Presuntos delincuentes ingresaron al recinto camaral con credencial de elector
CIUDAD DE MÉXICO, 22 de noviembre.- La PGR investiga el caso del presunto ingreso de integrantes de Los Caballeros Templarios al
Senado, el pasado 17 de octubre, informó Mariana Benítez,
subprocuradora de Asuntos Jurídicos y Relaciones Internacionales de la
dependencia.
Dijo que esa Cámara ya interpuso una denuncia sobre el caso.
“Quisiera ver en qué términos se presentó la denuncia, y si
existieran elementos constitutivos de delitos, la PGR actuará en
consecuencia”, dijo en entrevista en la Comisión de Justicia del Senado.
Excélsior dio a conocer ayer que los senadores
aceptaron que presuntos integrantes de ese cártel ingresaron a la sede,
haciéndose pasar por jornaleros, para hablar con legisladores, y que el
encuentro se suspendió cuando la senadora Luisa María Calderón alertó
que dos de las diez personas en la audiencia tienen relación con templarios.
El reporte de la Presidencia de la Mesa Directiva indica que los
presuntos jornaleros llegaron al Senado poco antes de las 11:00 horas,
ingresaron después de entregar sus identificaciones como habitantes de
Apatzingán, Michoacán, y que a las 13:30 horas salieron del recinto.
La bancada del PAN formó un grupo de legisladores para registrar la
situación en Michoacán, a fin de impulsar la desaparición de los Poderes
en ese estado.
Identifican a Templarios y los dejan ir
Los 10 michoacanos se registraron y presentaron su identificación oficial al entrar al recinto legislativo.
Después de poco más de una hora de esperar en la sala seis, los 10
michoacanos que estuvieron el 17 de octubre en el Senado de la República
y que la panista Luisa María Calderón identificó como integrantes de Los Caballeros Templarios a
dos de ellos, fueron duros en sus críticas hacia el gobierno de Felipe
Calderón, a quien acusaron de generar la crisis de seguridad en
Michoacán.
Eran las poco antes de las 11:00 horas cuando un grupo de 400
personas llegó a la esquina del Senado, en Reforma y París. Pedían la
intervención de los senadores para restituir la seguridad en Michoacán.
El Senado tiene un funcionario, dependiente de la Secretaría General
de Servicios Administrativos, cuya labor es salir a dialogar con los
grupos sociales que se acercan para hablar con los legisladores
federales.
El 17 de octubre, este funcionario salió a hacer su trabajo. Dialogó
con quienes se identificaron como las cabezas de la manifestaciones. Se
identificaron con él como habitantes de varios municipios de Michoacán,
pero la mayoría era de Apatzingán.
Les pidió el tema que querían tratar. Ellos pidieron hablar con el
presidente del Senado, pero el funcionario les comentó que no podían
pasar todos y que primero debía informar a los senadores. Los
manifestantes le dijeron que iban a pasar 150 de ellos, pero él les
comentó que sólo podía pasar una comisión máximo de 10 personas; ellos
debatieron y nombraron a los 10 que podían pasar.
Esa es la versión que contiene el reporte que los encargados de este
tema entregaron al presidente de la Mesa Directiva, Raúl Cervantes, a
quien también entregaron nombres, fotografías y videos del ingreso,
permanencia y salida de los 10 michoacanos, donde se observa que en
ningún momento salieron del salón donde fueron recibidos; es decir, no
recorrieron el edificio;
El relato establece que mientras los manifestantes se organizaban
para elegir quién iba a hablar en su nombre, el funcionario del Senado
se dirigió a la Mesa Directiva, que preside el priista Raúl Cervantes
Andrade, para informarle del tema que el grupo de inconformes quería
dialogar con los senadores.
De acuerdo con el relato del propio presidente del Senado, Raúl
Cervantes, él habló con los vicepresidentes de la Mesa y se acordó que,
al tratarse de un asunto de seguridad pública, fuera el presidente de
esa comisión, Omar Fayad, y al ser un tema de Michoacán, asistieran los
senadores que representan ese estado.
El funcionario del Senado informó a los inconformes que iban a ser
recibidos por los senadores. Entonces, los condujo hacia la entrada del
edificio ubicada en la calle de Madrid. En ese momento, los elementos de
Resguardo Parlamentario los custodiaron. Los 10 michoacanos registraron
sus nombres y las organizaciones a las que representan; dejaron su
identificación oficial y fueron conducidos, por los elementos de
Resguardo, a la sala seis de la planta baja del edificio.
Los visitantes se quedaron en ese salón. Esperaron una hora para que
los senadores llegaran. Mientras esperaban platicaron entre ellos y sólo
dos salieron al baño. El resto no se movió en ningún momento, relató a
este diario uno de los trabajadores de apoyo del Senado encargados de
esta reunión. Tomaron agua y en ningún momento tuvieron contacto con
nadie más ni fueron a ninguna otra parte del edificio; además, siempre
estuvieron vigilados por el personal de seguridad.
Mientras los visitantes esperaban en la sala seis, en el salón de
plenos, uno de los trabajadores de Servicios Parlamentarios se acercó a
los escaños de los senadores designados por la Mesa Directiva, Omar
Fayad y Rocío Pineda; como en ese momento no estaban en el salón los
perredistas de Michoacán, se decidió que fuera el morelense Rabindranath
Salazar, pero justos llegó Raúl Morón, michoacano, y se cambió la
decisión. Por el PAN fue Luisa María Calderón.
Según Luisa María Calderón, ella le pidió a Omar Fayad que no se
estableciera el diálogo con los michoacanos, porque si eran de
Apatzingán, seguramente tenían vínculos con Los Caballeros Templarios,
pero Omar Fayad le explicó que era una disposición de la Mesa Directiva
y debían cumplirla; según el relato del propio Fayad, ofrecido el
martes, él evaluó que no podía aplicar un criterio de prejuicio por el
origen de quienes buscaban el diálogo con el Senado.
Raúl Morón, del PRD, explicó a Excélsior que “yo,
con toda franqueza, no ubico, no identifico a la gente que ahí estaba
como participante de este grupo delictivo, de ninguna manera”.
El relato que fue compartido con la Mesa Directiva establece que el
propio Omar Fayad explicó a los visitantes que la tardanza se debió a
que la reunión no estaba programada, que los senadores estaban en
sesión, que había varias votaciones y que no iban a tener mucho tiempo.
Los visitantes plantearon sus demandas. Acusaron que el gobierno de
Felipe Calderón era responsable de la crisis de seguridad en Michoacán,
porque él le declaró la guerra a los narcotraficantes y esa lucha sólo
generó más violencia y ahora la situación en el estado es lamentable,
dice el relato que le fue reportado a la Mesa Directiva.
Pero Luisa María Calderón aseguró que los visitantes dijeron que fue a
ellos a quienes el ex presidente Felipe Calderón les declaró la guerra;
que ante eso, ella prefirió salirse, porque además, cuando escuchó los
nombres de dos de los 10 visitantes, los identificó como integrantes de Los Caballeros Templarios; ella se refiere a Juan Polvos Mancilla, director, del Conalep de Apatzingán y al empresario Tito Fernández Torres.
El equipo de Servicios Parlamentarios fue hasta la sala seis para
avisar a los senadores que estaban en votación. Justo ese día votaban
cambios al transitorio de la Ley General de Seguridad Pública para
prolongar la depuración de los cuerpos policiacos y la obligación de la
pensión alimentaria.
“Estuvimos atentos a las peticiones que estuvieron haciendo, los
planteamientos que estuvieron haciendo, pero en ese momento estábamos en
votaciones acá en el pleno, entonces nos separamos de la reunión,
después de un rato de estar ahí platicando con ellos, y ya no fui
enterado de que continuó o no continuó, entonces ya no regresé a la
reunión”, explicó Raúl Morón.
Jorge Luis Preciado, coordinador de los senadores del PAN y Emilio
Gamboa, coordinador de los senadores del PRI, relataron que Luisa María
Calderón les informó que entre los 10 visitantes estaban dos integrantes
del grupo de Los Templarios y se acordó que ya no regresaran los senadores; sólo Omar Fayad para despedirlos.
Omar Fayad relató el martes que él les explicó que la reunión no
podía continuar; que dejaran sus peticiones y la Comisión las iba a
analizar en su momento.
De inmediato, el personal de Servicios Parlamentarios le indicó que
debían retirarse del edificio. Los acompañaron a la recepción para que
les entregaran sus identificaciones y los acompañaron hasta la salida,
como lo marca el protocolo de seguridad. Ellos se dirigieron a su
contingente y 15 minutos después se retiraron. Eran las 15:20 cuando la
sesión del pleno del Senado terminó y los michoacanos se retiraron a las
13:30.
Fayad califica de “fantasiosa” a Cocoa; “¿por qué no denunció?”
Son “fantasiosas” las declaraciones de la senadora del Partido Acción Nacional (PAN) Luisa María Calderón sobre la presencia de Los Caballeros Templarios en el Senado, consideró Omar Fayad Meneses, presidente de la Comisión de Seguridad.
“Creo que ahí media un tema político, pero no quiero pecar. Para la señora todos son Caballeros Templarios,
pues me parece que hay un dicho muy serio que tendrá que enfrentar.
¿Por qué no se trasladó a la Procuraduría de la República y dijo ‘aquí
están Los Templarios’? Me parece hasta fantasiosa su percepción”, afirmó.
En entrevista con Ana Paula Ordorica para Grupo Imagen Multimedia,
el senador del Partido Revolucionario Institucional (PRI) aseveró que
no descalifica las acusaciones de la panista; sin embargo, tendría que
aclarar por qué no lo denunció en su momento ante las autoridades
correspondientes.
“No la descalificó diciendo que no lo creo. Si la senadora tiene
pruebas de que un grupo de manifestantes, 400, que fueron al Senado, que
entró una comisión ejecutiva para atenderla son miembros de Los Caballeros Templarios,
¿por qué no los ha denunciado?, ¿Desde cuándo tiene esa información?,
¿Qué pruebas tiene?, ¿Por qué permite que tengamos un diálogo con
ellos?”, cuestionó.
Asimismo, explicó que durante la reunión del 17 de octubre, en la que
una comisión de 10 manifestantes procedentes de Apatzingán, sólo se
pidió a los senadores un punto de acuerdo para restablecer el orden y la
paz en Michoacán.
“No me atrevería a opinar sobre el tema. Querían un punto de acuerdo
para que se restablezca la paz, querían que los senadores lo prepararan.
Además fueron y pidieron la posibilidad de una reunión con la
Secretaría de Gobernación”, afirmó.
En cuanto a la identificación, el priista afirmó que no tiene las
pruebas de que los manifestantes pertenezcan al crimen organizado, y
apuntó que los manifestantes no hicieron alguna petición en beneficio de
Los Templarios.
“Jamás se platicó de otra cosa. En lo absoluto pidieron algo del
crimen, ningún reclamo en ese tipo. Pusieron en vivo la situación de
Michoacán, exigían que regrese el Estado de derecho, ese era todo el
tema”, apuntó.
Tras la reunión, contó Fayad Meneses, se entregaron los reportes de
la misma a la Secretaría de Gobernación pero “sin calificar los hechos”.
“Evidentemente que informe cabalmente de la reunión a quienes tenía
que informarles, y obviamente la reunión y la solicitud la mandé a la
Segob para que la valorara, sin calificar los hechos. No los puedo
calificar”, puntualizó.
En cuanto a la denuncia que el Senado presentó ante la Procuraduría
General de la República, misma que confirmó Mariana Benítez,
subprocuradora Jurídica y Asuntos Internacionales de la dependencia, el
senador adelantó que apoyará cualquier determinación del líder
senatorial Raúl Cervantes.
Desmienten en Michoacán reunión de Reyna con narcos
El ex secretario de Seguridad Publica de Michoacán, Elías Álvarez
Hernández, desmintió haber recibido un informe sobre supuestas reuniones
del ahora secretario de Gobierno, Jesús Reyna García, con integrantes
de la delincuencia organizada.
Entrevistado vía telefónica por Grupo Imagen Multimedia,
el ex funcionario michoacano, activo actualmente en la Comisión
Nacional de Seguridad Pública, negó haber ordenado una investigación de
lo que pasaba en las campañas electorales de 2011, época en la que él
ocupaba la función de Comisario de la Policía Federal en Michoacán.
“No tengo ningún informe en mis manos de ese tipo, jamás solicité una
orden de investigación en contra del gobierno del estado o del área del
estado”, comentó.
Sobre versiones de que si el secretario de Gobierno se habría reunido
con cabezas del crimen organizado de Michoacán, Fausto Vallejo reiteró
su confianza en Reyna García.
“Cuando él lo determine lo va a aclarar, por mi parte decirles que
tengo confianza en él y por eso es mi secretario de Gobierno.”
(EXCELSIOR/ Leticia Robles de la Rosa / 22/11/2013 06:37)
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