Ciudad
de México.- Un registro de la Policía en casa de un presunto pedófilo de 21
años acabó ayer en tragedia en el municipio de Móstoles. El joven se tiró al
vacío desde el quinto piso de su domicilio, situado en la Avenida de la
Constitución, justo antes de que los ciberagentes procediesen a examinar si
tenía archivos de pornografía infantil en un ordenador portátil. Murió en el
acto.
El
fallecido carecía de antecedentes policiales y los investigadores llevaban tras
su pista desde hace varios meses cuando se descubrió que desde la Comunidad de
Madrid una persona formaba parte de una trama internacional de pedófilos
asentada en países del centro de Europa.
Una
vez realizadas las diferentes gestiones de comprobación de los datos de
identificación obtenidos se procedió a la materialización de diligencias de
entrada y registro del domicilio.
Sobre
las 09.00 horas los agentes del grupo 8 de la Brigada de Policía Judicial,
especializado en delitos tecnológicos (BIT), acudieron a casa del joven
sospechoso acompañado de la correspondiente comisión judicial.
Investigaban
a una persona, que desde la IP de un ordenador localizado en Móstoles, se
dedicaba a distribuir imágenes y vídeos sexuales de menores mediante un chat. A
través de esta vía contactaba con pedófilos del resto del mundo con los que
intercambiaban de forma privada los archivos que previamente habían descargado
en la red.
TRES ORDENADORES
Los
agentes ya llevaban detrás de la pista de ese terminal y sabían que en esa casa
había un claro sospechoso, el joven de 21 años, aunque también habían
investigado a su padre.
En
el momento de la intervención policial se encontraban en la casa el joven y su
madre. En la casa había tres ordenadores y se dispusieron a examinar en primer
lugar el terminal del chico.
Uno
de los policías reclamó la clave al joven para poder analizarlo y éste le
contestó que iba a ir a por ella a otro cuarto de la casa donde la tenía
apuntada.
El
joven se dirigió al salón acompañado de un agente y, sin decir nada, tomó
carrerilla y se lanzó al vacío delante de su madre desde la terraza de la
quinta planta del edificio. Nadie pudo evitarlo. Nadie tampoco esperaba que el
chico reaccionase de esa forma.
Tanto
los agentes como los miembros de la comisión judicial se quedaron perplejos con
la acción inesperada del joven.
La
madre del chico necesitó asistencia psicológica y posteriormente explicó que
desconocía que su hijo pudiese formar parte de una red internacional de
pedófilos.
Es
más, señaló que cada vez que salían noticias en televisión sobre estos casos
ponía especial acento en repudiarlos y condenar a los pederastas.
Hasta
Móstoles se desplazaron los agentes del grupo de Homicidios que van a
investigar el caso. Por el momento, las averiguaciones sobre el joven fallecido
están paralizadas aunque su ordenador y su teléfono móvil han quedado
decomisados.
EL MUNDO DE ESPAÑA
(ZOCALO/ AGENCIAS/ 03/07/2015 - 04:34
PM)
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