domingo, 1 de septiembre de 2013

MISA A VÍCTIMAS DE "EL POZOLERO" EN TIJUANA

Familiares llegaron con flores y veladoras
TIJUANA.- Familiares de unas 50 personas desaparecidas llegaron con flores y veladoras a la casa donde José Santiago Meza, “El Pozolero” se encargó de disol-ver unos 300 cadáveres con sosa cáustica, durante la época de la llamada “guerra” del narcotráfico. 
 En ese lugar, también conocido como “La Gallera”, se celebró una misa por el eterno descanso de los que ahí murieron y tal vez pudieran ser los restos de quienes ayer fueron recordados. 

En el mismo cuarto de ladrillo, donde se encontraron los tambos que estaban conectados a un ducto subterráneo que daba a una fosa donde terminaban los restos de las víctimas, ayer fueron colocadas mantas con fotografías y pañuelos con nombres de los desaparecidos. 

Estaban bordados de color verde, que significa esperanza, esperanza de un día conocer la identidad de los que murieron en manos de “El Cocinero del Teo”. 

Durante el evento, Fernando Ocegueda, presidente de la Asociación Unidos por los Desparecidos, lamentó la falta de profesionalismo en el trabajo de las autoridades estatales en las investigaciones de los casos de personas desaparecidas. 

Ya que al momento de interponer una denuncia de este tipo de casos, siempre dejan entrever matices de que las víctimas están vinculadas con los delincuentes, situación que es falsa en muchos de los casos, sostuvo. 

A la par cuestionó las cifras que muestran las autoridades en este tipo de delitos, ya que mencionó no son compatibles con los casos que registra la Asociación. 

De los 209 casos que tiene este grupo, Ocegueda indicó que solo se ha dado una respuesta a tres de ellos. 

“A Rommel Moreno, procurador de Justicia del Estado, no le interesa y nunca le interesó el tema de los desaparecidos (...) el nefasto paso del procurador y el gobernador José Guadalupe Osuna Millán, solo hemos visto nulos resultados en las investigaciones y solo los estigmatizan como delincuentes”, expresó. 

El activista sostuvo que el Procurador, pasó “sin pena ni gloria” los seis años de administración. 

“Lo hacen por ineptitud porque si quisieran atacar el problema de desapariciones, desde un inicio se hubiera creado un grupo especificó para solucionar esto”, declaró. 

"La Gallera", ubicada en la calle Cioac en el poblado Macovio Rojas, pasará a manos de la Asociación Unidos por los Desaparecidos, en donde se planea convertirlo en un memorial y la convocatoria de diseño será lanzada a nivel nacional para que participen arquitectos de toda la República Mexicana y sea el punto donde los familiares puedan encontrar un recinto de descanso ante la ausencia de los suyos. 

(EL MEXICANO / Yolanda CABALLERO /01 de Septiembre 2013)

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