Fotos: Cortesía
El corredor Baja California-California
concentra el 75 por ciento del fentanilo que ingresa a Estados Unidos por la
frontera de México. Esta droga es fabricada en territorio mexicano con químicos
enviados desde China, es la más letal y deja el margen de ganancias más grande
a los narcotraficantes que cualquier otra droga. Y así, sus decomisos en México
escasean
César Daleo recoge un paquete
de uno de los cientos de apartados postales ubicados en San Ysidro, California,
comunidad a pasos de la frontera con Tijuana. Es la 1:40 de la tarde del 29 de
agosto y desde cerca, agentes federales observan sus movimientos.
Días antes, autoridades
estadounidenses habían detectado en las instalaciones del servicio postal en
Los Ángeles, California, un paquete enviado desde China que contenía 4-ANPP,
precursor químico para fabricar fentanilo, una droga sintética 100 veces más
fuerte que la morfina y 50 veces más potente que la heroína.
La peligrosa sustancia fue
sustituida por otra que guardaba la misma apariencia y así, el paquete fue
llevado hasta su destino final en San Ysidro para rastrear a quien lo
recibiría. Daleo estaba autorizado para recoger el correo del apartado postal
que aparecía en la dirección de la caja.
Al salir del negocio, Daleo
camina hasta su automóvil Chevrolet Malibu blanco año 2015 y después de
permanecer unos minutos en el asiento del conductor, se dirige hacia la cajuela
y saca la bolsa con el polvo blanco de la caja, para colocar ambas en la
cajuela.
De ahí, conduce por la
Autopista 5 con dirección a Tijuana. En ese momento es interceptado por agentes
de la Agencia Antidrogas (DEA, por sus siglas en inglés).
César Daleo había trabajado
como agente de la Patrulla Fronteriza de 2002 a 2013. Durante ese periodo,
destacó por su trabajo como investigador de casos relacionados con tráfico de
personas y de drogas.
Sin embargo, dejó ese empleo
para dedicarse a bienes raíces en el sur de California. Conocidos afirman que
su éxito en la venta y compra de propiedades le dejó fuertes ganancias, pero el
dinero no duró.
Durante su entrevista con
agentes de la DEA, Daleo, de 47 años de edad, declaró que vivía en un
condominio en México y presentó una credencial de elector de este país como
identificación.
Alfonso Flores, nombre
registrado en el apartado postal adonde llegó el químico, era su socio en un
negocio dedicado a la distribución de comida en México, se explica en la
acusación presentada por la Fiscalía del Distrito Sur de California.
Daleo también admitió haberse
coordinado con otra persona para recibir paquetes enviados de China. Desde
diciembre de 2016, había recogido 13 paquetes en ese apartado postal e incluso
mostró fotografías de los envoltorios a los agentes.
“Daleo no sabía qué era
exactamente el polvo, pero entendía que se usaría para producir e incrementar
el peso de drogas ilegales”, concluye la acusación.
El paquete que recogió Daleo
contenía un kilogramo de 4-ANPP, que se usaría para producir hasta 25
kilogramos de fentanilo en un laboratorio clandestino de Tijuana para ser
traficado hacia Estados Unidos.
Recluido en la correccional
metropolitana de San Diego, César enfrenta cargos de conspiración para posesión
de un químico para manufacturar fentanilo.
En su audiencia del 1 de
septiembre, el ex agente de la Patrulla Fronteriza entró a la Corte minutos
después de que se presentara Álvaro López Núñez, hermano de Dámaso López Núñez
“El Licenciado”, uno de los líderes que se disputaba el control del Cártel de
Sinaloa. El caso de Daleo es una muestra de la forma de operar de los cárteles
mexicanos y chinos para la fabricación y venta de fentanilo. Un reporte de la
DEA, publicado en junio de 2017, indica que China y México son los países de donde
proviene el fentanilo que se trafica a Estados Unidos para abastecer el mercado
nacional para su procesamiento y distribución.
Los decomisos indican que
China aporta volúmenes menores, pero de más alta pureza, al contrario de México
que concentra cantidades mayores, pero con menor calidad. China por medio de
internet.
La DEA ha detectado que los
precursores químicos para el fentanilo se adquieren desde China. De ahí se
envían principalmente a México -a veces pasando por Estados Unidos, otras veces
de manera directa- para su fabricación y su trasiego a territorio estadounidense.
Por ejemplo, entre 2005 y
2007, alrededor de mil 13 muertes en Estados Unidos tuvieron como causa la
sobredosis de fentanilo que se encontraba mezclado con heroína. Al rastrear el
origen de la droga, agentes de la DEA ubicaron un laboratorio clandestino en
Toluca, Estado de México.
UNA DROGA PARA SEDAR ELEFANTES
El fentanilo es una droga
sintética derivada de los opioides utilizada con fines analgésicos y
anestésicos. En la década de los sesentas, se inició su uso en la industria
farmacéutica y sus presentaciones incluyen pastillas, parches e incluso en
forma de spray.
Sin embargo, fue después del
año 2000 que su uso comenzó a aumentar. De acuerdo con la DEA, 6.5 millones de
recetas de fentanilo fueron prescritas por médicos a lo largo de Estados Unidos
en 2015.
La fuerte dependencia que
causa este medicamento ocasionó que miles de estadounidenses lo buscaran en las
calles, sin recetas médicas y muchas veces, mezclado con otras drogas como
heroína o metanfetaminas.
De abril de 2005 a marzo de
2007, mil 013 muertes fueron ocasionadas por sobredosis de fentanilo en Estados
Unidos. Cada año, la cifra aumenta. Tan solo en 2016, médicos forenses
determinaron que más de 60 mil personas murieron por sobredosis de heroína,
fentanilo y demás opioides.
El fentanilo es
comercializado en el mercado negro en diferentes presentaciones, desde
pastillas para su toma oral, hasta polvo para ser inyectado, inhalado o fumado.
Información del Departamento de Justicia indica que dos miligramos bastan para
matar a una persona por sobredosis.
Los síntomas de sobredosis
empiezan con pérdida del conocimiento, pupilas dilatadas, letargo y falla
respiratoria.
Si bien la droga es buscada
directamente por sus fuertes efectos, un gramo de fentanilo es equivalente a
100 gramos de heroína de buena calidad, hay casos de personas que la
consumieron sin saberlo.
Foto: Jorge Dueñes.- Decomiso en
Imperial Valley
En 2017, agentes en el sur de
California decomisaron 20 mil pastillas adulteradas de oxicodona, un fuerte
analgésico, que contenían fentanilo. Los enervantes fueron traficados desde
México.
Sin embargo, hay drogas más
letales que el propio fentanilo. Se trata de su derivado, el carfentanilo, 100
veces más fuerte que el fentanilo, una potencia que sirve para sedar elefantes,
por lo que 0.02 miligramos son suficientes para matar a una persona.
75% DEL FENTANILO EN ESTADOS UNIDOS ENTRA POR TIJUANA
De acuerdo con la fiscal del
distrito sur de California, Alana M. Robinson, el 75 por ciento del fentanilo
que ingresa a Estados Unidos desde México, lo hace a través de la frontera
Tijuana-San Diego.
En el año fiscal 2015,
agentes de Aduanas y Protección Fronteriza (CBP, por sus siglas en inglés)
decomisaron 30 kilogramos de fentanilo en el sector San Diego en seis eventos
diferentes.
Un año después, la cantidad
incrementó a 223 kilogramos que resultaron de 19 decomisos. Y en el año fiscal
2017, se hallaron 480.54 kilogramos de la esta droga en 54 decomisos. Las
cifras, explicaron autoridades estadounidenses en conferencia de prensa,
resultan preocupantes.
El fentanilo es popular entre
los cárteles del narcotráfico no solamente por su alta demanda en Estados
Unidos, donde prevalece una fuerte epidemia de adicción a opioides, lo es
además por sus altos márgenes de ganancia.
Según cálculos del
Departamento de Justicia, un kilogramo de fentanilo con costo de 32 mil dólares
puede dejar ganancias de hasta 20 millones de dólares. Cada kilogramo produce
hasta un millón de píldoras que tienen un costo individual de 20 dólares.
“Los cárteles prefieren esta
droga por dos razones: pueden hacer una cantidad de dinero muy grande por
vender fentanilo y la otra razón es que hay mucha gente que quiere consumir
fentanilo porque los drogadictos siempre quieren un efecto más fuerte, y este
fentanilo es más fuerte que la heroína o morfina”, declaró la fiscal Robinson.
Aunque no nombró a un cártel
específico que controle el flujo de esta droga, en la región de Baja California
operan el Cártel de Sinaloa y el Cártel Jalisco Nueva Generación,
principalmente a este último se le atribuye la producción y tráfico del
fentanilo.
SON POCOS LOS DECOMISOS EN BAJA CALIFORNIA
De enero a septiembre de
2017, solo 14 kilogramos 920 gramos y 7 mil 899 comprimidos de fentanilo se han
decomisado en Baja California, según datos proporcionados por la Procuraduría
General de la República (PGR).
Esta cifra es 34 veces menor
a lo que se ha decomisó de octubre de 2016 a septiembre de 2017 en la frontera.
Y en los registros nacionales de decomisos hechos por la Secretaría de la
Defensa Nacional (Sedena) y por la PGR, el fentanilo ni siquiera figura.
Para dar una idea de los
decomisos de esta droga que se hacen en la calle, un frasco de 10 mililitros y
una ampolleta de dos mililitros fue todo lo que el Ejército encontró en lo que
va de este año.
Se trata de decomisos
esporádicos como el ocurrido el 24 de abril, cuando agentes de la Policía Federal
localizaron 500 mililitros de fentanilo en el área de carga del Aeropuerto de
Tijuana. Se encontraba dentro de cinco recipientes de plástico procedentes de
Irapuato, Guanajuato.
El decomiso más grande este
año fue de 16 kilogramos, según información de la Policía Estatal Preventiva
(PEP). El 21 de septiembre, elementos de eta corporación detuvieron a Sergio
Alberto Morales Mejía, originario de Michoacán y de 27 años de edad.
Llevaba en un vehículo
Volkswagen Passat 2006 con placas de California, 27 kilogramos de “cristal” y
16 de fentanilo, que en un principio fue confundido con heroína blanca por los
agentes.
DOSIS LETAL DE CARFENTALINO
Sin embargo, cuando la droga
fue examinada por químicos de la PGR, los resultados arrojaron que se trataba
de fentanilo.
Hasta la fecha, el decomiso
más grande de fentanilo en la frontera ocurrió en el retén militar de San Luis
Río Colorado, Sonora. En un tractocamión, se ocultaban 63.8 kilogramos de esta
droga, el 19 de agosto. El vehículo de carga salió de Ciudad de México y tenía
como destino Tijuana.
EL APETITO INSACIABLE DE EU POR DROGAS
En 2016, alrededor de 60 mil
personas perdieron la vida al sufrir sobredosis por opioides, principalmente la
heroína, en Estados Unidos. Es el primer año, en todo el país, que las muertes
por sobredosis han sobrepasado cualquier otra causa de muerte.
San Diego no es la excepción.
La Fiscalía del Condado de San Diego reportó el deceso de 250 personas por
sobredosis con analgésicos derivados de opioides, 99 personas por heroína y 25
por fentanilo, en 2016.
En lo que va del presente
año, las muertes por fentanilo han aumentado a 40 y once casos más están en
espera de confirmación.
“Es como heroína con esteroides.
Hay personas que después de un uso, toda su vida gira alrededor de cómo
conseguir la siguiente dosis”, expresó Summer Stephan, fiscal del Condado de
San Diego, quien añadió que este año se procesó a un vendedor de drogas por
homicidio, luego de que una persona que le compró fentanilo, muriera por
sobredosis.
Alana M. Robinson, fiscal
federal del Distrito Sur de California, explicó de los efectos de esta droga:
“Es un problema muy grave, fatal, está matando nuestra gente en cantidades que
no habíamos visto”.
Por su parte, Pete Flores,
director de operaciones del CBP en San Diego, señaló que los métodos de
trasiego en la frontera siguen los mismos patrones del resto de las drogas como
compartimentos ocultos en vehículos o escondidos en personas.
Aunque explicó que en la
mayor parte de los decomisos, el fentanilo se trafica entre heroína,
metanfetamina y cocaína.
También señaló que los
agentes aduanales han recibido nuevo equipo basado en lecturas electrónicas
para detectar el fentanilo y otras drogas.
En su visita a México en
julio, el entonces secretario de Seguridad Interna de Estados Unidos y hoy
coordinador de gabinete de la administración de Donald Trump, John Kelly, habló
sobre la lucha contra el fentanilo.
“Estamos tratando de disuadir
el tráfico de drogas ilegales, heroína, cocaína y fentanil, lo que está
verdaderamente inundado el mercado, y esto está resultando en muertes en ambos
países”, declaró ante medios de comunicación.
“Este apetito insaciable de
Estados Unidos por drogas, es una de las causas raíz de los problemas en ambos
lugares, a ambos lados de las fronteras”, concluyó.
(SEMANARIO ZETA/ EDICIÓN IMPRESA / INÉS GARCÍA RAMOS/
LUNES, 23 OCTUBRE, 2017 12:00 PM)
No hay comentarios:
Publicar un comentario