MONTERREY, Nuevo
León(SUN).- La maestra Zulema Magali Garza Oyervides, quien presuntamente
privó de su libertad a uno de sus alumnos de 7 años durante siete horas, podría
alcanzar una pena de uno tres años de cárcel.
La profesora se presentó
ante el Agente del Ministerio Público pero rechazó hacer declaración alguna en
torno a los hechos. Depositó una fianza de 30 mil pesos para poder enfrentar el
proceso en libertad.
De acuerdo con el Agente del Ministerio Público,
Ricardo Garza Sánchez el delito que cometió la docente es considerado como no
grave según lo establece el artículo 354 del Código Penal vigente en el Estado.
El fiscal reveló que con base en este criterio legal y de acuerdo a lo
estipulado en el artículo 355 de Código Penal, la joven maestra podría ser
sentenciada a purgar de uno a tres años de cárcel y a pagar de una a diez cuotas
del salario mínimo, que en la entidad, podrían ser menos de mil pesos.
La procuraduría estatal le sigue a la docente un proceso por privación
ilegal de la libertad del menor Eduardo, de siete años; quien en días pasados se
quedó castigado durante siete horas en el interior de su salón de clases,
después de que todos sus compañeros abandonaron la escuela primaria "5 de
octubre" de Monterrey, poco después de las 18:00 horas.
El menor fue
rescatado poco después de la medianoche, cuando agentes ministeriales rompieron
los candados de la puerta del salón; para encontrar al pequeño Lalito durmiendo
bajo el escritorio de su maestra Zulema, quien lo castigó por no cumplir con sus
tareas.
La procuraduría general de justicia en Nuevo León lleva a cabo
la búsqueda de Francisco Cadena Ramírez, conserje de la misma escuela primaria,
al ser el responsable de colocar los candados a los salones de clases al término
del horario escolar.
Cadena Ramírez deberá responder ante las
autoridades judiciales por la presunta privación de la libertad del pequeño
Lalito quien se quedó castigado durante horas en su salón de clases; luego de
que la maestra Zulema Magali cerró el salón, y él colocó el candado.
El
menor se mantuvo encerrado dentro del aula escolar como castigo al no cumplir
con sus deberes escolares; por lo que ahora el conserje de quien se dice ya
cuenta con un amparo de la justicia federal y la maestra deberán enfrentar un
proceso legal que puede derivar en su encarcelamiento.
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