México
es el cuarto país a nivel mundial en cuanto a cantidad de recursos recibida por
las remesas, que en su mayor parte provienen de Estados Unidos. Con su arribo
al poder de Donald Trump sumerge en la incertidumbre a miles de familias
mexicanas que ven peligrar uno de los sustentos básicos de su economía.
Michoacán, Guanajuato y Jalisco son los estados donde más las reciben. En los
primeros once meses de 2016, la cifra acumulada ascendió a 24.626 millones de
dólares de dinero recibido en todo el país, lo que supuso un 9.04 por ciento
más que el año anterior y el mayor incremento anual en una década.
Las
remesas enviadas a México subieron 9.04 % hasta noviembre de 2016
Isabel
Reviejo
Ciudad
de México, 21 de enero (EFE).- Con su llegada al poder Donald Trump en Estados
Unidos sumerge en la incertidumbre a miles de familias mexicanas que ven
peligrar uno de los sustentos básicos de su economía, las remesas, que son la
segunda fuente de ingresos del país por detrás de las exportaciones automotrices.
Si
el republicano cumple las amenazas que esgrimió durante la campaña electoral,
Estados Unidos podría bloquear las remesas que los migrantes mexicanos envían a
su país o gravarlas con impuestos para financiar el muro que pretende construir
a lo largo de la frontera, en caso de que México se niegue a pagarlo, como
exige Trump.
La
imposición de un gravamen, la opción más probable, “es un golpe muy fuerte para
la actividad y el poder adquisitivo de la población, que es la más necesitada
de nuestro país”, afirmó a Efe Víctor Manuel Prudencio, profesor de Estudios
Internacionales en la Universidad Iberoamericana.
México
es el cuarto país a nivel mundial en cuanto a cantidad recibida por las
remesas, que en su mayor parte provienen de su vecino del norte.
En
los primeros once meses de 2016, la cifra acumulada ascendió a 24 mil 626
millones de dólares, lo que supuso un 9.04 por ciento más que el año anterior y
el mayor incremento anual en una década.
“Para
una gran cantidad de bajos recursos, es su forma de ingreso”, destaca
Prudencio.
Es
más, considera que el auge de las remesas del país -cuyo monto no deja de
ascender desde 2013- implica “varios problemas sociales”.
Más
de mil 29 millones de hogares dependen económicamente de este sustento; incluso
existen municipios enteros que, acompañados por altos índices migratorios, se
vertebran con este recurso.
De
acuerdo con el académico, en estas zonas se está dando un “factor muy
importante”.
“Esos
recursos que están recibiendo ahora ocasionan que muchos de ellos no trabajen y
estén viviendo con las remesas que están llegando de EU”, lamenta.
GM
da detalles de su traslado a EU y México, con un Presidente parado y sin plan
b, sólo observa
Una
opción favorecida por la caída del peso mexicano frente al dólar, que ha hecho
que muchas familias hayan visto aumentada su fuente de recursos durante los
últimos meses, ya que reciben las remesas en la divisa estadounidense.
Michoacán
es el estado al que más dinero llega por ese concepto (el 10,1 por ciento del
total), seguido por Guanajuato (9.1 por
ciento) y Jalisco (8.9 por ciento), de acuerdo con el Anuario Migración y
Remesas elaborado por el Consejo Nacional de Población y la Fundación Bancomer
y BBVA Research México.
Si
se contempla qué regiones tienen una mayor dependencia de este ingreso,
Michoacán continúa a la cabeza, seguido por Guerrero y Oaxaca.
Los
fondos de las remesas se utilizan, principalmente, para gastos básicos, comida
y vestido. También para otros como el pago de deudas o de la vivienda, añade el
estudio.
Tras
la victoria de Trump en noviembre, los analistas han alertado de que en el
último mes de 2016 podría verse un aumento del envío de remesas en las
estadísticas.
Un
incremento que según estimaciones de Prucencio será de entre un 10 y un 20 por
ciento, por el temor de muchos migrantes de ser deportados cuando se pongan en
marcha las políticas del nuevo Gobierno.
El
Presidente de México, Enrique Peña Nieto, advirtió que una de las condiciones
que interpondrá el país para establecer una negociación con el próximo Gobierno
estadounidense es que se “mantenga el libre flujo de remesas”, dada la
importancia que este recurso tiene para familias de bajos recursos.
Las
medidas del republicano, si se cumplen, ocasionarían que “las familias que
están recibiendo este dinero en México van a tener un descalabro en su poder
adquisitivo”, remata Prudencio.
El
cambio de rumbo en la era Trump también va dirigido a la prensa
(SIN
EMBARGO.MX/ EFE/ ENERO 21, 2017 - 2:41 PM)
No hay comentarios:
Publicar un comentario