GUADALAJARA, Jal. (apro).-
Elementos de la Procuraduría General de la República (PGR), a través de
la Subprocuraduría Especializada en Investigación de Delincuencia
Organizada (Seido), localizaron siete cadáveres en las fosas
clandestinas descubiertas en La Barca, municipio ubicado en los límites
entre Jalisco y Michoacán.
Apenas en noviembre del año pasado en la misma zona, las autoridades
federales descubrieron un total de 67 personas asesinadas y enterradas
clandestinamente en ese lugar.
Del 9 de noviembre de 2013 a este miércoles 15, se han recuperado un
total de 74 cadáveres, entre ellos los de dos mujeres, según información
de las autoridades federales.
La búsqueda de cuerpos inició el jueves 9 de noviembre, después de la
desaparición de dos agentes ministeriales de la PGR el domingo 3 de ese
mismo mes, cuando se trasladaban a la base de operaciones localizada en
Briseñas, Michoacán.
Previo al inicio del rescate de cuerpos, las autoridades federales
arraigaron a 22 policías municipales del poblado michoacano de Vista
Hermosa. Algunos de ellos dieron pistas para el descubrimiento de las
decenas de personas sepultadas por una banda de delincuentes, de la que
hasta la fecha oficialmente se reserva su nombre.
La búsqueda de personas asesinadas y enterradas en La Barca reinició
desde la semana pasada, según trascendió. Sin embargo, fue hasta hoy
cuando se conoció de manera extraoficial la localización de nuevas
osamentas, en lo que se considera como hechos ocurridos al tenor de una
“guerra” entre los integrantes del Cártel de Jalisco Nueva Generación y
Los Caballeros Templarios, dos bandas del narco que disputan el control
de la zona.
/15 de enero de 2014)
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