Chihuahua, Chih.- A 40 años de cárcel fueron sentenciados
Concepción Torres Palomares y Tomas Pérez Calderón, pareja que fue
encontrada penalmente responsable del delito de homicidio agravado en
perjuicio de su propia hija, una bebé de 6 meses de nacida, que murió a
consecuencia de los golpes que ellos le provocaron.
El 10 de mayo del 2011 fue la fecha en que la niña de nombre Yareli Pérez Torres ingresó al Hospital Infantil a donde fue llevada para que fuera atendida de diferentes lesiones, falleciendo a 13 días de estar internada.
“A través de reportes médicos hospitalarios donde fue atendida, así como el resultado de la necropsia practicada por especialistas forenses de la Fiscalía General se pudo establecer que la niña presentaba edema cerebral con fractura de cráneo, lesión de fémur derecho, escoriaciones epidérmicas a la altura del cuello, rasguños y alopecia por arrancamiento, además de una lesión antigua en el decúbito izquierdo que nunca le fue atendida”, informó Carlos González Estrada, coordinador de voceros de la Fiscalía General.
Las investigaciones del Ministerio Público de la Unidad de Investigación de Delitos Contra la Vida de la Fiscalía Zona Centro obtuvieron estudios médicos que establecían que la niña padecía de maltrato infantil conocido como síndrome de Kempe, indagatorias que ubicaron a los padres de la menor como probables responsables de las lesiones que presentaba, por lo que al siguiente día de la muerte se ordenó la detención.
En sus declaraciones, los ahora sentenciados refirieron falsamente que los golpes que presentaba su hija se los había causado por una caída, no obstante durante la revisión médica encontraron lesiones antiguas en su cuerpo, así como alopecia, estableciendo que se debía a que le jalaban el cabello.
El 10 de mayo del 2011 fue la fecha en que la niña de nombre Yareli Pérez Torres ingresó al Hospital Infantil a donde fue llevada para que fuera atendida de diferentes lesiones, falleciendo a 13 días de estar internada.
“A través de reportes médicos hospitalarios donde fue atendida, así como el resultado de la necropsia practicada por especialistas forenses de la Fiscalía General se pudo establecer que la niña presentaba edema cerebral con fractura de cráneo, lesión de fémur derecho, escoriaciones epidérmicas a la altura del cuello, rasguños y alopecia por arrancamiento, además de una lesión antigua en el decúbito izquierdo que nunca le fue atendida”, informó Carlos González Estrada, coordinador de voceros de la Fiscalía General.
Las investigaciones del Ministerio Público de la Unidad de Investigación de Delitos Contra la Vida de la Fiscalía Zona Centro obtuvieron estudios médicos que establecían que la niña padecía de maltrato infantil conocido como síndrome de Kempe, indagatorias que ubicaron a los padres de la menor como probables responsables de las lesiones que presentaba, por lo que al siguiente día de la muerte se ordenó la detención.
En sus declaraciones, los ahora sentenciados refirieron falsamente que los golpes que presentaba su hija se los había causado por una caída, no obstante durante la revisión médica encontraron lesiones antiguas en su cuerpo, así como alopecia, estableciendo que se debía a que le jalaban el cabello.
(ZOCALO / Reforma / 13/10/2013 - 04:12 AM)
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