fuga de Joaquín Guzmán Loera persigue el objetivo de crear una red de redes
criminal de alcance hemisférico para generar mayores ganancias económicas a
través de la cooperación y evitar la confrontación, observó Edgardo Buscaglia.
Como
indicador de la nueva alianza que se teje, el presidente del Instituto de
Acción Ciudadana para la Justicia y la Democracia y especialista internacional
en el estudio del fenómeno de las empresas criminales, expuso la carta que a
inicios de marzo de este año se hizo pública y en la que el sinaloense y 140
reos más, entre ellos anteriores enemigos, denunciaron condiciones
"inhumanas" en el penal del Altiplano, ante la Comisión Nacional de
Derechos Humanos.
"La
fuga de este hombre obedece a esa estrategia. Está tratando de realizar una red
de redes que vaya mucho más allá de (Cártel de) Sinaloa", aseguró.
"Hoy
en día están pensando en formar coaliciones de redes criminales para que pasen
de la competencia violenta, el conflicto armado que les hace perder tanto
dinero a los grupos criminales, y que pasen de ahí a la cooperación".
Al
día de hoy se cumplieron ya 36 horas de que "El Chapo" Guzmán se fugó
por segunda vez de un penal de máxima seguridad; esta vez fue del Altiplano, en
el Estado de México. La primera ocasión fue en 2001, cuando escapó de Puente
Grande, en Jalisco.
De
acuerdo con Buscaglia, el Cártel de Sinaloa tiene presencia en 59 países, lo
que la convierte en la principal empresa criminal del Continente Americano y la
quinta del planeta, detrás de la Yakuza japonesa y las triadas chinas.
En
mayo de 2008, la organización criminal liderada por Guzmán Loera e Ismael
"El Mayo" Zambada, sufrió una escisión cuando los hermanos Beltrán
Leyva decidieron confrontarlos, en alianza con células regionales y otras, como
los Zetas, lo que llevó al País a una crisis de seguridad con fuerte impacto en
la sociedad civil y derechos humanos.
Fue
hasta el 22 de febrero de 2014 cuando la Marina logró detener al capo
originario de La Tuna, Badiraguato, en una torre de condominios ubicada por el
paseo costero de Mazatlán.
Estuvo
498 días preso en El Altiplano.
"Sinaloa
se está transformando en una delincuencia organizada de primer mundo, como la
yakuza japonesa, como la triada china, como los albaneses en Alemania, que
operan a través del silencio, a través de la Omertá en el sentido italiano, la
fidelidad al secreto, y menos a través de los conflictos bélicos que tú ves en
México con fosas comunes, granadazos, misiles; la delincuencia mexicana está
yendo hacia la cooperación entre ellos", describió.
Ante
este escenario de mayor alcance criminal, sin embargo, observó, hay Estado
mexicano que está muy débil.
"Porque
el hecho de que este hombre se haya fugado de la cárcel supuestamente de más
alta seguridad de México implica una vez más que el Estado mexicano adolece de
controles de inteligencia, judiciales, patrimoniales y de la corrupción
política", expuso.
"Lo
que hace que el Estado mexicano sea un 'bocado de Cardenal' para una
delincuencia organizada más consolidada que es lo que se le viene en
México".
(NOROESTE/
Francisco Cuamea/13-07-2015)
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