Foto: Cortesía / Eduardo Villa
Al empresario mexicalense lo asesinaron
cuando salió a la banqueta de su casa. Fueron dos personas que huyeron de la
escena y metros adelante abordaron un vehículo. Gustavo Carlos Caballero Camou
vivía solo con su hija en la residencia donde se registró el atentado; una
semana antes, habían reportado un intento de asalto. Se investiga su entorno
laboral
En lo que a todas luces fue
un ataque directo, el propietario de la empresa Fruvemex, Gustavo Carlos
Caballero Camou, fue asesinado la madrugada del martes 8 de agosto al interior
de su propiedad en la colonia Burócratas, a escasas calles de la casa del
gobernador del Estado.
El empresario de 72 años de
edad recibió cuatro impactos de arma de fuego en la cabeza y el torso, le
dispararon con un arma corta. Su muerte fue de manera inmediata.
Minutos antes de las seis de
la mañana se dio el reporte de emergencia: solicitaban de forma urgente la
presencia de la Policía Municipal y de personal de la Cruz Roja; se reportaba
una persona lesionada dentro de una casa ubicada sobre Plateros Sur, entre las
calles K y L.
Al arribo de los paramédicos,
éstos confirmaron el deceso de Caballero Camou padre. Su cuerpo quedó boca
arriba, su brazo izquierdo sobre su cuello; llevaba ropa interior debido a que
salió de su casa solo para recoger el periódico y pretendía regresar a
desayunar, cuando lo mataron.
La calle fue acordonada en su
totalidad, una acción cada vez más común en los agentes policíacos, en parte
para concentrarse en la preservación de la escena e iniciar los trabajos de
investigación, respetando las normas del Nuevo Sistema de Justicia Penal;
también haciendo difícil el oficio reporteril.
Las hipótesis de un secuestro
o un asalto fueron las primeras en concluirse inmediatamente después que se
conoció la noticia del crimen, sin embargo, el secuestro fue descartado, dada
la avanzada edad de Caballero, pues en esas condiciones hubiese sido
relativamente fácil plagiarlo, aunque sospechan que el empresario se defendió
antes de ser herido de muerte.
Al momento y a la espera de
los dictámenes periciales para saber si hubo un encuentro físico entre asesinos
y víctima, hay dos líneas de investigación: asalto o ataque directo. Las
cámaras de video vigilancia de la residencia de Caballero Camou también están
siendo analizadas.
Además, se investiga un
intento de robo a la vivienda del empresario, reportado hace una semana, según
los investigadores de la Policía Ministerial. En la misma línea, ataque directo
o robo y buscando un móvil, han encontrado que Caballero Camou, quien vivía
solo con su hija en la casa donde fue asesinado, había tenido conflictos con la
justicia. Por lo menos tres denuncias, dos por fraude (una por un millón de
dólares) y otra por robo calificado, esta última en Sinaloa, y las tres ya
cumplidas.
Las investigaciones del
homicidio han determinado que fueron dos personas los atacantes, quienes tras
disparar a la víctima, huyeron hacia el norte, por la calle L, donde abordaron
un vehículo y emprendieron la huida. En ese punto fue localizada una prenda de
vestir que se presume, pertenecía a uno de los criminales.
El cuerpo del empresario fue
levantado de la escena alrededor de las 9:30 am por personal del DIF Estatal,
que lo trasladó a la morgue, donde se llevó a cabo la autopsia.
José María González, subprocurador
de Investigaciones Especiales de la Procuraduría General de Justicia del
Estado, informó que Caballero Camou recibió dos de los cuatro disparos que le
hicieron, y confirmó la muerte en el lugar de los hechos.
La principal línea de
investigación es la personal y laboral, por el sector productivo en el que
trabajaba, aunque de acuerdo al funcionario estatal, al momento de la
entrevista era muy prematuro tener una hipótesis sólida.
Asimismo, reconoció que la
víctima tenía dos denuncias por fraude en cuanto a la venta de unos terrenos en
los estados de Sonora y Sinaloa, el primero hace más de siete años.
A pregunta expresa, González
dio a conocer que en el lugar del crimen se encontró un guante, una gorra y un
paliacate que presuntamente fueron utilizados por el victimario para evitar ser
reconocido.
Agregó que al parecer el
occiso se dedicaba a exportar vegetales al vecino país, por lo que no descartan
ese ambiente como una de las líneas de investigación.
El homicidio del empresario
se convierte en el número 94 en lo que va del año en Mexicali, por lo que el
sector empresarial reaccionó casi de inmediato para realizar un llamado a las
autoridades, a fin de agilizar la investigación y evitar especulaciones.
En un comunicado enviado por
Rodrigo Llantada Ávila, presidente de la Confederación Patronal de la República
Mexicana (Coparmex) Capítulo Mexicali, lamentó el homicidio y reconoció la
tristeza cada vez que se pierde la vida de alguien en hechos de alto impacto.
“Nos obliga a estar pendientes de las investigaciones (…) Las circunstancias en
las que ocurre el crimen les hace pensar que pudiera ser un ataque muy
específico pero no tenemos información y evidencia si fue asalto o secuestro.
Lo que nosotros sí queremos hacer es acelerar, con las autoridades, la
investigación y que pronto puedan entender las razones de este ataque”,
manifestó.
En el mismo comunicado,
Llantada señala que como organización están trabajando muy de cerca con el
alcalde en estrategias específicas que esperan den resultados a corto plazo.
De acuerdo a los reportes, de
las 100 muertes registradas en 2017 en la ciudad, el 70 por ciento se vinculan
con violencia intrafamiliar y el resto por delitos de alto impacto.
Por último, el titular de
Coparmex Mexicali indicó que a diferencia de Tijuana, que cuenta con más de 800
homicidios dolosos registrados, en la Capital del Estado casi todos han sido de
alto impacto. La Cámara ya trabaja propuestas con el Consejo Ciudadano de
Seguridad Pública Estatal, que preside Juan Manuel Hernández Niebla, para
atender el tema.
(SEMANARIO ZETA/ EDICIÓN IMPRESA / CRISTIAN TORRES
/LUNES, 14 AGOSTO, 2017 12:00 PM)
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