RIO DE JANEIRO.— Hubo más
fotógrafos que manifestantes: Una convocatoria muy publicitada a
protestar para que las mujeres puedan caminar con los pechos al aire en
las playas de Río de Janeiro se frustró este sábado, pues sólo tres o
cuatro mujeres mostraron sus torsos desnudos.
Más de 100 reporteros gráficos acudieron a las arenas soleadas de
la Playa de Ipanema cuando la primera mujer se quitó la parte superior
del bikini a fin de desobedecer la ley brasileña.
"Los senos no son peligrosos", afirmó Olga Salon, natural de Río de 73 años, mientras se despojaba de su blusa negra. "Es falso puritanismo y refleja una cultura machista que tengamos una ley que prohíbe que una mujer pueda andar mostrando los pechos".
Internacionalmente, Brasil tiene reputación como una nación de libertad sexual, donde el nudismo no es solamente tolerado sino apoyado con entusiasmo durante los desfiles de Carnaval.
Los cientos de miles de extranjeros que llegarán a Brasil para la Copa Mundial de 2014 y los Juegos Olímpicos dos años después podrán ver los famosos bikinis de "hilo dental" que exponen los traseros sin dejar nada a la imaginación.
Sin embargo, bajo el código penal de Brasil, que data de 1940, las mujeres tienen prohibido ir topless: es un "acto obsceno" que se pena con tres meses de prisión o multas. Incluso los críticos de la ley admiten que son unas cuantas las procesadas.
Las mujeres que caminan topless en cualquiera de las playas de la ciudad casi con toda seguridad tienen una respuesta inmediata, tanto por los guardias municipales como por parte de la gente.
La protesta del sábado es el más reciente episodio en un debate sobre cuánta piel se puede mostrar en las playas de Rio. Los organizadores de la protesta dijeron a los medios que responden a un incidente de noviembre en el cual Cristina Flores fue reprimida por los guardias municipales después que se quitó la blusa durante una sesión de fotografía en la playa de Ipanema.
Flores cumplió, pero dijo que estaba sorprendida por la reacción violenta y la amenaza de prisión.
(EL MEXICANO/ Agencia AP/ sábado, 21 de diciembre de 2013 06:57 p. m.)
"Los senos no son peligrosos", afirmó Olga Salon, natural de Río de 73 años, mientras se despojaba de su blusa negra. "Es falso puritanismo y refleja una cultura machista que tengamos una ley que prohíbe que una mujer pueda andar mostrando los pechos".
Internacionalmente, Brasil tiene reputación como una nación de libertad sexual, donde el nudismo no es solamente tolerado sino apoyado con entusiasmo durante los desfiles de Carnaval.
Los cientos de miles de extranjeros que llegarán a Brasil para la Copa Mundial de 2014 y los Juegos Olímpicos dos años después podrán ver los famosos bikinis de "hilo dental" que exponen los traseros sin dejar nada a la imaginación.
Sin embargo, bajo el código penal de Brasil, que data de 1940, las mujeres tienen prohibido ir topless: es un "acto obsceno" que se pena con tres meses de prisión o multas. Incluso los críticos de la ley admiten que son unas cuantas las procesadas.
Las mujeres que caminan topless en cualquiera de las playas de la ciudad casi con toda seguridad tienen una respuesta inmediata, tanto por los guardias municipales como por parte de la gente.
La protesta del sábado es el más reciente episodio en un debate sobre cuánta piel se puede mostrar en las playas de Rio. Los organizadores de la protesta dijeron a los medios que responden a un incidente de noviembre en el cual Cristina Flores fue reprimida por los guardias municipales después que se quitó la blusa durante una sesión de fotografía en la playa de Ipanema.
Flores cumplió, pero dijo que estaba sorprendida por la reacción violenta y la amenaza de prisión.
(EL MEXICANO/ Agencia AP/ sábado, 21 de diciembre de 2013 06:57 p. m.)
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