martes, 27 de diciembre de 2016

REVELAN EN PENAL DE GUASAVE VIOLACIONES EXTREMAS A DERECHOS HUMANOS


En una visita de la CNDH detectó castigos que incluyen descargas eléctricas a los presos por parte del personal de custodia, limitación de agua potable, incomunicación y pacientes abandonados por miedo a contagio de enfermedades

Personal de seguridad y custodia les aplica descargas eléctricas y que son sometidos a revisiones indignas, de acuerdo a informe de la CNDH.

Castigos que incluyen descargas eléctricas a los presos por parte del personal de custodia, limitación de agua potable, incomunicación, y pacientes abandonados por miedo a contagio de enfermedades, son algunas irregularidades detectadas por la Comisión Nacional de los Derechos Humanos en su última visita al Centro Penitenciario Norponiente de Guasave, donde la mayoría de los 588 internos está en esas condiciones.

En su informe del pasado 23 de diciembre, la CNDH reveló que entre septiembre y octubre visitó ocho Centros Federales de Readaptación Social y el Complejo Isla Marías, el objetivo fue documentar la prevención de la tortura, pero los hallazgos revelaron que en la mayoría no hay capacitación para funcionarios, y sí persisten violaciones a los derechos humanos de los internos.
En el caso de Sinaloa los presos coinciden en prácticas indignas.

“Algunos señalaron que personal de seguridad y custodia les aplica descargas eléctricas y que son sometidos a revisiones indignas. Es pertinente mencionar que debido tales situaciones, esta Comisión Nacional, en su carácter de organismo protector de los derechos humanos, solicitó medidas cautelares para garantizar la integridad de la población interna... aunado a que se encuentra en trámite un expediente de queja”, reveló.

Al momento de las visitas en el Centro Norponiente de Guasave había 588 internos, la mayoría refirió las limitaciones y castigos severos, pues una de las sanciones es cambiarlos de centro, así se alejan de su familias y reducen las visitas. Aquí tampoco tienen acceso a actividades ocupacionales.

La CNDH observó comida insuficiente y de mala calidad; además los internos no tienen acceso al agua potable porque no permiten el ingreso de garrafones, si quieren la deben pedir al personal de seguridad.

En los recorridos, los visitadores recogieron testimonios de una práctica común de la autoridad que es el cambio de dormitorio, lo que provoca que los internos pierdan la oportunidad de hacer una llamada telefónica que se programa cada 15 días, ésto les modifica el día autorizado para esa llamada de sólo 10 minutos; y las propias autoridades señalaron que no reciben capacitación preventiva sobre tortura.
En el centro penitenciario la separación y clasificación del personal no existe, aquí no están separados procesados y sentenciados; tampoco tienen programas para prevenir y atender situaciones de emergencia o eventos violentos.

En resumen, esto contraviene a todo reglamento y tratado internacional para garantizar la estancia segura de los presos; lo mismo se detectó en el resto de los centros visitados.

IMPACTO A LA SALUD

La CNDH encontró en Sinaloa un Centro Penitenciario federal abandonado en servicios de salud pública, pues no hay Psiquiatra, y el personal médico asignado no acude a verificar el estado de salud de los internos, tampoco vigilan la preparación y la higiene de los alimentos.

En su informe sobre la prevención de la tortura, la CNDH sostiene que los internos señalan falta de medicamentos y deficiente atención, sólo la tienen cuando hay lesiones.

Sin embargo, los riesgos son mayores, pues los visitadores documentaron internos que requieren tratamiento por enfermedades transmisibles, pero están en el abandono.

“En el Centro de Observación y Clasificación había un grupo de 30 internos trasladados de otros centros, la mayoría de los cuales presentaba hepatitis “C”, Sífilis o Síndrome de abstinencia encerrados en sus celdas, en condiciones insalubres, y sin ventilación adecuada, quienes según información proporcionada por las propias autoridades del centro no estaban recibiendo atención médica ni podían ser reubicados por temor de contagio a la población interna”.

CENTROS VISITADOS

Altiplano, en Almoloya de Juárez, Estado de México
Occidente, El Salto, Jalisco
Noroeste, Tepic, Nayarit
Oriente, Villa Aldama, Veracruz
Sureste, Huimanguillo, Tabasco
Nor-noreste, Durango
Norponiente, Guasave, Sinaloa
Norte, Ciudad Juárez, Chihuahua
Complejo Penitenciario Islas Marías, Nayarit


(NOROESTE/ Sheila Arias/ 27/12/2016 | 02:00 AM)

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