BAJAS EN EL CÁRTEL DE SINALOA

Redacción

El brazo armado del cártel de Sinaloa que resguardaba el acceso terrestre al Triángulo Dorado, zona de siembra de marihuana y amapola, vía La Mesa del Frijol, sufrió una baja importante, porque tres miembros del clan fueron ejecutados la víspera del fin de semana. Uno de los asesinados fue identificado como Mario Bejarano Sepúlveda, de 45 años, originario de San José de Gracia, Sinaloa, pero avecindado en La Mesa del Frijol, comunidad enclavada en la sierra entre los límites de Sinaloa y Chihuahua.  Este es uno de los dos hermanos que gobernaba la producción de enervantes y el acarreo de la producción de marihuana hacia Sonora, señalan informes de inteligencia consultados. Los otros dos fallecidos son los primos Narciso Sagaste Cabrera, de 38 años de edad y Cleotilde Sagaste Chávez, de 35 años, quienes eran parte del séquito de gatilleros a sueldo para el resguardo del perímetro de producción de drogas, además de evitar la entrada de enemigos del cártel, hacia el reducto de seguridad máxima. La zona precisa del enfrentamiento en donde murieron los tres sierreños no fue conocida por funcionarios estatal que llegaron hasta El Pichol y La Mesa del Frijol, para las diligencias de identificación de los cuerpos, porque amigos de los asesinados los “bajaron” de la sierra hasta zonas habitadas. La triple ejecución ocurrió la noche del 15 de febrero, en la zona serrana. Bejarano Sepúlveda fue dejado en El Pichol, Choix, y fueron agentes del Ministerio Público del Fuero Común de esa municipalidad quienes dieron fe del cadáver, el cual estaba prácticamente “cocido” a balazos. El rostro y cráneo le fue destrozado por los impactos de bala. En tanto que los primos Narciso y Cleotilde quedaron muertos en La Mesa del Frijol. Personal ministerial levantó las diligencias de identificación durante dos días. De la triple ejecución no hubo testigos, o bien estos se retiraron en cuanto dejaron los cuerpos en zona segura. De acuerdo con informes confidenciales, Mario Bejarano Sepúlveda era parte importante en la región del Triángulo Dorado (límites de Chihuahua, Sonora y Sinaloa) con el clan que integraban Jaime Lugo Bojórquez, a quien un comando mató en Agua Prieta, Sonora (28 de enero 2010); Reyes Castro Molina, el Rey, asesinado en el rancho El Cuadrilátero, Ciudad Obregón, Sonora (24 de septiembre del 2010); y con Joaquín Beltrán Rubio el Chapo o el Ganzo y su hijo Joaquín Beltrán Medina, emboscados y muertos en Cajeme, Sonora (21 de octubre 2010). Además de operar en la sierra, también mantenían el control de Los Mochis para el cártel de Sinaloa hasta que el cártel de los hermanos Beltrán Leyva los expulsó y cazó. Los nombres de ellos y de otros más fueron plasmados en narcomantas en los que los miembros de La Mochomera, como se autodenominó el brazo armado que tomó Los Mochis bajo su control, los acusaban de la muerte del reportero radiofónico, José Luis Romero (31 diciembre 2009), lo que finalmente resultó falso, según las nuevas investigaciones enderezadas por la Procuraduría General de la República, y en la que ya hay datos sobre los autores materiales e intelectuales de ese crimen. Los nombres de transportistas locales y yernos de este también comenzaron a aparecer en los señalamientos entre un cártel y otro. Incluso, una lista con los apodos de otros que serían ejecutados comenzaron a dejarse en cadáveres descuartizados, principalmente en la zona de La Vainilla, La Higuerita, Agua Caliente, Agua Caliente de Cebada, Agua Caliente de Cota, y en otras comunidades más pequeñas. Resultado de esta guerra fue la quema de casas completas y de unidades. A consecuencia de ello, los poblados serranos comenzaron a ser evacuados por los moradores, ya que estaban quedando en medio del fuego cruzado de los grupos delictivos que se enfrentaban y los cuales, años antes, eran parte de un solo clan. Hasta ahora y como resultado de la ejecución masiva de gentes identificadas con el cártel de Sinaloa, las autoridades del fuero común han guardado hermetismo. Un cómodo silencio es la respuesta a cualquier pregunta. Bitácora de guerra 28 de enero de 2010: Jaime Lugo Bojórquez, a quien un comando mató en Agua Prieta. 24 de septiembre de 2010: Reyes Castro Molina, el Rey. 21 de octubre de 2010: Joaquín Beltrán Rubio el Chapo o el Ganzo y su hijo Joaquín Beltrán Medina. 15 de febrero de 2011: Mario Bejarano Sepúlveda, Narciso Sagaste Cabrera y Cleotilde Sagaste Chávez.