*El gobierno
federal manda a los soldados para impedir el trabajo de la autodefensa y los
delincuentes operan de nuevo, dice el comandante del SSJC
El comandante del
Sistema de Seguridad y Justicia Ciudadana (SSJC), también conocido como
movimiento de autodefensa contra la delincuencia organizada creado por la Unión
de Pueblos y Organizaciones del Estado de Guerrero (UPOEG), Ernesto Gallardo
Grande, afirmó que repuntó la delincuencia organizada en San Marcos, después de
la marcha del sábado pasado de la Policía Ciudadana y sociedad en general, por
el Día Internacional por la Paz y la No Violencia, pues comerciantes y
empresarios, ayer le reportaron que el crimen organizado volvió a solicitar
cuotas a los negocios, y hay nuevas amenazas contra los policías ciudadanos.
Gallardo criticó
severamente el hecho de que la delincuencia organizada haya regresado al
municipio a pesar de que existen cinco retenes militares en San Marcos.
“Por eso hacemos un
llamado al gobierno del estado para solicitar medidas cautelares de nuestra
misma gente, que sean ellos los que nos vigilen pues confiamos más en nuestra
Policía Ciudadana que en los policías establecidos, que mejor nuestra gente
reciba un salario sabiendo que nos cuidaran y no nos traicionaran, no estamos
en contra del narcotraficante pero sí en contra de los delincuentes
organizados, tal parece que ellos son cómplices de estos delincuentes porque el
gobierno federal manda a sus militares para replegarnos y los delincuentes
operan de nuevo, de nada sirve tener sitiado el municipio de San Marcos, si
sólo lo hacen para impedir el trabajo de la Policía Ciudadana y no para
capturar a los mañosos”, manifestó Gallardo Grande.
Agregó que el
gobierno tiene que reconocer que se ha
equivocado y que entienda que con el hostigamiento hacia el pueblo organizado,
sólo ha provocado que la delincuencia repunte, pues cuando observan que los
policías ciudadanos se repliegan es cuando salen a operar, además recordó que
no todos los policías ciudadanos de la Costa Chica viajan a El Ocotito,
Chilpancingo, para reforzar la seguridad en el valle, puesto que no pueden
dejar sin seguridad los municipios de la región, pero manifestó que es
importante que haya una rotación de compañeros porque los que están en El
Ocotito, necesitan ver a sus familias y descansar.
“El gobierno debería
de coordinarse con los policías ciudadanos para acabar con la inseguridad en el
estado, pero mientras no reconozca que necesita ayuda, Guerrero, seguirá
reportando muertes, extorsiones, secuestros, y la violación de derechos
humanos”, finalizó Ernesto Gallardo.
(De la
corresponsalía / San Marcos).
(EL SUR DE
ACAPULCO/CORRESPONSALÍA/ FEB 3, 2014)
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