NDER:
Se recomienda leer los siguientes datos
antes de continuar
[Frente a la resistencia de las
entidades públicas y los muros legales, el navegante de los portales de acceso
a la información se parece a Moisés, el hombre bíblico que en cuarenta años de
búsqueda jamás pisó la tierra prometida. El marco jurídico de la Transparencia
nacional permite que la información sea negada con uno de estos argumentos: los
datos solicitados están bajo reserva, son inexistentes o confidenciales. Así,
la Administración de Enrique Peña Nieto mantiene más de 12 millones de
expedientes bajo llave. Se ha negado a mostrar el acta de nacimiento del
Presidente, el decreto que avala la pensión vitalicia a ex Presidentes y sus
viudas, los resultados de sus encuestas, los fundamentos para crear la
Gendarmería o los gastos de las fiestas dentro de Los Pinos. #DatosCerrados es
un ejercicio de la Unidad de Datos de SinEmbargo que identifica lo que el
Gobierno y otras instituciones no quieren revelar.]
#DatosCerrados | Petróleos
Mexicanos compró en 2014 un avión Cessna Citation Sovereign con el fin de
vigilar la red de ductos y evitar el robo de combustible. Pero el entonces
Director Emilio Lozoya Austin lo usó para ir y regresar de destinos de playa
como Cancún, Zihuatanejo y Huatulco.
En 21 ocasiones fue a Estados
Unidos a riberas más exclusivas: Westhampton y Esthampton en Nueva York, de
acuerdo con las bitácoras de vuelo entregadas por la Secretaría de la Defensa
Nacional a la Auditoría Superior de la Federación.
En febrero de 2016, el escándalo
de OHL lo alcanzó. Lozoya le presentó su renuncia al Presidente Enrique Peña
Nieto. ¿Y el avión? En “los activos fijos” de Pemex, evidenciados por la
Auditoría en enero de 2017, no está registrado. Aparece su millonaria compra;
pero el avión en físico, no.
Ciudad de México, 21 de agosto (SinEmbargo).– Para vigilar la red de ductos en el territorio nacional, Petróleos Mexicanos (Pemex) adquirió en 2014 una flotilla de aeronaves, en la cual estaba un avión Cessna Citation Sovereign 2009.
Un año después, en la
bitácora de esta aeronave, entregada por la Secretaría de la Defensa Nacional a
la Auditoría Superior de la Federación (ASF), fueron registrados algunos viajes
que en apariencia, no tuvieron como objetivo la vigilancia estratégica de las
instalaciones petroleras. Más bien, fueron traslados a la playa, realizados por
Emilio Lozoya Austin, en ese momento Director de la otrora paraestatal.
Emilio Lozoya Austin viajó en
el avión Cessna Citation 2009 a Cancún, Zihuatanejo, Acapulco y Huatulco, en
México. También fue a los exclusivos Westhampton y Esthampton en Nueva York. En
la misma aeronave viajó a Los Ángeles (California), Houston y San Antonio (Texas),
Westchester (Nueva York), así como algunos puntos en Maine y New Jersey en
Estados Unidos, consta en las bitácoras de vuelo, revisadas en la fiscalización
de la cuenta pública 2015 por la Auditoría Superior de la Federación (ASF).
Así llegó el Año Nuevo de
2015. En enero de 2016, el escándalo que se desprendió de la serie de audios
sobre el caudal de corrupción en la empresa Obrascón Huarte Lain (OHL),
publicada en YouTube, lo alcanzó. Lozoya Austin, quien fue integrante del
consejo de administración de esa empresa, se habría puesto de acuerdo para
celebrar un contrato con el presidente global de OHL, Juan Miguel del Villar,
cuando era funcionario público.
En febrero de 2016, el
Presidente Enrique Peña Nieto le recibió la renuncia. Se fue mientras la
producción petrolera iba en declive, los precios del crudo subían en el mundo,
el nivel de importación de gasolinas y la refinación alcanzaba mínimos históricos.
Había entrado a dirigir la petrolera nacional durante la histórica reforma
energética que abrió el sector al capital del mundo por primera vez en 75 años
y la dejaba sumida en crisis.
Hubo algo que dejó pendiente
el ex Director de Pemex: registrar el avión Cessna en los activos fijos de la
otrora paraestatal. En el análisis de la “Relación de Bienes Muebles que
Componen el Patrimonio Cuenta de la Hacienda Pública Federal 31 de diciembre de
2015”, la Auditoría Superior de la Federación observó que la aeronave no había
sido “capitalizada” al activo fijo conforme a la normativa. Además, faltó
incluir tres helicópteros Bell 407. En total, una cantidad por 94,690.3 miles
de pesos.
Ahora, ¿por qué volaba tanto
Emilio Lozoya Austin? ¿Quién lo acompañaba? La Administración de Pemex, bajo el
cargo del ex funcionario, dejó toda esta información bajo #DatosCerrados. El
Cessna Sovereign es un avión ejecutivo de ocho plazas; pero Pemex le informó a
la Auditoría que no apuntó en ningún registro los nombres de los otros viajeros
en los traslados que realizó Lozoya Austin.
Tampoco hizo ninguna nota del
motivo de los vuelos.
Del avión Cessna Sovereign,
la ASF indica en su reporte: “Todos los vuelos se solicitaron telefónicamente a
la Sedena por la Dirección General de Pemex. Al respecto, la Sedena elaboró
bitácoras en las que se indica el destino al que se trasladó al “DG” (Director
General) y pasajeros, sin especificar los nombres de sus acompañantes. Cabe
señalar que, en cuanto a la justificación de los destinos y nombres de los
pasajeros, la Sedena informó que esa es responsabilidad de Pemex; no obstante,
dicha Secretaría, por su experiencia en la operación de aeronaves, debió haber
dejado constancia del nombre y cargo de los servidores públicos que abordaron
el avión, independientemente de que Pemex lo indicara”.
Para evitar el robo
“hachicolero”, Pemex, bajo la Dirección de Emilio Lozoya Austin pidió recursos
para el proyecto de inversión “Fortalecimiento de las Capacidades Operativas de
Pemex por 1,114,272.8 miles de pesos. Además, el Consejo de Administración de
Petróleos Mexicanos aprobó la creación de la Subdirección de Salvaguardia
Estratégica (SSE), adscrita a la Dirección Corporativa de Administración y
Servicios, en cuyo cargo quedó el General Eduardo León Trauwitz.
Esta Subdirección era el área
responsable en Pemex de la administración y operación del avión. Pero emitió
una nota informativa con la que notificó que no genera información del motivo
de los vuelos ni nombre de los pasajeros. Al respecto la ASF asentó que esta
instancia no hizo los registros, “a pesar de ser quien salvaguarda y custodia
la seguridad de las operaciones de Pemex y sus funcionarios; administra los
recursos tecnológicos (avión) y coordina la transportación aérea de personal
conforme a lo establecido en el Estatuto Orgánico de Petróleos Mexicanos
modificado en septiembre de 2014 y el 28 de abril de 2015, ambos publicados en
el Diario Oficial de la Federación”.
LOS ALTOS VUELOS EN LA CDMX
Sus altos vuelos no sólo los
hizo a destinos de playa. En el helicóptero Eurocopter EC-145 201, también
adquirido a través del proyecto de inversión para vigilar las instalaciones,
Emilio Lozoya fue a la Torre GAN (donde se encuentra la sede de Altos Hornos de
México), Toluca, el periódico El Financiero, el Hospital Central Militar, el
Hospital Ángeles, el Parque Bicentenario, la Torre IUSA, Atizapán, Valle de
Bravo, Cuernavaca, el Hotel Hilton, el Hotel One y Teotihuacan, según la
bitácora que reproduce la ASF.
En el análisis de las
bitácoras de vuelo proporcionadas por la Sedena a la ASF, se determinó que el
helicóptero realizó 193 horas de vuelo (11,580 minutos) en 727 traslados en
2015, lo que equivale a dos traslados por día (727 traslados en 365 días) con una
duración promedio de 16 minutos cada uno.
Sus vuelos más frecuentes en
el helicóptero fueron a la Torre Arcos y la Torre GAN. 94 veces el ex
funcionario se trasladó a la Torre Arcos, ubicada en Paseo de los Tamarindos,
Colonia Bosques de las Lomas, Delegación Cuajimalpa, Ciudad de México. Y otras
54 fueron a la Torre GAN, en Campos Elíseos, colonia Polanco.
El helicóptero tiene siete
plazas. Pero tampoco quedó registro de los nombres de quienes pudieron
acompañar a Lozoya Austin. La Auditoría evidenció: “Todos los vuelos se
solicitaron telefónicamente a la Sedena por la Dirección General de Pemex. Al
respecto, la Sedena elaboró bitácoras en las que se indica el destino al que se
trasladó al “DG” (Director General) y pasajeros, sin especificar los nombres de
sus acompañantes. Cabe señalar que, en cuanto a la justificación de los
destinos y nombre de los pasajeros, la Sedena informó que esa es
responsabilidad de Pemex; no obstante, dicha Secretaría, por su experiencia en
la operación de aeronaves, debió haber dejado constancia del nombre y cargo de
los servidores públicos que abordaron el helicóptero, independientemente de que
Pemex lo indicara”.
Por sus viajes en el avión y
helicóptero de Pemex, Lozoya fue llamado a comparecer en la Cámara de
Diputados, pero renunció dos días antes. En su lugar se presentó quien lo
sustituyó José Antonio González Anaya. Ante los diputados, indicó que el
convenio para comprar la flotilla de aviones quedó bajo reserva y no brindó ni
un dato más.
Dejó OHL, se unió a EPN y brincó a
Pemex. Y allí, Lozoya fue clave en la red de negocios energéticos
(SIN EMBARGO/ LINALOE R. FLORES/ AGOSTO 21, 2017, 12:05 AM)
No hay comentarios:
Publicar un comentario