Gran poder de liderazgo
mostró el pasado viernes el ex alcalde priista e integrante del Consejo de
Anciano de Sara Valle Dessens, Marco Antonio Llano Zaragoza, quien nuevamente
convocó a la alcaldesa electa a reunión con ex presidentes y las fuerzas vivas
del sector empresarial de Guaymas.
Sara Valle Dessens, no se
puede quejar, está arropada por un Consejo de Ancianos quienes la orientarán en
las decisiones que debe de tomar una vez que llegue al poder.
Ella misma les dio esa
categoría para justificar la aberración política de permitir que personajes
cuestionados y repudiamos por la sociedad, le digan por dónde ir ante la
incertidumbre y el temor mostrado por el reto que tiene encima.
Su comparación fue muy
desafortunada. Sus nuevos aliados nada tienen que ver con el sistema de
gobierno indígena.
En pueblos donde aún guardan
esta figura, el anciano “principal” o “caracterizado” es sumamente respetado
por la jerarquía social.
A diferencia de las
costumbres indígenas, a Sara Valle Dessens se le olvidó aplicar el requisito de
la selectividad y agarró de consejeros a sapos, culebras, liendres y canarios.
En los pueblos indígenas un
Consejo de Ancianos por principio de cuentas lo integran únicamente hombres
cuya trayectoria moral, construida desde edades tempranas, los haya convertido
en “un espejo para la comunidad”. ¿Acaso sus consejeros son eso, un espejo para
la comunidad?
El viernes se reunieron
nuevamente los consejeros de la alcaldesa para planear cómo sacar a Guaymas del
hoyo en el que lo metieron ellos mismo, es decir, quienes han gobernado de los
noventas a la fecha.
El mal rato lo pasaron cuando
los ex alcaldes César Lizárraga y Antonio Astiazarán se dieron hasta con la
cubeta.
Y mientras los consejeros
analizaban cómo resolver el problema de la basura, más de 10 impactos de bala
se escucharon cerca del lugar, habían atacado a la comandante Lilián Arce
García, a quien Valle Dessens llegó a contemplar como futura comisaria de Seguridad
Pública.
El liderazgo de Llano
Zaragoza tuvo como resultado que los empresarios y ex alcaldes ahí reunidos se
comprometieron con dompes y trascabos para limpiar la ciudad.
La pregunta es: ¿Tendremos
que esperar al 16 de septiembre o comienzan el lunes?
En la reunión dicen también
estuvieron presentes los directivos de PASA, a quienes por cierto, les urge
volver.
Otto Claussen, dicen, anduvo
por ahí. Por lo pronto, el ex alcalde priista que endeudó históricamente a
Guaymas y fue derrotado por el morenista Heriberto Aguilar en las pasadas
elecciones, tomó muy en serio el título de Consejero que le otorgó Sara Valle
Dessens y ya busca colocar a algunos amigos.
Van por la Tesorería y Obras
Públicas. Ahí es donde hay, pues.
Por ello ya sugieren a Sara
Valle a un Víctor Marín Martínez, hombre cuyo desequilibrio emocional y
servilismo representa una amenaza para Guaymas, pero además tiene antecedentes
de violencia intrafamiliar.
Eso son perfiles del gobierno
encabezado con por una mujer, supuestamente progresista y con clara visión
feminista.
Dos semanas faltan para que
asuma el poder y nombres van a y viene, pero nada confirmado. Sin embargo, por
no seria nada extraño que Sara Valle cediera a los Consejeros el nombramiento
de Tesorero para Carlos Dueñas, ex tesorero de César Lizárraga Hernández.
Su cuñado va porque va.
Cumplir con la Ley no ha sido una característica de la alcaldesa electa. Así
que Santiago Luna García será funcionario si la mayoría del cabildo lo aprueba.
Si es así, será el primer funcionario impugnado.
Luna García no puede ser
funcionario porque la Ley se lo prohíbe, su relación consanguínea con la
alcaldesa electa es de todos conocida.
Lo único cierto es que el 90
por ciento de los funcionarios serán hombres y mujeres que no saben, pero van a
aprender, así lo dijo la alcaldesa electa la semana pasada en entrevista
radiofónica.
Sara Valle tiene prisa en
entrar aun cuando la Ley diga otra cosa, ella pidió presidir el desfile del 16
de septiembre, pero ya como alcaldesa.
A las 7:00 horas del domingo
16 de septiembre rendirá protesta. Debe estar pensando que al que madruga Dios
lo ayuda.
Y aunque para su desgracia la
gobernadora Claudia PavlovichArellano no estará presente ese gran día,
seguramente estará arropada por el Consejo de Ancianos, quienes desde la
primera fila del Auditorio Cívico serán testigos de la asunción del nuevo
gobierno, de su gobierno.
Ellos van por sus proyectos
oligárquicos. Los recursos del Fondo Metropolitano, van por el control del
agua, la obra pública y otros más. Siempre ha sido así. ¿Por qué con Sara Valle
tendría que ser distinto?
Por lo pronto Morenistas de
grandes ligas ya tienen una radiografía exacta del gobierno que viene.
(EL PORTAL DE LA NOTICIA/ ÁGUEDA BAROJAS /03 SEPTIEMBRE 2018)
No hay comentarios:
Publicar un comentario