Alberto Ponce de León/ El Diario de El Paso
El
Paso— El paseño Juan Antonio Morales, cuya fotografía fue presentada el
domingo por Julián Leyzaola Pérez, titular de la Secretaría de Seguridad Pública
Municipal (SSPM) juarense como la del líder del Nuevo Cártel de Juárez, e
involucrado en los asesinatos de ocho policías municipales este año, negó ante
este medio tener alguna relación con el crimen organizado.
“No comprendo
quién les dio mi fotografía. El de la foto soy yo, pero no mi nombre ni todo en
lo que se me implica”, dijo Morales ayer, entrevistado por El Diario de El Paso
en la Plaza San Jacinto (Plaza de los Lagartos). “No comprendo cómo llegó a
manos de ellos”, agregó.
Tras la entrevista, reporteros de El Diario de
Juárez buscaron hasta el cierre de edición al comandante Leyzaola Pérez pero
nunca respondió a sus llamadas, como tampoco el vocero de la SSPM, Adrián
Sánchez.
Manuel del Castillo, portavoz del Gobierno municipal juarense,
expuso anoche que por parte de la administración que representa no hay nada qué
decir, que incluso Leyzaola se hallaba fuera de la ciudad y probablemente
estuviera volando hacia esta frontera.
Juan Antonio Morales, nacido en
Ciudad Juárez hace 51 años y residente permanente de El Paso, dijo estar
sorprendido por ver en la portada de El Diario de ayer la fotografía de su
licencia vigente de Texas, tomada “hace unos ocho años”.
“A mí todos me
conocen por Juan; no soy “Johnny”, ni tampoco el ‘Tin Tan”, afirmó mientras a su
lado se hallaban su esposa, su hija y su nuera en la plaza pública, ubicada en
la zona Centro de El Paso.
El domingo, el jefe policiaco Leyzaola Pérez
presentó, junto con la foto de Morales, los resultados de una investigación
realizada “por la SSPM, la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena) y
autoridades estadounidenses”.
Leyzaola afirmó que como resultado de esta
indagación conjunta, el grupo involucrado en los asesinatos de ocho agentes
municipales este año, está liderado por “Johnny” Morales González, un viejo
integrante de la pandilla “Los Aztecas”, “quien estuvo preso en la ciudad de El
Paso por posesión de drogas y asociación delictuosa”.
El director de la
Policía juarense aseguró a algunos medios de comunicación que Morales es
responsable de varias ejecuciones, entre ellas las de algunos agentes
municipales, “y de organizar a varios grupos dedicados a la extorsión en la
ciudad”.
Asimismo, Morales –la persona en la fotografía– fue presentado
como líder del Nuevo Cártel de Juárez (NCJ), denominación que al parecer
adoptaron “Los Aztecas” luego de la detención de Antonio Acosta Hernández “El
Diego”.
Al respecto, Juan Antonio Morales reiteró su sorpresa y dijo que
“no puedo creerlo, que me involucren tras 20 años de trabajar antes de ser
deshabilitado (incapacitado)” por motivos de salud.
Narró haber sido
asalariado en una empresa de El Paso, antes de obtener una pensión por
enfermedad en septiembre de 2010, y ahora vivir de ese dinero y del producto de
la venta de artículos de segunda mano que realiza su esposa.
Leyzaola
dijo también el domingo que existen datos importantes que han cotejado con
autoridades norteamericanas sobre el presunto líder de la pandilla (Morales, el
“Tin Tan”), que lo ubican como una persona sumamente peligrosa.
Sin
embargo, Juan Antonio Morales aseguró que nunca ha sido encarcelado por tráfico
de drogas y nunca le llamaron “Tin Tan”.
Agregó que es padre de cuatro
hijos y tiene cinco nietos, por lo que su familia se encuentra muy preocupada
por lo que le pueda suceder luego de que las autoridades policiacas juarenses lo
implicaran con estos crímenes.
“Sí nos ha dañado bastante; sí nos
perjudica mucho el que se nos esté apuntando, mirando, acechando”, dijo. “Yo
nunca les he dado ese ejemplo. Ese tipo de caminos, menos”.
–¿Qué le
diría al jefe policiaco de Ciudad Juárez? –se le preguntó.
“Le diría que
haga bien su trabajo; que investiguen bien, porque es mucho el daño que le hacen
a una familia”, respondió Morales.
Tras enterarse de que la Policía de
Juárez lo involucra con el crimen organizado, la familia de Morales dijo haberse
contactado con la DEA en El Paso y con un abogado.
“Hablamos con un
agente de la DEA, de nombre Philip Donaldson y él nos dice que el récord de mi
esposo está limpio. Nunca ha estado detenido por delitos mayores ni aquí ni
allá”, dijo la esposa.
“La DEA nos ha dicho que les reportemos cualquier
movimiento extraño que veamos alrededor de la casa”, agregó.
Hasta
anoche, la familia no se había comunicado con el Consulado General de México en
El Paso.
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