Las
empresas mineras de Estados Unidos y Canadá son las que, principalmente,
explotan los 874 proyectos extractivos que están en proceso en el país a cargo
de compañías con capital extranjero
Actualmente
los gobiernos de Canadá y México se mantienen en tensión al abogar, el primero,
la devolución de más de 360 millones de dólares que empresas de ese país
merecen de parte de la SHCP
La
producción minera en México está en manos de compañías extranjeras, ni siquiera
en las de empresas mexicanas que tienen una participación muy baja en las
concesiones otorgadas para nuevos proyectos extractivos en el país
Por
4 mil 321 millones 352 mil dólares que las mineras extranjeras ganan en oro,
sólo pagan 43 millones 213 mil 520 dólares
Mineras
canadienses gestionaron desde el 2015 los permisos para nuevos proyectos de
exploración
Las
empresas que reclaman la devolución de impuestos se han beneficiado con el
otorgamiento de nuevos proyectos de extracción para el 2017 y con reservas
mineras probadas que van hasta los 50 años
First
Majestic Silver Corp. hoy explora el yacimiento de oro, plata, plomo y zinc en
la mina San Martín-El Pilón, en Jalisco
76
Por ciento de los proyectos de exploración y extracción de metales poseen las
empresas mineras canadienses
13
Por ciento de los proyectos mineros son de compañías norteamericanas
4 Por
ciento lo poseen empresas chinas
7 Por
ciento de las concesiones son para firmas de Australia, Japón, Argentina,
Italia, Perú, India, Inglaterra, Holanda y Nueva Zelanda
0.7% Participación en la extracción de metales
preciosos e industriales de empresas mineras mexicanas en el país
1%
Del valor de los metales preciosos e industriales extraídos del subsuelo
mexicano pagan las transnacionales
México
está en oferta; para este año la Secretaría de Economía (SE) del gobierno
mexicano contempla la ejecución de 874 proyectos para la extracción de metales
preciosos e industriales, son permisos que en su mayoría fueron otorgados a
empresas extranjeras que cuentan con el aval para la explotación del subsuelo
por periodos de hasta 50 años.
Las
beneficiarias del programa minero nacional son 267 compañías provenientes de 11
países, la mayoría de capital canadiense y norteamericano, que en suma
mantienen el control del 89 por ciento de los permisos de exploración y
explotación minera vigentes para este año.
Las
empresas canadienses prácticamente se han convertido en las dueñas del subsuelo
mexicano, al contar con 76 por ciento de los proyectos de exploración y
extracción de metales, en tanto que las norteamericanas cuentan con permisos de
propiedad en el 13 por ciento de los proyectos en el país. Las firmas chinas
cuentan con 4 por ciento de los proyectos autorizados.
El
resto de las concesiones, un 7 por ciento, se distribuye entre compañías
provenientes de países como Australia, Japón, Argentina, Italia, Perú, India,
Inglaterra, Holanda y Nueva Zelanda, que han aprovechado los incentivos que
ofrece el gobierno mexicano, derivados de la Reforma Energética, para su
instalación en suelo nacional, en donde resalta la devolución de impuestos y
facilidades para la renovación de los permisos al término del periodo
establecido.
Como
resultado de esos incentivos, actualmente el gobierno de Canadá se mantiene en
tensión con el gobierno mexicano, al abogar por la devolución de más de 360
millones de dólares que empresas de ese país merecen de parte de la Secretaría de
Hacienda y Crédito Público (SHCP).
Las
compañías canadienses no son las únicas que se han beneficiado con la
devolución de impuestos del Valor Agregado o Sobre la Renta de parte del
gobierno mexicano, pues este beneficio es generalizado para todas las personas
morales, al que se han acogido la mayoría de las mineras establecidas en el
país.
A
la fecha, no existe información pública de parte de la SHCP sobre las empresas
mineras que se han hecho acreedoras a la devolución de impuestos, pero fuentes
de la dependencia federal confirmaron a Reporte Indigo que la mayoría de las
asentadas en México se han beneficiado con los incentivos de devolución de
impuestos, vigentes desde el 2010.
La
devolución de impuestos para las mineras, que se estima en por lo menos 80
millones de dólares al año, se otorga sin considerar los beneficios económicos
logrados por esas firmas, al tener el control absoluto en la explotación del
subsuelo, principalmente en la extracción de oro, plata, cobre, zinc, plomo,
hierro y molibdeno.
De
acuerdo al informe 2016 de la Cámara Minera de México (Camimex), el valor de
los metales preciosos e industriales que extraen anualmente las mineras del
subsuelo nacional, se mantienen en un valor promedio de los 13 mil 432 millones
626 dólares, en donde sólo la extracción de oro representa una utilidad neta
para estas por el orden de los 4 mil 321 millones 352 mil dólares anuales, en
promedio.
El
segundo metal que más utilidades deja a las mineras extranjeras asentadas en el
país es el cobre, cuya extracción se cuantifica en un promedio anual de los 2
mil 466 millones 822 mil dólares, seguido de la utilidad que deja la extracción
de plata, que se estima en un valor promedio anual de 2 mil 361 millones 901
mil dólares.
Aun
así, con esos beneficios económicos, las empresas mineras extranjeras que
operan en México no tienen empacho en reclamar la devolución de impuestos, tal
como se los permite la legislación tributaria nacional, lo que hace que México
sea uno de los paraísos mineros más importantes del mundo.
DUEÑOS DE NADA
Pese
a que la totalidad de la extracción de metales preciosos e industriales en
realidad es propiedad de las empresas transnacionales, el Gobierno federal
presume a México como el primer país productor mundial de plata, el tercero en
producción de bismuto, el quinto en cadmio, molibdeno y plomo, el sexto en
zinc, el séptimo en cuanto a la extracción de oro y el noveno en obtención de
cobre.
La
realidad es que la producción minera en México se encuentra en manos de
compañías extranjeras, ni siquiera en manos de empresas mexicanas, las que
tiene una participación muy baja, con apenas el 0.7 por ciento, en las
concesiones otorgadas para nuevos proyectos extractivos en el país.
Las
principales compañías mineras de capital mexicano que participan dentro del reparto
de permisos para la instalación de minas de metales preciosos e industriales,
son Grupo México, de German Larrea; Industrias Peñoles, de Alberto Bailléres;
Minera Frisco, de Carlos Slim y Altos Hornos de México, de Alonso Ancira.
En
la mayoría de los proyectos mineros que operan estas empresas mexicanas, casi
siempre van de la mano como subsidiarias de empresas trasnacionales,
principalmente canadienses y norteamericanas, que son las que se llevan gran
parte de los beneficios económicos que representa la explotación del subsuelo
mexicano.
Eso
es lo que ha hecho posible que la producción de oro, plata, cobre, plomo, zinc
y molibdeno, entre otros, venga en ascenso desde 1995, cuando se dio la
apertura minera a las empresas de capital extranjero, que se ha visto
fortalecida con la entrada en vigor de la Reforma Energética, promulgada en
noviembre del 2013.
Los
niveles de extracción de oro, hasta antes de la citada reforma, estaban por
debajo de las 100 mil toneladas por año, pero a partir del 2014 han ido en
franco crecimiento; en el 2014 fueron 117 mil 771 toneladas de oro, en el 2015
fueron 134 mil 759 toneladas, en el 2016 el tope récord de oro en México llegó
a 145 mil 388 toneladas y se espera que en este 2017 se llegue a una producción
de más de 160 mil toneladas.
Lo
mismo sucede con la plata, que hasta antes de la Reforma Energética registraba
una producción anual por debajo de las 233 mil toneladas por año, pero en el
2014 las minas en manos de extranjeros ya produjeron 250 mil 462 toneladas, en
el 2015 la producción fue de 263 mil 772 toneladas, cifra que se rebasó en el
2016 con 289 mil 458 toneladas, y se espera que al final del 2017 la producción
de plata mexicana alcance el récord histórico de 300 mil toneladas.
Del
total de metales preciosos e industriales que se extraen del subsuelo mexicano,
de acuerdo a lo establecido en la legislación mexicana, las compañías mineras
sólo pagan el 1 por ciento del valor de lo extraído, es decir, por 4 mil 321
millones 352 mil dólares que ganan en oro, sólo pagan 43 millones 213 mil 520
dólares, recursos que pueden ser recuperados por las mineras al solicitar la
devolución del pago de impuestos al Valor Agregado y Sobre la Renta.
MINERAS POBRES, POBRES MINERAS
Las
facilidades que ofrece la legislación tributaria mexicana para que las empresas
mineras puedan recuperar los pagos de impuestos realizados, es lo que ahora
mantiene en tensión las relaciones del gobierno de Canadá y de México, en donde
las compañías extranjeras reclaman la devolución de 360 millones de dólares,
retenidos por la SHCP.
A
la fecha existe un listado de por lo menos 18 mineras de Canadá, que tras
solicitar la devolución de impuestos han reclamado la intervención de su
gobierno para que exija al de México el cumplimiento de lo establecido en la
ley tributaria local, luego de haber cumplido en tiempo y forma con sus
obligaciones fiscales establecidas.
Entre
las empresas que reclaman la devolución de impuestos se encuentran Gold Corp.
Inc., First Majestic Silver Corp., McEwen Mining Inc., Endeavour Silver Corp.,
Gold Corp. Incorporated, Agnico Eagle Mines, Torex Gold Resources, Almaden
Minerals Ltd., Amex Exploration Inc., Argonaut Gold Inc., Auramex Resources
Corp., Aurico Gold Inc., Blackcomb Minerals Inc., Catalyst Copper, Continuum
Resources Ltd., y Dia Bras Exploration Inc.
El
reclamo de la devolución de impuestos de las empresas mineras canadienses, que
no se conforman con la rentabilidad de las extracciones de oro, plata, cobre,
plomo y zinc, se ha sustentado en “la escasez de efectivo que afrontan muchas
de las empresas”, según se ha expuesto en reuniones entre funcionarios
canadienses y mexicanos que revisan el problema, dijo una fuente de la
Coordinación General de Minería de la SE.
De
acuerdo a la versión extraoficial, funcionarios del gobierno de Canadá han
señalado que, de no devolverse el pago de impuestos a las empresas reclamantes,
se podría ver afectada la capacidad de inversión en operaciones de extracción
que se llevan a cabo a la fecha, además de que ello representaría dificultades
para realizar nuevos trabajos de exploración.
Pero
aun cuando el reclamo de impuestos comenzó hace un mes, muchas de las mineras
canadienses supuestamente afectadas por la retención de la devolución de
impuestos, gestionaron desde el 2015 la obtención de permisos para la
realización de nuevos proyectos de exploración, sin argumentar falta de
liquidez o problemas financieros.
SE VAN, PERO SE QUEDAN
Se
ha señalado por versiones periodísticas que las mineras reclamantes de la
devolución de sus pagos de impuestos, podrían imponer un boicot al gobierno
mexicano, amenazando con retirar sus inversiones de México, pero eso se observa
distante, pues la mayoría de las empresas referidas se han visto beneficiadas
con el otorgamiento de nuevos proyectos de extracción para el 2017.
Así,
por ejemplo, Gold Corp., que se refiere como una a las que más se le adeuda la
devolución de impuestos, actualmente se encuentra explorando la mina Camino
Rojo, en el municipio de Mazapil, en Zacatecas, en donde existen reservas
probadas de oro, plata, plomo y zinc, por más de 30 años.
La
empresa First Majestic Silver Corp., que también afectada por la no devolución
de impuestos, actualmente explora el yacimiento de oro, plata, plomo y zinc, en
la mina San Martin-El Pilón, en el municipio de San Martin de Bolaños, en el
estado de Jalisco, en donde existen reservas metálicas para más de 50 años.
La
minera McEwen Mining Inc., otra de las empresas pobres que supuestamente no
tiene fondos, se ha hecho de la exploración de las minas Shakira, Palmarito,
Revancha y Rocío, en el municipio de Mocorito, en Sinaloa, en donde se estiman
reservas probadas por más de 20 años para la extracción de oro y plata.
A
la lista se suma Endeavour Silver Corp., que actualmente mantiene en operación
las minas de oro y plata en Guanaseví, Durango, y Bolañitos, en Guanajuato, y
que ahora suma los proyectos de exploración de San Sebastián, en Jalisco, y
Arroyo Seco, en Michoacán, donde existen reservas de oro y plata para sostener
una producción constante en los próximos 35 años.
Gold
Corp. Incorporated, que mantiene en explotación la mina de oro y plata de El
Sauzal, en el municipio de Urique, en Chihuahua, es una de las que han recibido
permisos de exploración en el polígono ampliado de la mina, con lo que
garantiza la extracción que viene haciendo a por lo menos otros 10 años.
La
minera Agnico Eagle Mines, una de las más grandes que se han asentado en suelo
mexicano, ya cuenta con los permisos de exploración para tres yacimientos de
oro en el estado de Sonora, en donde ya inició, aun sin contar con la
devolución de impuestos, los trabajos de exploración en las minas Colibrí, León
y Remard.
Torex
Gold Resources, que también se ubica entre las empresas que de acuerdo a la
versión canadiense podría dejar su labor extractiva en México, cuenta con el
permiso de exploración en la mina El Limón, en el estado de Guerrero, en donde
las reservas de oro están garantizadas por más de 20 años.
Igual
sucede con la transnacional Almaden Minerals Ltd., que hoy cuenta con 25
concesiones para explorar igual cantidad de minas de oro, plata, cobre, plomo y
zinc en los estados de Chihuahua, Oaxaca, Nayarit, Puebla, Sonora, San Luis
Potosí, Veracruz, Tamaulipas, Coahuila, Zacatecas y Sinaloa, donde -no sobra
decir- existen conflictos sociales de importancia con las comunidades locales
por la disputa de la tierra y el agua.
Amex
Exploration Inc., que reclama la devolución de impuestos para seguir en
posibilidad de explotación del subsuelo mexicano, a la fecha se ha hecho de
tres nuevos permisos de exploración en el estado de Sonora en los yacimientos
de oro, plata, zinc y plomo, contenidos en los predios La Nueva Escondida, La
Alazana y El Jabalí.
Por
su parte Argonaut Gold Inc., que ya opera la mina El Castillo, en Durango, con
altos resultados en la extracción de oro y plata, se ha apropiado de dos nuevos
permisos de exploración, estos para los yacimientos de oro y plata en San Antonio,
en Baja California Sur, y La Fortuna en Durango, donde se ha confrontado con
vecinos de las comunidades por la disputa del suelo.
Auramex
Resources Corp., la empresa que ya explota las minas Ana, de hierro, en el
estado de Sinaloa, y La Negra, de plomo, zinc, cobre y plata, en Querétaro,
también ha obtenido del Gobierno federal los permisos para la exploración de
los yacimientos de oro, cobalto, níquel, plata y cobre en los predios La Perla,
El Fierro y Magenta, en el estado de Sinaloa, con reservas probadas para 20
años.
Por
su parte, las mineras Aurico Gold Inc., Blackcomb Minerals Inc., Catalyst
Copper, Continuum Resources Ltd., y Dia Bras Exploration Inc., cuentan con
sendos permisos de exploración en los estados de Chihuahua, Durango, Guanajuato,
San Luis Potosí, Zacatecas, Nayarit, Sonora, Michoacán, Baja California y
Oaxaca, en donde el factor común son los brotes de inconformidad de las
comunidades locales, por el despojo de la tierra.
(REPORTE
INDIGO/ J. JESÚS LEMUS / Viernes 16 de junio de 2017)
No hay comentarios:
Publicar un comentario