Lorena Figueroa/ El Diario de El Paso
La
Diócesis de El Paso arremetió ayer en contra del grupo de laicos que demandó
hace unos días al aún obispo Armando Ochoa, argumentando que la acción legal es
para “desviar la atención” del mal manejo de dinero que hizo el padre Michael
Rodríguez como administrador de la iglesia San Juan Bautista.
Dijo que se
ha dado oportunidad a los demandantes a que recuperen el dinero que donaron para
proyectos de la parroquia del que, argumentan, Ochoa “decomisó”, rechazando
además que los fondos han sido para pagar asuntos legales.
Lo anterior de
acuerdo a un comunicado que la Diócesis envió en respuesta a la demanda que
interpusieron cinco feligreses de San Juan Bautista el viernes pasado en contra
de Ochoa y monseñor Arturo J. Bañuelas en una Corte de Distrito.
En la
acción legal, bajo el número de causa 2012-DC00743, indica que los cinco habían
donado desde el 2007 a San Juan Bautista unos 46 mil 90 dólares para construir
un nuevo altar y santuario para cumplir con las normas antiguas del Rito
Romano.
Las donaciones fueron hechas al padre Rodríguez, quien estaba
encargado de la administración de la parroquia, agrega.
Pero, el 24 de
septiembre del 2011, Ochoa y Bañuelas “demandaron y recibieron” 238 mil 576
dólares de Rodríguez, por lo que los demandantes “en buena fe” creen que en esa
cantidad iban incluidas sus donaciones.
Los demandantes acusan que el
dinero “decomisado” es “parte de un plan para pagar otras obligaciones legales”
por parte de Ochoa y Bañuelas así como saldar “asuntos concernientes” a
Rodríguez.
Por lo anterior, los laicos en la demanda exigen que se les
restituya el dinero donado.
Al respecto, la Diócesis de El Paso rechazó
tales acusaciones, dejando en claro que se ha dado la oportunidad a los quejosos
de recuperar su dinero.
“A estas personas se les proporcionó con una
forma para pedirles información y documentos para comprobar la cantidad donada y
su reclamo que las donaciones estaban restringidas a un propósito en
particular”, según el comunicado que envió la Diócesis el jueves.
Agregó
que ninguno de los quejosos proporcionó ni la información ni la documentación
antes de interponer su acción legal.
Indicó que los demandantes mienten
al decir que Ochoa y Bañuelas se apoderaron de las donaciones para pagar asuntos
legales.
El dinero forma parte de los más de 238 mil dólares en
donaciones y limosnas para San Juan Bautista sin la aprobación de la Diócesis
que Rodríguez presuntamente canalizó a varias cuentas de banco personales que
mantuvo “en secreto”, según otra demanda que Ochoa interpuso en contra del
sacerdote a mediados del mes. El comunicado enfatiza que la totalidad de esos
fondos se encuentran en una cuenta de banco y permanecerá allí hasta que
Rodríguez rinda cuentas de las donaciones irregulares que solicitó.
“Las
personas que archivaron esta intervención (acción legal) aparentemente piensan
que el realizar falsas alegaciones desviarán la atención de la administración
impropia del padre Michael Rodríguez de las finanzas de la parroquia”, según
indica el comunicado de la Diócesis.
Celeste Herget, integrante del grupo
de laicos de San Juan Bautista, consideró lo anterior como “deshonesto” y
“vengativo”, en un correo electrónico que envió a El Diario de El
Paso.
“Somos gente que trabajamos duro y amamos a Dios. Para mostrar ese
amor, hemos ofrecido de nuestros corazones fondos dedicados para instalar el
altar dingo de nuestro Señor. Con esa finalidad, estamos en nuestro derechos de
cuestionar cómo la Diócesis está usando o contempla usar nuestro dinero”,
dijo.
Y agregó: “Nuestro regalo fue dedicado a una sola causa. La
Diócesis no tiene derecho a ese dinero si no honra la causa”.
Herget
continuó diciendo que desde el 24 de septiembre, tanto ella como los otros
cuatro demandantes, han sido “ignorados” al preguntarle a la Diócesis, a través
de cartas y llamadas telefónicas, sobre el destino de las
donaciones.
Mencionó que su grupo sólo recibió una carta del abogado de
la Diócesis el jueves de la semana pasada, un día antes de que interpusieran la
acción legal contra Ochoa.
El comunicado de prensa de la Diócesis fue
distribuido un par de días después de que el padre Rodríguez dijera que, al
demandarlo civilmente, Ochoa viola la ley que rige la Iglesia
Católica.
“El procedimiento que debe tomar la Iglesia para resolver los
conflictos que existen aquí no se ha respetado”, dijo Rodríguez, quien se
presentó el martes en la junta de Cabildo, durante el periodo de comentario
público para hablar sobre el pecado que representan las relaciones
homosexuales.
Aseguró que su abogado y él ya se comunicaron con el
Vaticano para informarles de la demanda en su contra, interpuesta a principios
de enero en la Corte de Distrito 448.
Luego de más de nueve años como
administrador parroquial de San Juan Bautista, Rodríguez fue reasignado a la
parroquia de Santa Teresa de Jesús en Presidio, Texas, el 20 de
septiembre.
Rodríguez causó polémica el año pasado por pagar anuncios en
un periódico local en donde manifestaba su rechazo a las relaciones
homosexuales, calificándolas como pecado.
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