ANTE LA OPINIÓN PÚBLICA SONORENSE:
ANTE EL NOBLE PUEBLO DE GUAYMAS:
ANTE LAS AUTORIDADES ESTATALES:
ANTE NUESTRA REPRESENTACIÓN EN LOS CONGRESOS GENERAL Y LOCAL:
ANTE LA HISTORIA QUE HABRÁ DE JUZGARNOS:
YO ACUSO: Al ingeniero César Adrián Lizárraga Hernández de haber traicionado vilmente la confianza, y el apoyo, que el noble pueblo guaymeño le brindó, en mala hora, con su voto, nombrándolo presidente municipal.
YO ACUSO: A César Lizárraga Hernández de haber convertido la trascendente tarea de administrar un municipio, en asunto de ladrones, anunciando previamente, sin pudor alguno, a gritos cantineros, sus planes de saquear piráticamente a la comunidad que lo vio nacer, lo cobijó y lo hizo hombre y profesionistas.
YO ACUSO: A César Lizárraga Hernández de haber hecho del ejercicio público simple negocio de familia, de socios, de amigos y compadres.
YO ACUSO: A César Lizárraga Hernández de mentir cínicamente a la comunidad que desgobierna, anunciando obras públicas nunca realizadas, pero sí cobradas, como los cientos de miles de metros de pavimentos y el fantasmal proyecto de iluminación pública de inversión multimillonaria.
YO ACUSO: A César Lizárraga Hernández, hijo desnaturalizado, de haber envilecido la dulce institución maternal, implicando a su señora madre en negocios turbios de terrenos obviamente malhabidos.
YO ACUSO: A César Lizárraga Hernández de arriesgar criminalmente la prestación de servicios públicos tan necesarios como recolección de basura y policía, escamoteando pagos y prestaciones.
YO ACUSO: A César Lizárraga Hernández de solapar en su administración a sujetos ladrones y avorazados, que entraron al servicio público en la impecunia y ahora son millonarios.
YO ACUSO: A César Lizárraga Hernández de desviar criminalmente recursos públicos millonarios, de una comunidad pobre y endeudada, hacia vistosas campañas publicitarias con el afán enfermizo de escalar nuevos escalones en su miserable carrera política.
YO ACUSO: A César Lizárraga Hernández de atentar gravemente contra el sector turístico regional, negándole recursos que por ley le corresponden, para promover la actividad.
YO ACUSO: A César Lizárraga Hernández de abandonar a su suerte al pueblo de Guaymas, en los gravísimos problemas de agua y drenaje, tolerando en la CEA a una pandilla de sujetos ineptos y corruptos.
YO ACUSO: A César Lizárraga Hernández de estar dilapidando el raquítico patrimonio municipal, vendiendo, supuestamente, hermosos y caros terrenos de playa a precios irrisorios, mediante operaciones oscuras y posiblemente delictivas.
YO ACUSO: A César Lizárraga Hernández de haber prostituido al cuerpo de regidores, con prestaciones extra-legales, con el insano objetivo de que le aprueben, en silencio, todas sus trapacerías.
YO ACUSO: A César Lizárraga Hernández de desatender el centro histórico del puerto, convertido hoy en un triste conjunto de calles ruinosas y sucias y de edificios a punto de derrumbe.
YO ACUSO: A César Lizárraga Hernández de arrojar el más negro desprestigio sobre el partido político que un día fue esperanza de redención para el pueblo porteño.
YO ACUSO: A César Lizárraga Hernández…
JUAN RAMÍREZ CISNEROS
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