Arturo Soto Munguía
- Sí hay una opción distinta al PRI y al PAN, pero hay que unificarla
- Sí hay una opción distinta al PRI y al PAN, pero hay que unificarla
- En Hermosillo comienza el relanzamiento de una izquierda democrática
- Nosotros somos de AMLO y la relación con Morena es excelente
- Carlos Navarro “no respeta acuerdos ni teniendo enfrente a Zambrano”
El PRD en Sonora es una catástrofe como partido político de izquierda. Ha sido copado por una generación que hace 20 años llegó para levantar la mano de los ganadores -sea el PRI, sea el PAN-; ponerse a su servicio a cambio de privilegios económicos para sus dirigentes, mismos que han impedido el relevo generacional mediante métodos que incluyen el robo y el relleno de urnas.
Vaya paradoja. La mapachería vil y corriente, en un partido que nació abominando las prácticas que ahora abraza.
“Un cochinero”, sostiene el entrevistado, que no milita en el PRI, mucho menos en el PAN de estos días, de manita tan sudada con aquellos a quienes Benjamín Hurtado Aguirre identifica como los administradores de esa “franquicia” en que han convertido al PRD, para su beneficio personal.
II
Benjamín Hurtado es el dirigente municipal del Partido de la Revolución Democrática en la capital de Sonora, donde se disputan cinco distritos electorales locales y dos federales, que concentran unos 250 mil votos, casi un tercio del padrón electoral en el estado.
En un municipio donde la elección por la alcaldía ha rebasado los 120 mil votos, el PRD obtuvo en 2009 poco más de cinco mil, con lo cual no le alcanzó ni para un regidor plurinominal. En la elección de 2009, no ganó un solo distrito, y es gobierno en un solo municipio: San Ignacio Río Muerto, una pequeña población rural que tiene mucha más historia que votantes…
De ese tamaño es la catástrofe que relata Benjamín Hurtado, quien ha vuelto a los encordados después de varios años de retiro, decepcionado de las trapacerías que desde entonces, por allá en 1994, practicaba Carlos Navarro López, el actual dirigente estatal, según cuenta.
Carlos Navarro -de quien dice, no respeta acuerdos “ni teniendo a (Jesús) Zambrano enfrente”-, actualmente está demandado ante la Comisión de Prerrogativas del IFE, para que rinda cuentas sobre el manejo de las finanzas del partido, pues se presumen hechos delictivos.
La demanda está firmada por todos los integrantes del Comité Ejecutivo Municipal. Todos, incluyendo a los que se identifican con la corriente Nueva Izquierda, cuya cabeza más visible es Carlos Navarro López.
De esos y otros temas habla Benjamín Hurtado, que se reincorpora a la actividad política después de aquel 1994, cuando descubrió que las políticas públicas del salinismo estaban orientadas a desmantelar el campo mexicano y privilegiar un modelo maquilador que hasta ahora, sigue siendo un fracaso como proyecto para resolver la deplorable calidad de vida de millones de mexicanos.
El asesinato de Luis Donaldo Colosio, ese mismo año, lo decidió a presentar su renuncia al PRI, siendo gobernador Manlio Fabio Beltrones.
Benjamín Hurtado buscó entonces, acercarse a la candidatura de Cuauhtémoc Cárdenas, un hombre que seis años antes, ya había perfilado un programa de gobierno que privilegiara a los sectores más desprotegidos del país, sin descuidar al universo más numeroso del empresariado nacional, ese que ha sido maltratado en aras de privilegiar a los grandes corporativos “que sólo ven números, pero no ven gente, no ven las necesidades reales de la gente”, dice Benjamín Hurtado.
El mismo que se escapa como pescado enjabonado, cuando le pregunto si es él, el líder que el PRD estaba esperando para re-posicionar a un partido que en Sonora, y señaladamente en Hermosillo, electoralmente está en la lona.
“Alabanza en boca propia es vituperio”, dice. Y agrega: “eso lo dirán las circunstancias y el tiempo, ahorita estamos haciendo hasta la imposible por ayudar a la gente”.
Y si para eso hay que gestionar ante la Fundación Progreso Sonora, de la familia López Caballero un apoyo superior a los 85 mil pesos en pacas de láminas de cartón negro para las familias de Kino Viejo, lo voy a hacer”, asegura.
Y es que un día antes, Hurtado Aguirre estuvo en esa población, donde pasó revista a unos 800 afiliados, “el 97 por ciento de los afiliados al PRD, desde que tomé posesión del cargo, los he afiliado yo, personalmente. Con las otras corrientes no quieren afiliarse, quizá porque las conocen”, suelta, con ironía.
Y ahí comienza la entrevista, en la que Benjamín Hurtado suelta, nomás en cuanto se le recuerda cómo es que vuelve al PRD, y cómo es que se encuentra al PRD en Hermosillo:
“Arruinado, desarticulado, con un problema interno tremendo. En el mismo contexto que el estatal y nacional. Afortunadamente aglutinamos a todas las corrientes y hoy en día tenemos un Comité Municipal fuerte, unido y trabajando por un sol lado: el de levantar la votación del PRD en Hermosillo hasta los 40 mil votos o más, que fácilmente existen en un electorado hermosillense que ya probó al PRI y al PAN como opciones de gobierno, y no les ha resuelto sus necesidades”, asegura.
III
La entrevista con Benjamín Hurtado se da un día antes de conocer el resultado de las encuestas que definieron la candidatura de El Peje como candidato de la izquierda mexicana y Benjamín se declara ‘pejista’ desde entonces.
Dice que tiene una excelente relación con la gente que en Hermosillo, se identifica con la izquierda, especialmente aquellos académicos e intelectuales que se alejaron del partido cuando apreciaron el nivel de corrupción que llevó a la izquierda sonorense al estado de sumisión y entreguismo en el que está apoltronada la dirigencia del PRD en Sonora, donde destacan tres nombres: Carlos Navarro, José Guadalupe Curiel y Gorgonia Rosas López.
Los que han hundido al partido, dice.
Y antes de que haga el recuento, le pregunto por qué vuelve al PRD.
Me contesta:
“Primero, porque me gustan los retos; segundo: yo veo un PRD en plena inclinación hacia la desaparición. Veo también una gente necesitada de una izquierda con sentido social. Una izquierda que se olvide un poco de sus ambiciones por ocupar un cargo de dirección partidista, o de elección; una izquierda que se olvide de aprovechar la pobreza de la gente para enquistar a un grupo muy pequeño de privilegiados”, suelta.
Y es que el PRD de ahora carece de ese sentido social: “la única intención de sus dirigentes es ocupar un puesto de dirección para ver en qué se benefician. Utilizan la pobreza y a la gente pobre para subir en lo económico y una vez obtenido tal cosa, se olvidan de ello. Utilizan a la gente necesitada para su beneficio personal y hasta ahí”.
¿Hermosillo perredista?
No. La expectativa es realista, documentada en los resultados electorales del perredismo en la capital de Sonora. Un fracaso que no le alcanzó ni para una regiduría pluri.
A lo que aspiramos, dice Benjamín Hurtado, es a una votación de entre 30 mil y 45 mil votos, que le permitan a esa nueva izquierda sonorense lograr una representatividad de por lo menos tres regidores en el cabildo hermosillense, pero la verdadera razón por la cual el perredismo se ha derrumbado en Hermosillo, la revela la segunda parte de esta entrevista, que aparecerá mañana…
No se la pierdan, porque Benjamín Hurtado plantea asuntos que la izquierda, sobre todo en Hermosillo, debe estar discutiendo, por encima de los fajos de billetes que se agencia la Gorgonia y el Curiel, de quienes también tiene cosas qué decir el dirigente municipal del PRD en Hermosillo…
Mañana le seguimos…
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